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» El Ciudadano
Fecha: 12/03/2025 18:53
Los vecinos de los barrios Mirador del Río, Playa Mansa y Campo de la Ribera en Arroyo Seco no sólo comparten el camino de acceso, sino también las dificultades que enfrentan con cada lluvia, que no son menores, ya que implica quedar aislados o no del mundo según la cantidad de milímetros. La dependencia de estas dos centenares de familias al pronóstico del tiempo y la constante preocupación expresada en el grupo vecinal, donde la pregunta recurrente es «¿cómo está el camino?», reflejan la angustia diaria, que pese a continuos reclamos ante las autoridades estatales aún no tiene solución. Con sólo unos pocos milímetros de lluvia, el camino -ya de por sí deteriorado- se inunda y aísla a los residentes. Esto impide que los niños asistan a la escuela y que los adultos vayan a trabajar. Ante una emergencia de salud, la única esperanza es que un vecino solidario con camioneta 4×4 pueda brindar ayuda, lo que tiene su contracara: el camino se deteriora todavía más. El camino, que conecta la ruta provincial 21 con el río Paraná, se vuelve intransitable en sus primeros dos kilómetros -de oeste a este- debido a las inundaciones. Los vecinos viven en constante alerta, con un bolso listo para autoevacuarse ante las primeras gotas y de paso avisar a algún alma solidaria que le preste residencia fuera de «la isla». Muchos se ven obligados a pasar días fuera de sus hogares, alojándose con familiares, amigos o allegados, sin mencionar el daño que sufren sus vehículos, especialmente la suspensión delantera. Abandono y falta de mantenimiento La situación ha empeorado en el último año. Los vecinos, organizados para exigir soluciones, están cansados de presentar peticiones, reclamar mejoras y escuchar promesas incumplidas de parte de la Municipalidad de Arroyo Seco, según relatan. Después de cada temporal, es común ver vehículos atascados en el barro, conductores que pierden el control y se salen del camino. Incluso un camión recolector y un camión municipal que, a poco de iniciar una de las últimas tormentas, fue a tirar ripio al lugar, quedaron atrapados en el barro. Aunque se rumorea sobre una posible obra, o al menos un mantenimiento serio del camino, no hay nada concreto. Mientras tanto, los vecinos expresan su frustración como pueden incluso en las redes sociales, pero parece que sus voces no llegan al centro de Arroyo Seco.
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