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» Radio Sudamericana
Fecha: 01/03/2025 15:41
Sábado 01 de Marzo de 2025 - Actualizada a las: 15:30hs. del 01-03-2025 SE LLAMA MUSIA La residente felina de uno de los principales lugares de interés de la península llevaba 10 años viviendo en el Nido de Golondrina, hasta que un joven atentó contra su vida. Era un atractivo turístico, un motivo para volver a visitar el famoso castillo Nido de Golondrina en la cima de un acantilado en Crimea y una residente permanente del lugar que se ganó mucho amor y cariño entre los vecinos de la zona. Hasta que el pasado domingo 23 de febrero un visitante la botó al vacío desde el acantilado de 40 metros. Los diez años de vida en el Nido de Golondrina pasaron ante los ojos de la gata Musia en un pispás durante la repentina e inesperada caída a las aguas del mar Negro. El video de las cámaras de seguridad evidenció cómo un hombre pasaba cargándola en brazos para luego tirarla desde el mirador del castillo. Video no soportado. Por favor, utiliza ó actualiza tu navegador. La crueldad hacia el animal indefenso generó un fuerte repudio por toda Rusia, y a Músechka —como la llaman cariñosamente— la habían dado por muerta cuando los voluntarios la hallaron con vida. Con el alivio ante la buena noticia llegó el dilema de cómo rescatar a la gata: tras caer al agua, se las apañó nadando hasta las rocas, donde pasó dos días pidiendo ayuda a maullidos. Video no soportado. Por favor, utiliza ó actualiza tu navegador. La rescataron este martes usando equipos de alpinismo. El chequeo médico mostró que Musia no sufrió lesiones y si bien pasó por mucho estrés, su vida no corría peligro. También se resolvió la principal incógnita: cómo fue posible ese milagro de sobrevivencia. Resultó que la habían salvado sus redondeadas formas 'plus size', que le permitieron preservar energía durante varios días sin comida. Video no soportado. Por favor, utiliza ó actualiza tu navegador. Ahora la felina se siente bien, aunque los veterinarios detectaron problemas en el hígado que surgieron por el estrés o la mala alimentación. El jueves, la visitó el gato Móstik (Puentecito, en español), quien inauguró en 2018 el puente de Crimea, adelantando en esa importante misión al mandatario ruso, Vladímir Putin, y sigue siendo el tierno símbolo de la obra. "Visité a la heroína peluda en la clínica donde se está recuperando de lo sucedido en el Nido de Golondrina. ¡Le estrecho la pata a Musia y le deseo buena salud!", 'escribió' Móstik en su cuenta en VK. La Administración de la ciudad de Yalta, entretanto, sometió a votación el futuro de la gata rescatada, proponiendo encontrarle un hogar con dueños que la amen, crear condiciones especiales en el edificio de la Administración o hacerle una casita propia en el territorio del castillo. De momento, lidera la primera variante, con el 59 % del respaldo de los 37.800 encuestados. El destino del agresor, mientras, queda en manos de la Justicia. Detenido desde el lunes, el oriundo de San Petersburgo de 24 años enfrenta hasta tres años de cárcel por maltrato animal. Cuando la Policía lo preguntó por qué tiró a la gata desde el acantilado, se encogió de hombros y dijo que el animal, molesto por sus insistencias de mantenerlo en sus brazos, intentó liberarse. El hombre pasó por controles neuropsicológicos obligatorios en el marco de la vigilancia médica y tras la detención fue internado en un psiquiátrico por 10 días, reportó el portal 78.ru. Video no soportado. Por favor, utiliza ó actualiza tu navegador. RT
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