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» Diario Cordoba
Fecha: 03/03/2025 20:04
Un ciudadano italiano de 32 años fue detenido por la Guardia Civil, con la colaboración de la Policía Local de Pollença (Mallorca), después de que hiriera de gravedad a un hombre, al que causó un profundo corte en la mano con una tapa de alcantarilla, cuando trataba de proteger del golpe a su hijo de cinco años. El presunto agresor, que parecía estar perturbado, se enfrentó violentamente a los agentes y tuvo que ser reducido. Los hechos ocurrieron so bre las tres de la tarde del pasado sábado, en el Port de Pollença. Todo comenzó en el interior de una pizzería, donde entró un hombre que parecía estar perturbado por el consumo de algún tipo de sustancias estupefacientes. Este hombre provocó un incidente en el interior del local al increpar y escupir a varios clientes, por lo que el encargado le echó a la calle. Sin embargo, una vez en el exterior, el individuo se revolvió con violencia contra el empleado, al que propinó varios puñetazos. Fue entonces cuando intervino la víctima, un hombre extranjero residente en la localidad, que estaba dando un paseo junto a su hijo de cinco años. El hombre dejó al pequeño apartado y se interpuso entre el agresor y el camarero para que dejara de pegarle. En ese momento el individuo se revolvió contra él. Arrancó una tapa de alcantarilla cuadrada y trató de golpearle con ella. Para empeorar la situación, el niño se había acercado a su padre. El hombre, al verle, intentó evitar que el pequeño recibiera el golpe con la tapa de la alcantarilla y puso la mano para protegerle. Recibió entonces un golpe con la esquina de la pieza metálica que le causó un profundo corte en la mano. Mientras tanto, varias patrullas de la Policía Local de Pollença y la Guardia Civil habían acudido al lugar del incidente, después de que las centrales de emergencia fueran alertadas por las llamadas de los testigos. Policías y guardias tuvieron dificultades para reducir al presunto agresor, que seguía muy alterado y agresivo. Los agentes finalmente lograron reducirle. Ante su estado, la Guardia Civil solicitó la presencia de una ambulancia, cuya dotación le suministró un sedante. El hombre, un italiano de 32 años, quedó ingresado en calidad de detenido en el hospital de Inca. Mientras tanto, el hombre herido tuvo que recibir asistencia médica . El hombre sufrió un profundo corte en la mano por el que manaba mucha sangre y que necesitó de varios puntos desutura. El presunto agresor quedó detenido por dos delitos de lesiones, tanto las que sufrió el hombre al que hirió en la mano como las del camarero al que golpeó previamente, si bien en este caso las heridas eran muy leves. La Guardia Civil sospecha que el detenido podría encontrarse bajo los efectos del alcohol o las drogas cuando perpetró las agresiones.
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