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» LaVozdeMisiones
Fecha: 11/03/2025 00:15
En octubre pasado, una fuerte tormenta con descarga eléctrica dañó la bomba que hacía funcionar el pozo perforado que abastece a 28 familias de la comunidad Guavira Poty en la localidad de Fracrán. Cinco meses después y tras varias gestiones, lograron una nueva instalación. “Después de cinco meses se hizo el pozo. Tuvimos que esperar bastante, pero se nos dio. Y esto para nosotros significa mucho porque como la comunidad no cuenta con un arroyo cerca, sufrimos bastante durante ese tiempo sin agua. Pero ahora ya tenemos el pozo perforado, solo falta una bomba y ultimar detalles”, detalló Rosalino Duarte, cacique de la comunidad, consultado por La Voz de Misiones. La comunidad está constituída por un total de 130 personas distribuídas en 28 familias que habitan en Colonia Santa Rita de Fracrán, desde el año 2005 aproximadamente. En el año 2008 obtuvieron una perforación gestionada a través de la Fundación Vida Silvestre: “En ese momento la fundación trabajaba mucho con las comunidades y llegamos a tener un pequeño proyecto que permitió la gestión e instalación del pozo perforado”. El problema se presentó hace cinco meses atrás cuando esa fuente de abastecimiento del líquido vital se desmoronó por las inclemencias climáticas: “Cayó un rayo en la comunidad. Afectó varios artefactos y entre esos la bomba”. Tras el infortunio, elevaron notas e iniciaron los trámites competentes para que tanto la Municipalidad de Fracrán como la Dirección de Asuntos Guaraníes, a través del Instituto Misionero de Agua y Saneamiento (IMAS) puedan efectuar una nueva perforación, ya que la anterior no lograron recuperar. El titular de Asuntos Guaraníes, Francisco Rodríguez, aseguró a este medio que en menos de 2 años lograron concretar alrededor de 10 perforaciones en distintas comunidades ubicadas a lo largo y ancho de la provincia, pese a que cada instalación tiene un costo de 18 millones de pesos, además de realizar 35 mantenimientos de bombas en articulación con municipios, el IMAS y cooperativas de agua. Sin embargo, reconoció: “Están faltando alrededor de 10 comunidades, pero tenemos la limitación de que están en proceso judicial. Por eso se nos complica avanzar porque en general son familias que están en tierras privadas. De todas maneras, en estos casos hemos hecho acuerdos con privados, como la cooperativa de hoja y la empresa Papel Misionero, para la autorización de los servicios básicos, como agua y tendido eléctrico”. En cuanto a esa articulación, agregó que las comunidades beneficiadas fueron Tekoa Porã y Kaguy Ivaté, ambas situadas en la localidad de Puerto Leoni.
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