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Parana » Uno
Fecha: 04/02/2025 21:22
Un grupo de senadores radicales de Corrientes, Entre Ríos y Santa Fe solicitó que se establezcan una serie cambios en el pliego de la licitación de la Hidrovía. Un grupo de senadores radicales de Corrientes, Entre Ríos y Santa Fe le pidió al jefe de Gabinete, Guillermo Francos, que establezca una serie cambios en el pliego de la licitación para la concesión del dragado y balizamiento de la Vía Navegable Troncal (VNT) sobre los ríos Paraguay y Paraná, más conocida como “ Hidrovía ”. El pedido por la Hidrovía En una carta enviada el jueves 30 de enero, los senadores Eduardo Vischi, Gabriela Valenzuela, la entrerriana Stella Maris Olalla, Carolina Losada y Eduardo Galaretto le “recomendaron” al Gobierno fraccionar la concesión en dos o tres tramos para que haya una “mayor participación de oferentes” y un “control más eficiente de los servicios”. Además, solicitaron bajar el plazo de la concesión, que se prevé en 30 años prorrogables por otros 30 más, a entre 10 y 15 años, con una posibilidad de extenderla sujeto al cumplimiento de distintas obligaciones. Por otro lado, piden profundizar el calado a 42 y 44 pies para maximizar la capacidad de carga de los buques, lo que beneficiaría a las cerealeras exportadoras con una baja de los costos logísticos por unidad de flete. Sin embargo, uno de los puntos más destacados de la carta es la sugerencia de que se modifiquen los criterios técnicos de elegibilidad y ponderación técnica, que lo piden principalmente la compañía belga DEME y la danesa Rhode Nielsen, que fueron a la Justicia. Y, sobre todo, el cambio que exigen los senadores de la Unión Cívica Radical (UCR) permitiría la participación de China, que fue vedada por el Gobierno al impedir que hagan ofertas quienes tengan entre sus accionistas a los Estados soberanos. LEER MÁS: Hidrovía Paraná-Paraguay: controversia en la licitación a dos semanas de su resolución La licitación tiene un plazo para la presentación de ofertas hasta el miércoles 12, aunque las cerealeras y varias empresas que van a competir pidieron una extensión. Punto de conflicto La Hidrovía es uno de los principales puntos de conflicto político entre el presidente Javier Milei y el expresidente Mauricio Macri, ya que La Libertad Avanza (LLA) acusa al PRO de operar para que se favorezca a la empresa neerlandesa Boskalis, favorita de la reina Máxima Zorreguieta. Asimismo, en el macrismo denuncian que el pliego que diseñó el Gobierno está direccionado a la belga Jan de Nul, que hasta 2021 tuvo la concesión junto al Grupo Emepa, del empresario argentino Gabriel Romero. Una división de la licitación en tramos restaría interés, en vez de sumarlo, ya que habría zonas no rentables, como todo lo que está al norte de Rosario. De la misma forma, consideraron más viable reducir el plazo de la concesión. Por la Hidrovía transita aproximadamente el 80% de las exportaciones argentinas; es decir, más de 60.000 millones de dólares. Los exportadores pagarían unos 410 millones –estimado en el pliego– al concesionario, por lo que el negocio a 30 años superaría los 12.000 millones de dólares. Una nueva denuncia La empresa belga Dredging, del grupo DEME, una de las que se disputan la licitación por el dragado de la Hidrovía y la misma que había presentado una denuncia ante la Justicia para pedir que se suspenda la puja por considerar que las condiciones benefician a Jan de Nul, actual operador de la vía navegable, cargó nuevamente contra el gobierno nacional debido al “notorio direccionamiento del pliego”, en un comunicado en el que enumeró, en total, ocho puntos que, según su óptica, favorecen a la otra firma del mismo país. La empresa enumeró ocho puntos en los que considera que el pliego del Gobierno está hecho a medida de Jan de Nul. Subrayó que “el tiempo para preparar las ofertas (55 días hábiles) es insuficiente en comparación con licitaciones similares y la documentación técnica proporcionada no es suficiente para realizar un análisis adecuado”, lo que “beneficia al operador actual, que ya posee la información necesaria”. Otro ítem que cuestiona DEME es que “se exige un calado máximo de 8 metros sin justificación técnica, lo cual limita la posibilidad de usar equipos más adecuados y favorece al actual concesionario, cuyo equipo ya cumple con esta restricción”.
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