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Parana » El Once Digital
Fecha: 31/01/2025 00:30
En 2024, los pedidos de subsidios por desempleo en Argentina aumentaron un 60%, alcanzando la cifra más alta en los últimos diez años. Un total de 174.000 trabajadores despedidos sin causa atribuible al trabajador comenzaron a percibir esta prestación, lo que marca un fuerte incremento en comparación con los casi 109.000 de 2023 y las 86.000 de 2022. Entre los sectores más afectados por los despidos se encuentran la construcción, la industria manufacturera y el comercio. Estos datos reflejan el impacto de la recesión económica y el ajuste implementado por el gobierno nacional. A finales de 2024, unas 102.000 personas seguían cobrando el subsidio, con un pago promedio de 214.000 pesos. Si bien el subsidio por desempleo cubre hasta 12 meses y mantiene beneficios como la cobertura de obra social, la realidad es que el monto está sujeto a un límite del 75% de la última remuneración, lo que, con el salario mínimo actual, limita su efectividad. Con este contexto, surgen varias preguntas: ¿Qué sectores claves de Entre Ríos son lo que enfrentan la mayor pérdida de empleo? ¿Qué rol juega la reciente reforma laboral en los despidos y cómo afecta a los trabajadores informales, que ya enfrentan dificultades para acceder a estos beneficios? El tema fue debatido en El Ventilador, programa que se emite por Elonce los martes y jueves a las 21.30. Gerardo Ormaechea, abogado laboralista , explicó que “en 2024 aumentó el otorgamiento de seguros de desempleo en nivel exponencial. Esto nos pone en números de los años 2008, 2009 y 2010 donde la crisis de esos años también refleja el otorgamiento en estos niveles, mayores incluso. Es un reflejo de la situación del empleo privado en Argentina. Indica que han aumentado los despidos”. Indicó que “en el año 1991, con la Ley 24.013, se incorporó el Fondo de Desempleo por primera vez en la legislación argentina. Fue previsto para paliar las consecuencias del paro o cese laboral en el sector privado. Comprendía inicialmente a los empleados que estaban dentro de la Ley de Contrato de Trabajo que aportan al sistema de seguridad social. Se amplió luego al servicio doméstico, al trabajo agrario y hoy es mayor el alcance”. Gerardo Ormaechea, abogado laboralista Aclaró que el subsidio de desempleo “no es lo mismo que una indemnización, no la sustituye, sino que la complementa mientras el trabajador está en situación de cese laboral. Por distintos períodos hay distintas escalas, por lo cual se puede percibir el fondo de desempleo por cuatro meses, seis meses, ocho meses y máximo de 12. Si el trabajador en situación de paro tiene 45 años o más, tiene derecho a que se extienda seis meses más”. Para cobrar el subsidio, el trabajador despedido “debe haber sido aportante al sistema, es decir, debe haber estado registrado, en blanco. En los últimos tres años calendario debe haber trabajado al menos seis meses. De ahí vienen las distintas categorías de plazo de otorgamiento”. Informó que “el sector de la construcción es uno de los más afectados por los despidos, seguido por comercio”. Explicó que para saber si el empleador le hizo los aportes correspondientes al trabajador cuando se encontraba en servicio, es necesario “gestionar una clave previsional online en la web de ANSES y con eso acceden a toda su información de aportes”. Dijo que la precariedad laboral “es uno de los argumentos esgrimidos para esta flexibilización que se dio. La legislación laboral llenó de sanciones al empleador buscando la registración de los trabajadores y seguimos manteniendo un nivel alto de precarización laboral, cercano al 50 por ciento. Esto es una constante”. Consultado sobre si el fondo es sostenible en el tiempo si aumenta el desempleo, “se forma con aportes y contribuciones, no forma parte del sistema contributivo. Es decir, son 36 mil millones de pesos mensuales para los 102 mil fondos que estaban vigentes en diciembre. El tope máximo es un salario mínimo, vital y móvil y el mínimo es medio salario mínimo, vital y móvil, entre esos márgenes se maneja. Es como un paliativo, la ventaja es que suma antigüedad para la jubilación. Se suma con las asignaciones familiares, la obra social, es un beneficio muy importante”. Por otra parte, mencionó que “hay una legislación vigente que indica que previo a despidos que impliquen determinado porcentaje de la planta de trabajadores, es obligatorio promover un procedimiento preventivo de crisis para ver si entre las partes interesadas, entre las cuales está el estado, los sindicatos, los trabajadores, se pueden buscar alternativas. No hay nada más allá de eso que prohíba el despido. Tenemos una Constitución liberal con connotaciones sociales, pero la libertad de contratar sigue siendo uno de los pilares”. Elonce.com
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