06/03/2025 00:34
06/03/2025 00:34
06/03/2025 00:34
06/03/2025 00:34
06/03/2025 00:33
06/03/2025 00:33
06/03/2025 00:33
06/03/2025 00:33
06/03/2025 00:33
06/03/2025 00:33
Buenos Aires » Infobae
Fecha: 05/03/2025 06:39
Un análisis profundizó sobre la economía que sostiene a Vladimir Putin; un sistema que se basa en lealtades empresariales, riquezas resguardadas y la expansión rusa en Asia mediante los "kremligarcas" (REUTERS) Desde que Rusia lanzó su invasión a gran escala contra Ucrania en febrero de 2022, el Kremlin enfrentó un paquete sin precedentes de sanciones económicas impuestas por Occidente. La comunidad internacional intentó asfixiar financieramente a la maquinaria de guerra de Vladimir Putin, bloqueando activos de oligarcas, expulsando bancos rusos del sistema SWIFT y restringiendo la exportación de tecnologías clave. Sin embargo, a tres años del conflicto, las sanciones no lograron desmantelar el sistema de corrupción transnacional que sostiene al Kremlin. De acuerdo con el informe Sanctioned Kleptocracy (Cleptocracia sancionada), publicado por el Atlantic Council y escrito por el político Ilya Zaslavskiy, los llamados kremligarchs —oligarcas alineados con el Kremlin— demostraron una capacidad notable para sortear las restricciones occidentales y continuar expandiendo su influencia económica y política a nivel global. Los oligarcas rusos demostraron una gran capacidad para evadir sanciones y expandir su influencia global, bajo el apoyo de Putin (Collage) El ascenso de la cleptocracia rusa Para comprender cómo Putin y su red de empresarios sobrevivieron a las sanciones, es fundamental analizar el origen de este sistema. Durante sus primeros años en el poder, el mandatario ruso aprovechó el auge de los precios de los commodities para consolidar su autoridad, eliminando a los magnates que no se alineaban con su agenda y colocando en su lugar a una nueva élite de empresarios completamente subordinados al Kremlin. A diferencia de los oligarcas de los años 90, quienes tenían poder político independiente, los actuales no son dueños de sus fortunas en el sentido tradicional. Más bien, son custodios de la riqueza del Kremlin y su prosperidad depende exclusivamente de su lealtad a Putin, explicó el activista Zaslavskiy. El informe señala que estos empresarios operan como agentes económicos, y también ejecutan misiones políticas y estratégicas en nombre del régimen, desde la expansión de la influencia rusa en mercados clave hasta el financiamiento de operaciones encubiertas. A partir de la consolidación de Vladimir Putin, la cleptocracia rusa logró infiltrarse profundamente en los sistemas financieros y de recursos naturales de Occidente. Durante décadas, Europa dependió del gas y petróleo ruso, lo que permitió que figuras como Igor Sechin (Rosneft), Gennady Timchenko (Novatek) y Alexei Miller (Gazprom) operaran con impunidad en los mercados europeos. El reconocido CEO de Gazprom y oligarca ruso, Alexei Miller, amplificó sus influencias en la economía internacional gracias a su lealtad hacia el Kremlin (REUTERS) Invasión a Ucrania y respuesta de Occidente Cuando Rusia anexó Crimea en 2014 y respaldó el conflicto en el Donbás, la respuesta de Occidente fue tibia: sanciones limitadas que no afectaron de manera significativa la estructura económica del Kremlin. Esta falta de contundencia convenció a Putin de que podía continuar con su agresión sin enfrentar represalias severas. En 2022, cuando el Kremlin lanzó su invasión a gran escala contra Ucrania, la reacción internacional fue mucho más firme. Estados Unidos, la Unión Europea y el Reino Unido impusieron sanciones contra cientos de empresarios rusos y congelaron activos por valor de miles de millones de dólares. Pese a esto, la resiliencia del sistema cleptocrático ruso se hizo evidente rápidamente. A pesar de que el Producto Interno Bruto (PIB) de Rusia cayó un 2,1 % en 2022, el país logró recuperarse en 2023, con un crecimiento del 3,6 %, superando incluso a algunas economías del G7. La razón detrás de esta recuperación es clara; los kremligarchs encontraron nuevas rutas comerciales en Asia, Medio Oriente y América Latina, asegurando que el flujo de dinero no se detenga. Los oligarcas cercanos al Kremlin emplean asociaciones con intermediarios para exportar petróleo con descuento y evitar las restricciones de Occidente (REUTERS) Estrategias rusas para evadir sanciones El informe del Atlantic Council detalló los mecanismos utilizados por los oligarcas de Putin para sortear las sanciones y continuar operando con relativa normalidad: Reubicación de activos en terceros países : Dubái, Hong Kong y Estambul se convirtieron en refugios clave para fortunas rusas, gracias a sus regulaciones financieras laxas y a la falta de cooperación con Occidente. Exportaciones a través de intermediarios : Empresas en India y China compran petróleo ruso con descuentos y lo revenden en mercados internacionales, permitiendo que Moscú continúe obteniendo ingresos millonarios. Uso de la “flota fantasma” de petroleros : Rusia construyó una red de buques no asegurados por firmas occidentales para transportar crudo sin restricciones. Corrupción y presión interna: En Rusia, la redistribución de activos permitió fortalecer a las élites leales, mientras que empresarios díscolos fueron despojados de sus riquezas o eliminados. La cleptocracia rusa se consolidó con Putin, a través de los empresarios que se subordinaron a su agenda política. Mientras que los disidentes fueron despojados de sus capitales (REUTERS) Además, el artículo sugirió que para combatir de manera efectiva la cleptocracia rusa, Occidente debe adoptar medidas más agresivas y coordinadas. Entre las recomendaciones destacan: Fortalecer el control sobre la exportación de tecnología crítica , impidiendo que Rusia adquiera componentes esenciales para su industria militar. Reducir más el tope al precio del petróleo ruso , imponiendo sanciones a cualquier empresa que facilite su venta por encima del umbral establecido. Cerrar los vacíos legales , que permiten la importación indirecta de productos rusos a través de terceros. Aplicar sanciones secundarias a bancos y entidades que continúen facilitando transacciones para Rusia . Designación de Rusia como estado patrocinador del terrorismo, lo cual implicaría restricciones aún más severas en sus relaciones comerciales. Por último, el informe concluyó con una advertencia: “Si no se toman medidas más enérgicas, Rusia seguirá socavando la seguridad y los valores democráticos en todo el mundo. La guerra en Ucrania no es solo un conflicto territorial, es la manifestación de una lucha más amplia entre el autoritarismo cleptocrático”.
Ver noticia original