08/02/2025 05:59
08/02/2025 05:59
08/02/2025 05:59
08/02/2025 05:58
08/02/2025 05:58
08/02/2025 05:58
08/02/2025 05:56
08/02/2025 05:56
08/02/2025 05:54
08/02/2025 05:54
Buenos Aires » Infobae
Fecha: 08/02/2025 02:57
Las cuentas para el pago de remuneraciones aumentaron en octubre en poco más de 137 mil (Foto: Adobe Stock) El empleo asalariado registrado comenzó a crecer a partir de agosto de 2024, según los datos publicados por el Ministerio de Trabajo hasta noviembre, pero a un ritmo menor que el de las cuentas sueldos en bancos. En el primer caso, se incrementó en poco más de 68.000 trabajadores en el ámbito privado, en contraste con la contracción en un neto de 10.000 en el sector público -básicamente a nivel nacional, porque siguió expansivo en el agregado de provincias y municipios-, y virtualmente se estancó en el conjunto de ocupados en casas particulares. En tanto, las cuentas para el pago de remuneraciones aumentaron en poco más de 137 mil. En diciembre la Encuesta de Indicadores Laborales de la cartera de Trabajo arrojó un estancamiento del empleo privado registrado excluidas las bajas estacionales en la construcción y enseñanza (en empresas con más de 10 empleados en los aglomerados urbanos relevados). “Es esperable, que al igual que lo ocurrido en años anteriores, en enero estas tendencias sectoriales se reviertan”, estimaron los técnicos de la cartera laboral. Por el contrario, las cuentas sueldos mostraron ese mes una caída de poco más de 76.500 (0,75%) respecto de octubre. La metodología de registro de asalariados varía en cada caso: en la serie de Trabajo se considera el pago de aportes y contribuciones sobre la nómina salarial realizado por los empleadores a la Anses, a través del Sistema Integrado Previsional Argentino, “en algún mes del último trimestre”, mientras que la de bancos surge de los pagos mensuales registrados en las declaraciones juradas de los empleadores. Por lo tanto, en ambos casos, se trata de una estadística que refleja más el estado de las finanzas de los empleadores y su disciplina en el cumplimiento de los pagos y la presentación de sus nóminas, que el movimiento neto de altas y bajas en los puestos de trabajo cada mes. Aun así, esos indicadores han demostrado ser buenos referentes de la tendencia del mercado laboral formal. Brecha para volver a los máximos históricos En los diferentes indicadores del desempeño del mercado laboral se advierte una brecha significativa respecto de los máximos de la serie. En el caso de los asalariados privados, el punto más alto de empleo formal se registró en agosto 2023 con 6,39 millones de trabajadores. Para alcanzar ese nivel, sería necesario generar 121.600 puestos netos, lo que, al ritmo de incorporaciones desde el mínimo de junio de 2024, llevaría unos 9 meses, aproximadamente. Mientras tanto, para que las cuentas sueldo retornen al máximo de la serie que se anotó en diciembre 2023 -cuando sumaron 10,42 millones- se requerirían 249.550 nuevos trabajadores, una cifra que, de mantenerse la recuperación desde el mínimo de enero 2024, se alcanzaría también en unos 9 meses. Otra forma de medir la recuperación Otra manera de analizar el potencial de recuperación del mercado laboral asalariado es comparar las series de referencia con el crecimiento vegetativo de la población, ya que esto refleja la existencia de una oferta laboral insatisfecha desde marzo 2012, cuando la economía comenzó a acusar el efecto del cepo cambiario que se impuso por primera vez en el corriente siglo en noviembre de 2011. Esa relación representó 14,73% del total de habitantes al momento de la reelección presidencial de Cristina Fernández de Kirchner, y actualmente se ubica en 13,25 por ciento. En el caso de las cuentas sueldo, el máximo en términos del total de asalariados se anotó en abril 2022 con 101,7% (por efecto del pluriempleo, principalmente), mientras que respecto de la población total alcanzó su pico en diciembre 2023 con 22,3%. Para volver a esos niveles, sería necesario sumar 224.500 trabajadores en el primer caso y 345.000 empleados formales en relación de dependencia en el segundo. Bancarización en aumento A diferencia de la volatilidad en las estadísticas del empleo formal, el sistema bancario registró en 2024 un crecimiento sostenido en la cantidad de titulares de tarjetas de débito (85,23 millones)- y de crédito (30,36 millones), aunque mantuvieron correspondencia con el desempeño del mercado de trabajo. En el caso de las tarjetas de débito, la serie oficial muestra que tras la baja de más de 7,1 millones titulares entre septiembre y diciembre de 2023, se observó una recuperación generalizada en los dos trimestres posteriores, revirtiendo la disminución inicial. Sin embargo, entre julio y septiembre 2024 se dio un nuevo retroceso, con la cancelación de poco más de 1,15 millones de tarjetas. En la comparación interanual, septiembre mostró variaciones atípicas según el tipo de entidad: Bancos públicos de la Nación: bajaron de 29,79 millones de clientes a 20,84 millones (cayó 30,1 por ciento); Bancos públicos de provincia: subieron de 11,27 millones a 14,5 millones (28,7 por ciento); Bancos públicos municipales: se mantuvieron en 1,57 millones de titulares; Bancos privados de capital nacional: pasaron de 24,38 millones a 27,19 millones (aumentó 11,6 por ciento); y Bancos extranjeros: se contrajeron 2%, descendió de 15,21 millones a 14,91 millones de clientes. La estadística del Banco Central de la República Argentina revela que los titulares de tarjeta de crédito, tras una reducción de casi 190.000 en el segundo trimestre, se incrementaron en más de 475.000 en el siguiente. Además, sumaron aproximadamente un millón de clientes (3,7%) respecto del último registro del gobierno anterior en septiembre de 2023, cuando había 29,3 millones de titulares. Por tipo de entidad, en el cotejo interanual se observó un movimiento heterogéneo: Bancos públicos nacionales: caída de 0,8% (35.208 titulares). Bancos públicos municipales: aumento de 7,9% (67.335). Bancos públicos provinciales: crecimiento de 7,5% (436.537). Bancos privados de capital nacional: suba de 5,7% (464.659). Bancos extranjeros: leve alza de 1,7% (166.508). En conclusión, las diferencias en el ritmo de recuperación del empleo formal y la expansión de las cuentas sueldo y tarjetas reflejan dinámicas distintas en el mercado laboral y el sistema financiero. Mientras el crecimiento del trabajo registrado sigue condicionado por la evolución económica y las decisiones de los empleadores, la bancarización avanza con su propia lógica, influida por cambios en el acceso a nuevos servicios financieros y el comportamiento de los trabajadores. Para el primer trimestre de 2025, la Encuesta de Indicadores Laborales arrojó que “del 4,7% de las empresas que esperan tener cambios en su dotación de personal, poco más de 3,1% espera aumentarla y menos de 1,5% espera disminuirla, lo cual arroja unas expectativas netas positivas de 1,6% de los consultados”.
Ver noticia original