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» Tu corrientes
Fecha: 20/02/2025 09:55
Los agentes locales y de Estados Unidos quieren saber para qué iban a usar los 9 kilos de la amalgama de metales que no son droga ni explosivos. El caso empezó por una pelea en un departamento y derivó en una investigación en la Justicia Federal por posibles actos terroristas. El 1° de febrero pasado dos bielorrusos nacionalizados argentinos fueron detenidos en un departamento del centro de Mar del Plata luego de que los vecinos escucharan una violenta pelea y llamaran al 911. Dentro del departamento los policías de la Comisaria 2° encontraron cocaína y marihuana para consumo personal y dos revólveres. Hasta ahí todo más o menos normal. La cuestión es que en la cocina había una serie de envases plásticos como los que se usan para delivery de comida pero llenos de una sustancia extraña. Tan extraña que hoy ni la Policía Bonaerense ni el Departamento Unidad de Investigación Antiterrorista de la Federal (DUIA), ni el FBI estadounidense –al que se pidió ayuda– saben qué es exactamente o para qué iba a ser usada. En principio los investigadores de DUIA –que fueron al laboratorio pericial de La Plata a tomar muestras de lo secuestrado– descartaron que se tratara de explosivos y la Bonaerense descartó, por reactivos, que fuera droga. Tal como publico Clarín en exclusiva el pasado sábado, hasta ahora los resultados muestran una amalgama de metales entre los que se destaca, por su rareza, el tantalio, usado en la industria electrónica. Hace unos días una comisión de la SIDE y un funcionario del FBI fueron a Mar del Plata a examinar el terreno y evaluar la gravedad de la cuestión. Se encontraron no sólo con que los bielorrusos habían sido liberados antes del pase de la causa a al fuero Federal (cosa que ya sabían) sino que el hombre que les alquilaba el departamento había tirado todas sus pertenencias a la basura. Las armas que le secuestraron en el departamento a los bielorrusos.Las armas que le secuestraron en el departamento a los bielorrusos. De esta manera crece el misterio y también el escándalo. Los policías bonaerenses nunca preservaron el departamento, ni hablaron con los vecinos, ni pidieron las cámaras de seguridad. Ahora todo hay que reconstruirlo y encima hay una versión de que los bielorrusos habrían hablado de la irrupción de gente encapuchada antes de que llegara la Policía. El misterioso caso Un llamado al 911 por parte de vecinos asustados alertó a policías de la comisaría 2° sobre gritos en un departamento de la calle La Rioja al 2800. Cuando llegaron al lugar, se encontraron con dos bielorrusos: uno estaba fuera de sí y blandía un cuchillo, el otro estaba herido en una pierna. Ambos eran residentes en Mar del Plata y se habían nacionalizado argentinos. Ambos declararon ser programadores de sistemas informáticos. Fueron identificados como Aliaksadr Maskevich (33) y Mikhael Bilida (35). Más tarde se determinó que tenían viajes Moscú y, al menos Maskevich, había andado por la triple frontera. Tiene dos cruces a Brasil en agosto de 2024 por el Puente Tancredo Neves que une las ciudades de Puerto Iguazú (Argentina) y Foz do Iguazú (Brasil). Todo es extraño y para hacer todo mas extraño los bielorrusos sólo estuvieron demorados. El caso se inició en la UFI de flagrancia y pasó a la de estupefacientes, pero al dar los reactivos negativos recuperaron la libertad. Y no tardaron en hacerse humo. Por ahora tienen defensor oficial. Finalmente, por las características del caso, la investigación pasó al juzgado Federal de Mar del Plata N° 3 a cargo de Santiago Inchausti, que inició la causa N° 779/2025, caratulada “Imputado: Maskevich, Aliaksandr y otro s/ infracción al art 306, INC. 1° del Código Penal". La figura penal aplicada está incluida en el artículo 41 del Código Penal: "Cuando alguno de los delitos previstos en este Código, en leyes especiales o en las leyes que incorporen al derecho interno tipos penales previstos en convenciones internacionales vigentes ratificadas en la República Argentina, hubiere sido cometido con la finalidad de aterrorizar a la población u obligar a las autoridades públicas nacionales o gobiernos extranjeros o agentes de una organización internacional a realizar un acto o abstenerse de hacerlo, la escala se incrementará en el doble del mínimo y el máximo". Por eso sonaron las alarmas y se dio intervención a todos los organismos con competencia en crimen organizado y terrorismo. La hipótesis es alarmante pero por ahora es solo eso, una hipótesis. Aunque es sospechoso que los bielorrusos no hayan dado una explicación a lo que había en su cocina. El juzgado federal de Mar del Plata dio intervención a la Unidad Fiscal Especializada en Criminalidad Organizada (UFECO) a cargo de Santiago Marquevich, a la Unidad de Información Financiera (UIF) y al Departamento Unidad de Investigación Antiterrorista (DUIA) de la Policía Federal. La brigada de la DUIA viajó a La Mar del Plata a tratar de contactar testigos y recopilar posibles grabaciones de cámaras de seguridad. También se encomendó a Interpol chequear si alguno de los dos bielorrusos tiene vinculación con organizaciones criminales o terroristas y se informó al Comando Tripartito a través del Departamento Investigaciones Especiales NEA "Cabe destacar que en la fecha se recibió copia de oficio judicial librado por la UFI actuante dirigido a la SIDE ordenando que conforme al artículo 4° bis de la Ley N° 25.520, modificada por el Decreto de Necesidad y Urgencia N° 614/2024, se preste colaboración con la fuerza policial interviniente en la presente investigación (DUIA de la PFA) en la producción de tareas de su especialidad (conf. art. 8 bis de la norma)", dice un parte interno. Por las dudas, y ante el misterio, se pidió ayuda también al agregado jurídico del FBI de la Embajada de los Estados Unidos en Argentina, que viajó a Mar del Plata con la SIDE hace unos días Hay alarma. ¿Puede ser un bleff? Sí. Pero por lo pronto tiene a todos corriendo. MG Fuente. Clarin
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