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Concordia » Entre Rios Ahora
Fecha: 04/03/2025 10:40
Esteban Madrid Paez es paranaense, es sacerdote y hasta finales de noviembre estuvo en Roma: allí se doctoró en Teología. “Hacer el doctorado es una forma de poder dedicarse un tiempo a preguntas importantes y buscar también crecer para después compartir acá, en nuestra zona, en nuestra diócesis toda esa experiencia”, dice Llegó a Roma casi con el inicio de la pandemia de coronavirus, en enero de 2020, y allá se quedó hasta finales de 2024. Ahora volvió a Paraná y comenzó a ejercer, este fin de semana, como párroco de Santa Rafaela María, en la zona del barrio Paraná XIV. A la vez, es vicepresidente de Cáritas, el organismo de la Iglesia Católica encargada de asistir a los más necesitados, y antes, en 2018, fue de los iniciadores de la versión local del Hogar de Cristo, la iniciativa de los curas villeros de Buenos Aires para atender a personas con consumos problemáticos. -Allá, en Roma, tuviste oportunidad de estar cerca del Papa Francisco, verlo de cerca. ¿En qué medida te ha marcado el Papa? -lo consultaron desde el programa Puro Cuento de Radio Plaza 94.7. -El Papa nos ha dejado como algunos acentos que son clave para poder pensar también nuestro lugar. Creo que sin duda la búsqueda de que la Iglesia tome con fuerza la cercanía con los más pobres y los más postergados, los más desprotegidos de la sociedad, es una llamada fuerte desde todos estos años y es una llamada que no es una cuestión social o política meramente, sino que es ante todo una cuestión como creyentes. Jesús, el hijo de Dios, quiso identificarse muy concretamente con los que más sufrían, con los pobres. Ese llamado es no solamente de acercarse a algunas personas, sino como también de revisar nuestra forma de estar, nuestra forma de acompañarnos. A mí, en lo personal, me ha ayudado a tratar de pensar con valentía un poco y pedirle a Dios, digamos, la audacia de poder preguntarnos cómo mejorarnos nuestras comunidades, lo que hacemos, nuestra misión. -Lo habías hecho antes, con la experiencia del Hogar de Cristo, algo que había impulsado el cardenal Jorge Bergoglio. -Sí, sí, sí. Él tenía este tema muy metido en su corazón un poco. Quería poner en un lugar muy importante las situaciones de dolor. Y creo que en la Buenos Aires de Bergoglio una de las cosas que más dolía era con el surgimiento del paco con una fuerza tremenda. En las villas el paco estaba haciendo estragos. Los curas que estaban viviendo en las villas veían a estos jóvenes tan destruidos y empezaron a buscar alguna forma de acompañarlos. Bergoglio se puso la camiseta, y dijo: `Bueno, yo los acompaño totalmente`. Y bueno, esto a mí me pasó que justo en la comunidad donde estaba aquí en Paraná. -¿Ves un poco invisibilizado el problema del consumo en Paraná? – Yo creo que es así. La verdad que es preocupante, es preocupante porque encima tiene una fuerza, digamos, no quiero decir destructiva, pero de una fuerza de romper posibilidades de futuro muy grandes. Afecta mucho el futuro de los jóvenes y de los niños. Tenemos que pensar cómo lo afrontamos con un poco más de firmeza y de convicción. El Hogar de Cristo abrió el 14 de febrero de 2018 y a lo largo de todo este tiempo han pasado unas 400 personas por ese lugar. A diario, pasan por el Hogar de Cristo, que funciona en la Capilla Nuestra Señor de Lourdes, unas 25 personas, desde adultos, niños, preadolescentes, adolescentes, jóvenes. Los olvidados Esteban Madrid Páez salió una tarde a caminar la zona aledaña a la Capilla de Lourdes, ubicada sobre calle 25 de Junio al final, cerca del arroyo Antoñico -«Es increíble cómo el arroyo vuelve invisible a una gran parte de la ciudad», dice- y empezó a encuestar a los chicos para un taller que iba a dictar el Consejo de Educación. En eso estaba cuando se le ocurrió preguntar si había problemas de adicción. «Y esa tarde, todos, el 100%, me dijo que sí. Desde ese momento empezamos a pensar qué hacer. Empezamos a buscar, a visitar, a preguntar y así conocimos la experiencia del Hogar de Cristo, que nació en las villas de Buenos Aires, y dijimos: ´Por acá es´. Y empezamos», cuenta. Fotos: Gentileza Arzobispado de Paraná De la Redacción de Entre Ríos Ahora
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