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» Radiosudamericana
Fecha: 17/03/2025 22:39
Lunes 17 de Marzo de 2025 - Actualizada a las: 21:31hs. del 17-03-2025 CONSUMO El analista Fabián Gauna explicó en Canal 5TV por qué la percepción de los ciudadanos sobre la inflación no coincide con los índices oficiales. Criticó la metodología de medición, advirtió sobre el impacto de la recesión y destacó el rol del Fondo Monetario Internacional en la economía argentina. La percepción de la inflación que tienen los ciudadanos no coincide con los números oficiales. Según el analista económico Fabián Gauna, esto se debe a que el índice de precios al consumidor se mide con un sistema "viejo", basado en datos desactualizados. En diálogo con Canal 5TV, el especialista explicó que la medición en Argentina aún se basa en el consumo del año 2004, cuando ya debería haberse actualizado en 2017. "Hoy tenemos un indicador que está viejo. Nos está tomando lo que nosotros consumíamos en 2004. El nuevo indicador estaba listo para salir en 2017, pero entre la pandemia y la decisión política de no actualizarlo, sigue midiendo con parámetros obsoletos", detalló Gauna. El economista explicó que, debido a esto, la inflación oficial no refleja correctamente el impacto del aumento de los servicios públicos en los gastos de los hogares. "Lo que no se está midiendo es la parte de servicios públicos. Hoy representa un 5,5% del índice total, pero con la base de 2017 debería ser de 11 o 12%. Si se midiera correctamente, el índice total sería más alto, cerca del 20%", advirtió. Esto, no habría sido “2,4% sino cerca del 3,5%”, señaló el especialista. Gauna también analizó el impacto de la política económica actual y aseguró que la baja de la inflación se debe a la recesión y no a un crecimiento genuino. "El presidente decía en 2018 que cualquier idiota baja la inflación con recesión. Y eso es lo que está pasando ahora. No se está generando más producción, sino que la gente deja de consumir porque no le alcanza el dinero", sentenció. En ese sentido, señaló que la caída del consumo es constante y que los ingresos de los trabajadores formales no acompañan el ritmo inflacionario. "Si la inflación mensual es del 2,5% y los aumentos salariales promedian el 1% por mes, el poder adquisitivo cae. Los consumidores dejan de comprar porque no pueden costear los mismos productos que el mes pasado", explicó. Sobre el impacto de la importación de ropa y calzado, Gauna anticipó que, aunque los precios puedan bajar, esto no será beneficioso para la economía: "Si entra ropa importada a un 40% menos del valor actual, las empresas locales se van a sobrestockear, van a empezar con suspensiones y despidos. En seis u ocho meses habrá más desempleo y la gente no podrá comprar ni siquiera esos productos más baratos. La gente no tiene plata para comprar". “Hay que bajar la inflación porque hay mayor cantidad de productos, no porque la gente deje de comprar porque a la gente no le alcanza la plata”, señaló. En este sentido, sostuvo que hay que incentivar el consumo, la producción y el tratamiento legislativo de cuestiones referidas a los servicios como la energía. Otro punto al que se refirió el analista es el papel del Fondo Monetario Internacional (FMI) en la economía argentina y las negociaciones actuales con el gobierno. Según Gauna, el organismo exige evitar conflictos sociales antes de cerrar un acuerdo. "El FMI no quiere manifestaciones en la calle. Por eso el gobierno tuvo que mandar la ley de sostenibilidad de la deuda al Congreso. Pero hasta que no haya un memorándum de entendimiento, el acuerdo es una incógnita", explicó. El economista comparó la situación actual con la de 2018, cuando el FMI otorgó un crédito de 45 mil millones de dólares a Argentina. "Después de ese préstamo, los directivos del Fondo tuvieron que irse. Nadie quiere quedar marcado como el que negoció un acuerdo que no se podrá pagar", advirtió. Finalmente, Gauna hizo referencia al futuro del acuerdo con el FMI: "Desde la oposición ya dijeron que, si llegan al gobierno, no reconocerán el pacto. Si Argentina y otros países endeudados como Egipto se negaran a pagar, el FMI entraría en crisis".
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