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Parana » ER 24
Fecha: 17/03/2025 22:14
Psicología Política. Guillermo Michel, Santiago Halle, Rosario Romero, Emiliano Tutau “Del barrio a la oficina: la transformación de los políticos tras ganar el poder” Por Pichi Blazquez Para Entre Rios 24 Noticias & Opiniones Durante las campañas electorales, los políticos recorren barrios humildes, estrechan manos, se sacan fotos con vecinos y prometen cambios. Sin embargo, una vez en el poder, muchos parecen desaparecer de esos mismos lugares que los vieron pedir votos. Cambian las remeras y los jeans por trajes impecables, sus discursos se vuelven más técnicos, y las reuniones con la gente común se reducen drásticamente. ¿Por qué sucede esto? Del contacto directo al protocolo político En campaña, la cercanía con la gente es una herramienta de marketing electoral. Los candidatos necesitan mostrarse accesibles, empáticos y comprometidos con las problemáticas sociales. Pero, una vez ganadas las elecciones, el entorno cambia. La agenda se llena de reuniones con empresarios, asesores y funcionarios, alejándolos de la cotidianeidad de los barrios. Guillermo Michel de Gualeguaychú pasó a millonarios departamentos y oficinas en Buenos Aires. Rosario Romero paseó en innumerables veces de partido en partido y de cargo en cargo y pasó a ser la madame de la mesa judicial de Paraná o mejor dicho de Entre Rios. Santiago Halle el hijo de Rosario Romero y el ex intendente José Carlos Halle que liquidó las cuentas municipales pero el señor salió rico del sillón municipal no sabe lo que es un barrio, bajar un barrio o recorrer necesitados, solo se enfunda en trajes, camisas y cordobatas y una barba que tapa su rostro. Emiliano Gomez Tutau, el concejal de PJ que recorrió algunos barrios en ojotas y zapatillas rotas y hoy no puede bajar a ninguno de ellos por el fracaso municipal de la intendenta Rosario Romero y porque ya logró parte de su objetivo, estar jugando y chupando las medias de arrib, no necesita de los pobres barriales. Pero se equivocan… Además, el protocolo y la imagen personal comienzan a jugar un papel clave. En muchos casos, se adopta la vestimenta formal como una forma de demostrar autoridad y liderazgo, aunque eso implique distanciarse visualmente de quienes los votaron. Burocracia y desconexión Otro factor determinante es la burocracia gubernamental. Muchos políticos argumentan que, al asumir el cargo, sus tiempos se ven absorbidos por gestiones, trámites y reuniones internas, lo que les impide recorrer los barrios con la misma frecuencia. Sin embargo, esto no justifica la falta de atención a la ciudadanía. Además, el acceso a ellos se vuelve más complicado. Antes, se los encontraba en cualquier esquina en plena campaña; después, las barreras aumentan: secretarios, asesores y filtros que impiden que la gente pueda comunicarse directamente con quienes eligió. ¿Falta de compromiso o estrategia política? Algunos analistas sostienen que este alejamiento responde a una estrategia consciente. Una vez en el poder, muchos políticos consideran que ya no necesitan mantener un contacto cercano con la gente hasta la próxima elección. Su prioridad pasa a ser sostener alianzas políticas, asegurar financiamiento y gestionar la administración pública, dejando en un segundo plano el trato directo con la ciudadanía. La clave: la memoria del votante Si bien este fenómeno se repite en cada ciclo electoral, la ciudadanía tiene en sus manos la posibilidad de exigir transparencia y cercanía. Recordar quiénes realmente estuvieron presentes durante todo el mandato, y no solo en tiempos de campaña, es fundamental para que los políticos entiendan que el voto no es solo un cheque en blanco, sino un contrato de compromiso con la gente. ¿Qué opinás? ¿Los políticos deberían volver a recorrer los barrios como lo hacían en campaña? NUNCA DEBERÍAN DEJAR DE HACERLO
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