05/03/2025 01:26
05/03/2025 01:25
05/03/2025 01:25
05/03/2025 01:24
05/03/2025 01:23
05/03/2025 01:23
05/03/2025 01:23
05/03/2025 01:22
05/03/2025 01:22
05/03/2025 01:22
Concordia » Cadena Entrerriana
Fecha: 04/03/2025 17:11
Es un dato que advierte si la chance de que el Aedes aegypti prolifere es alta o baja.Ya lo utiliza el Gobierno para evaluar escenarios y prevenir brotes de dengue.Tras las abundantes precipitaciones anuncian mucho calor hasta el viernes. La lluvia abundante de las últimas horas no tendrá un desenlace feliz en lo inmediato. Si algo faltaba para echar más leña al fuego (o al agua en este caso) sobre esta pesadilla climática interminable era la amenaza de una inesperada nueva ola de calor tras las precipitaciones. Y se sabe que la combinación de humedad con altas temperaturas eleva las chances de que los mosquitos proliferen. A partir de este miércoles, junto con una merma de las lluvias, el pronóstico indica la probabilidad de tres días de sol con altas marcas máximas y mínimas, condiciones que se extenderían al menos hasta el viernes. Luego volvería a llover, para finalmente sí entrar el clima en un cambio de tendencia, con un marcado descenso de la temperatura a partir del próximo domingo y un horizonte ya más benévolo. En este contexto, el Gobierno dio a conocer la utilización de una herramienta simple para medir cuál es el riesgo de eclosión de mosquitos, y en particular del doméstico Aedes aegypti, en cada casa de cada zona del país. Se trata de un dato directamente relacionado con la mayor o menor probabilidad de de ser picado y, eventualmente, contraer dengue. Consiste en los denominados “índices larvarios”. “Durante el trabajo en terreno, se releva el estado de la vivienda o establecimiento y la presencia o ausencia de contenedores con estadios inmaduros de mosquito (larvas). En base a estos datos se pueden calcular tres índices larvarios que permiten estimar el riesgo asociado a la transmisión vectorial de dengue y otras arbovirosis: el índice de viviendas positivas para Aedes aegypti (IV), el índice de recipientes positivos para Aedes aegypti (IR) y el índice de Breteau (IB)”, explicaron fuentes del Ministerio de Salud de la Nación. El IV se calcula tomando la cantidad de viviendas positivas para Aedes aegypti sobre el total de viviendas inspeccionadas. Si el resultado da menos de 4 el índice es bajo, si da entre 4 y 35 es moderado, y mayor a ese número significa alto. El IR surge de la cantidad de recipientes positivos sobre recipientes revisados. En este caso, menor a 3 da un índice bajo, entre 3 y 20, moderado y mayor a 20, alto. Por último, el IB es el resultado del total de recipientes positivos sobre el total de casas inspeccionadas. Cuando el IB es menor a 5 el riesgo es bajo; entre 5 y 50 es moderado; y mayor a 50, alto. Estos índices se elaboran mediante los datos entomológicos relevados en las acciones de prevención y control en las viviendas. “Actualmente, la cartera sanitaria nacional cuenta con datos provenientes de Chaco, Tucumán, Formosa, Salta, Misiones, Corrientes, Santiago del Estero, Catamarca, Jujuy, Mendoza y Santa Fe”, explicaron desde Salud. Al momento estos índices han podido mostrar, en base a la información registrada en el último Boletín Epidemiológico Nacional, “los valores a nivel nacional arrojan una situación de riesgo entomológico moderado a alto”. Y se detalla: “La región NEA presenta índices larvarios elevados, arrojando un riesgo entomológico alto de acuerdo al IB. La región NOA, por su parte, muestra la misma tendencia, aunque con IV e IR menores y un IB mayor a los detectados en NEA”. Se advierte, a la vez, que “las intervenciones territoriales registradas en las regiones de Cuyo y Centro no permiten aún realizar cálculos robustos de índices larvarios”. Estos datos pueden dar la pauta de que si bien hasta el momento la cantidad de casos de dengue es muy inferior a la de las dos últimas temporadas (a esta altura del año en 2024 había 74.555 casos confirmados y ahora, 994, de los cuales 300 son de Formosa y 229, de Córdoba), las condiciones podrían estar dadas para que un empujón climático haga brotar esas potenciales poblaciones de Aedes aegypti actualmente en suspenso. Para evitar que los mosquitos crezcan se recomiendan limpiar con frecuencia los recipientes que acumulan agua (descacharrado), mientras que para evitar las picaduras hay diferentes métodos, cómo el uso de repelentes, espirales, mosquiteros en puertas y ventanas, y tules en las cunas de los bebés. “La sistematización y el análisis inteligente de estos datos en el Tablero de Control ha permitido detectar la necesidad de intensificar la búsqueda activa de casos sospechosos de dengue y fortalecer la vigilancia. Esta información resulta clave para direccionar las acciones de prevención y control vectorial, así como evaluar el impacto de las mismas”, concluyó el Ministerio. Clarin
Ver noticia original