Contacto

×
  • +54 343 4178845

  • bcuadra@examedia.com.ar

  • Entre Ríos, Argentina

  • Víctor Manuel Fernández, jefe de doctrina del Vaticano, criticó “la pretensión de omnipotencia de la ideología de género”

    Buenos Aires » Infobae

    Fecha: 10/03/2025 05:14

    El cardenal argentino Víctor Manuel Fernández, prefecto del Dicasterio para la Doctrina de la Fe (EFE/Daniel Cáceres) El cardenal Víctor Manuel Fernández, criticó la ideología de género, advirtió sobre la “pretensión de omnipotencia” de esta doctrina y descalificó la idea de que la identidad sexual pueda modificarse según deseos individuales. El ex arzobispo de La Plata, que desde septiembre de 2023 es prefecto del Dicasterio para la Doctrina de la Fe del Vaticano, hizo esta aguda crítica de la ideología de género durante su participación, de modo virtual, en un congreso de la Escuela de Teología Católica de Colonia, Alemania. La cirugía “transgénero”, argumentó, va más allá de meros cambios externos como la cirugía estética, ya que implica “la reivindicación de un cambio de identidad, el deseo de ser una persona diferente”. Criticó el uso de medios técnicos para crear una “realidad alternativa a conveniencia” y la noción de que la identidad sexual corporal puede ser formateada y sometida a cambios drásticos inspirados únicamente en los deseos individuales. El Cardenal advirtió sobre la “pretensión de omnipotencia” de esta corriente, que considera que el sexo biológico no es determinante para la persona. Fernández en cambio, rechazó la idea de que la identidad sexual pueda modificarse según deseos individuales. Sin embargo, reconoció que hay personas que sufren de “disforia (de género) severa” (sentimientos fuertes de incomodidad e incluso contrarios al propio sexo biológico), lo que lleva a “situaciones de vida ‘insoportables’”, señalando que estas excepciones merecen ser sometidas a una evaluación cuidadosa y atendidas con delicadeza y “extrema cautela”. Fernández enmarcó estas declaraciones en la defensa de la dignidad infinita del ser humano, un concepto desarrollado en el documento vaticano Dignitas infinita, que produjo su Dicasterio en febrero de 2024. Esta dignidad no depende de capacidades naturales, dijo Fernández citando a san Juan Pablo II, quien utilizó por primera vez este término en un encuentro con personas con discapacidad. La ideología de género considera que el sexo biológico no es determinante para la persona y que la identidad sexual puede modificarse según deseos individuales La Iglesia argentina todavía no se ha pronunciado sobre la ideología de género, pero es inminente que lo haga, sobre todo teniendo en cuenta que el tema no sólo se ha instalado en la opinión pública local, sino la importancia que tiene la educación en promover o no estos conceptos y las protestas de los padres por la inclusión en la ESI (Educación Sexual Integral) de esta perspectiva, deformante de la dignidad humana, según el Vaticano. Precisamente es llamativa la poca repercusión que tuvo localmente esta intervención de Víctor Manuel Fernández, considerando las recientes decisiones del gobierno de limitar los tratamientos de transición de género -hormonales y quirúrgicos- en menores de 18 años, y de las autoridades educativas a nivel nacional y en algunos distritos -como en la Capital- de eliminar la ideología de género de los contenidos de la ESI. En estos días, por otra parte, se está desarrollando la campaña “No autorizo” de la red de Padres Unidos contra la ideología de género en la Escuela, consistente en el envío de cartas a las autoridades escolares para comunicar la negativa de los padres a que se impartan contenidos inadecuados a los niños y adolescentes Hoy se les hace creer a niños y adolescentes que cambiar de sexo no solo es posible, sino hasta deseable; se romantiza la transición de género y se la presenta como una solución a amlestares que muchas veces tienen otro origen. De este modo, se los incita a detener su pubertad -su desarrollo sexual-, a tomar hormonas cruzadas y hasta someterse a cirugías que implican la extirpación o amputación de órganos sanos. Un ejemplo del tipo de ilustraciones que contienen los libros de Educación Sexual Integral En el año 2016, conversando con los periodistas en el avión que lo llevaba de regreso a Roma desde Azerbaiyán, el papa Francisco había expresado su preocupación por el posible adoctrinamiento en las escuelas. Al respecto, contó la anécdota de un padre que le preguntó a su “ragazzo” (niño) de 10 años ¿qué quieres ser cuando seas grande? Y el chico respondió: “ragazza”. “Así -dijo Francisco- el papá se dio cuenta de que en el libro del colegio se enseñaba la teoría de género, y eso va contra las cosas naturales”. Ese mismo año, el Papa había denunciado un adoctrinamiento solapado en los libros de textos escolares en Francia influenciados por esta teoría. Y en 2019 el Vaticano publicó un texto destinado a ayudar a los profesores de las escuelas católicas a contrarrestar la ideología de género, argumentando que niega la diferencia natural entre un hombre y una mujer. La de 2016 ni fue la primera vez -ni sería la última- que Francisco hablaba de la ideología de género a la que definió como “una colonización ideológica” que, tratando de eliminar las diferencias naturales entre mujeres y varones, acaba atentando contra la creación. Una de las intervenciones del papa Francisco contra la ideología de género Hace justo un año, en marzo de 2024, Francisco volvió a referirse a esta teoría según la cual la identidad sexual está determinada por la educación y el entorno, no por diferencias genéticas, y dijo que, en nuestro tiempo, “el peor peligro es la ideología de género, porque anula las diferencias”. Francisco formuló estas definiciones al recibir a los participantes de la conferencia “Hombre y mujer, imagen de Dios”. Allí habló “sobre esta fea ideología de nuestro tiempo, que borra las diferencias y hace que todo sea igual; borrar la diferencia es borrar la humanidad”. “El hombre y la mujer, en cambio, se encuentran en una fructífera tensión”, añadió el Papa y recomendó la novela distópica “Lord of the World” (1907), de Robert Hugh Benson, anglicano convertido al catolicismo y ordenado sacerdote, que “habla de lo futurista y es profética, porque muestra esta tendencia a borrar todas las diferencias”. Además, en una entrevista con Jorge Fontevecchia, reiteró que “de todas las colonizaciones ideológicas, la ideología de género es la peor, es nefasta”. Francisco: "De todas las colonizaciones ideológicas, la ideología de género es la peor" La referencia de Víctor Manuel Fernández a la declaración Dignitas Infinita es natural ya que en ese documento quedó asentada la posición del Vaticano sobre la ideología de género, que era condenada junto con otras “violaciones graves de la dignidad humana” como el aborto, la eutanasia, el suicidio asistido, la maternidad subrogada, el abuso sexual, la violencia contra las mujeres, la pena de muerte, la pobreza y la guerra, entre otros. Amy Welborn, escritora y comentarista católica, columnista del Catholic World Report, al comentar el documento, sugirió, no sin ironía, que “la Iglesia, cuyo pensamiento se forma en un marco de razón y fidelidad a la realidad material”, se preguntara “¿por qué el género es [según la ideología de género] fluido, pero la raza, la etnia y la edad no?” En Argentina, el documento no recibió toda la atención que merece, a pesar de tratarse del primer documento sobre el tema por parte del Vaticano. En ese texto se lee, por ejemplo, que “resulta inaceptable que algunas ideologías de este tipo, que pretenden responder a ciertas aspiraciones a veces comprensibles, procuren imponerse como un pensamiento único que determine incluso la educación de los niños”. Jennifer Lahl, presidenta del Center for Bioethica and Culture Networks, contrario a la subrogación de vientres aplaudió la “fuerte declaración” del Vaticano (que “reconoce la importancia del vínculo materno-infantil y que las mujeres no deben ser un instrumento utilizado por otros”) y expresó su esperanza de que “otros líderes mundiales adopten esta posición”. Lo mismo cabe decir en relación al adoctrinamiento de niños y adolescentes en ideología de género a través de la ESI, un fenómeno común a la Argentina y a muchos otros países occidentales. Sería deseable que los referentes políticos argentinos de casi todas las fuerzas, que promovieron irreflexivamente esta doctrina sin sustento científico, revisen sus posiciones, respeten la voluntad de las familias y, sobre todo, protejan la dignidad de niños y adolescentes.

    Ver noticia original

    También te puede interesar

  • Examedia © 2024

    Desarrollado por