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Concordia » Hora Digital
Fecha: 19/03/2025 17:05
La intendenta Kirchnerista de Victoria aumentó de forma drástica las tasas por carga de animales, generando malestar en los productores de la zona. En medio de la creciente preocupación de los ganaderos isleños por el valor de las tasas de carga y descarga de hacienda en las islas del Delta por parte del municipio de Victoria, el Gobierno de Entre Ríos, junto con la Sociedad Rural local y la Comunidad Islera Asociación Civil, se encuentran en la etapa final buscando la habilitación de al menos tres puertos alternativos en la traza vial del río Paraná. La intendenta kirchnerista, Isa Castagnino, aprobó una ordenanza en abril de 2024 que incrementó de manera desproporcionada el costo por cada animal que entra o sale de las islas en barcazas. Antes de esta nueva normativa, el cobro máximo por animal era de $300. Con la modificación, el cálculo se realiza en base a un peso que oscila entre dos y cuatro kilos por animal, llegando a superar los $12.000. Según la ordenanza, se establece un costo de dos kilos por las primeras 100 cabezas, tres kilos de 101 a 400 animales, y cuatro kilos para más de 400 cabezas, todo calculado según el índice de novillo del Mercado Agroganadero. Eduardo Grimaux, presidente de la Sociedad Rural de Victoria, criticó duramente esta medida, señalando que el municipio brinda un servicio deficiente, generando un impacto económico negativo en los productores. Ante esta situación, se han realizado gestiones para habilitar puertos alternativos en el corredor vial 174 con el objetivo de aumentar la competencia y brindar opciones a los productores. Leonardo Scarparo, presidente de la Comunidad Islera Asociación Civil, también expresó su descontento con el incremento de los costos de producir en la isla, destacando los altos gastos y el impacto negativo en la rentabilidad de los negocios ganaderos locales. La lucha por reducir el valor de las tasas y habilitar puertos alternativos continúa, en busca de soluciones que beneficien a los productores y promuevan la competitividad en la zona. La expectativa de la comunidad rural y de las autoridades provinciales es que las gestiones realizadas con Vialidad Nacional culminen pronto en la habilitación de nuevos puertos, permitiendo una operatividad más eficiente y costos más acordes a la realidad del sector. La incertidumbre respecto a la resolución de este conflicto se mantiene, mientras que los productores enfrentan un escenario desafiante para mantener la producción de hacienda en las islas del Delta.
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