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» Elterritorio
Fecha: 19/03/2025 20:28
Un informe de Climate Central revela que el 84% de la población sudamericana experimentó 30 días de calor extremo entre diciembre y febrero, con la Argentina como el país más impactado. El calentamiento global agudiza fenómenos climáticos extremos, según la Organización Meteorológica Mundial. miércoles 19 de marzo de 2025 | 17:19hs. América del Sur fue una de las regiones más afectadas por las olas de calor durante el último verano, según un informe de la organización científica internacional Climate Central. Entre diciembre de 2023 y febrero de 2024, el 84% de la población sudamericana experimentó al menos 30 días de temperaturas extremas que, de no ser por el calentamiento global, no habrían ocurrido. La Argentina se destacó como el país con las mayores anomalías térmicas, registrando un aumento de casi 1°C en comparación con el promedio de los últimos 30 años (1991-2020). Este fenómeno se enmarca en un contexto global alarmante: 2023 fue declarado el año más caluroso en los últimos 175 años, según la Organización Meteorológica Mundial (WMO). El informe anual de la WMO confirma que la crisis climática está intensificando fenómenos extremos en todo el planeta, con consecuencias devastadoras para los ecosistemas, la economía y la salud pública. Argentina y Chile, los más afectados El reporte de Climate Central destaca que, junto con Chile, la Argentina fue el país que más días de riesgo por calor registró en la región: 40 en total, de los cuales 18 están directamente vinculados al cambio climático. Dentro del territorio argentino, la ciudad de Córdoba fue la más afectada, con un aumento inusual de 1,2°C y 22 días de calor extremo. Le siguieron Buenos Aires (0,7°C más) y Rosario (0,6°C más). Estas dos ciudades figuran en el top 10 de las urbes sudamericanas con mayores aumentos de temperatura, ocupando el primer y décimo puesto, respectivamente. Estas anomalías térmicas no solo representan un riesgo para la salud pública, sino que también tienen impactos significativos en la infraestructura y las economías regionales. Según Climate Central, el cambio climático, impulsado por el aumento de gases de efecto invernadero debido a las actividades humanas, es el principal factor detrás de estas temperaturas extremas. Un fenómeno con múltiples consecuencias El informe de la WMO subraya que el calentamiento global no solo se manifiesta en olas de calor, sino también en una multiplicidad de fenómenos climáticos extremos. En 2023, inundaciones, sequías, incendios forestales y huracanes causaron desplazamientos masivos de población, pérdidas económicas millonarias y una crisis alimentaria en al menos 18 países. La meteoróloga argentina Celeste Saulo, presidenta de la WMO, advirtió: "Nuestros océanos siguen calentándose, el nivel del mar continúa en aumento y la acidificación se intensifica. Los glaciares retroceden y el hielo marino de la Antártida alcanzó su segunda extensión más baja jamás registrada". Impactos locales y globales En la Argentina, los efectos del cambio climático ya son evidentes. Las inundaciones en Bahía Blanca y otras regiones, así como los incendios forestales en Neuquén, son ejemplos recientes de cómo los fenómenos extremos están afectando al país. A nivel global, el informe de la WMO señala que 2023 fue el año con más desplazamientos humanos debido a eventos climáticos extremos, superando cifras no vistas en casi una década. Además, la degradación de los ecosistemas marinos es otra consecuencia alarmante. El aumento de la temperatura y la acidificación de los océanos están alterando la vida marina, lo que a su vez impacta en actividades económicas como la pesca y el turismo. El hielo permanente del planeta también se está derritiendo a un ritmo sin precedentes, con pérdidas récord en glaciares y capas de hielo. Una llamada a la acción La WMO enfatiza la necesidad de fortalecer los sistemas de alerta temprana y los servicios climáticos para mitigar los impactos de estos fenómenos. Sin embargo, solo la mitad de los países del mundo cuentan con estas herramientas. "Estamos avanzando, pero debemos ir más lejos y más rápido", afirmó Saulo. El informe también destaca que, aunque 2023 superó el umbral de 1,5°C de calentamiento global, esto no significa que los objetivos del Acuerdo de París estén fuera de alcance. "Es una llamada de atención para que tomemos medidas urgentes", concluyó Saulo. En un mundo donde las actividades humanas siguen siendo el principal motor del cambio climático, la transición hacia energías limpias y prácticas sostenibles se vuelve cada vez más urgente. La crisis climática ya está aquí, y sus efectos son cada vez más difíciles de ignorar.
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