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Buenos Aires » Infobae
Fecha: 30/01/2025 13:00
Chicago ha acumulado mejoras para soja y maíz que no estaban en los cálculos poco tiempo atrás (Revista Chacra) Una serie de acontecimientos particulares auguraban algún sesgo negativo prolongado en Chicago. Todavía puede darse, pero al menos hasta el cierre del miércoles el mercado iba exactamente en sentido contrario, con un maíz acumulando subas muy interesantes, la soja detrás con mejoras no despreciables y hasta el trigo saliendo de su derrotero mortecino. La tendencia bajista que imaginaba el mercado a priori se vincula por un lado con las amenazas de Trump hacia una serie de clientes vinculados con las exportaciones granarías de Estados Unidos, sobre todo China y México, con esperables consecuencias sobre la salud del negocio y las cuentas del farmer, que no logra levantar cabeza ni siquiera después de recibir una atractiva ayuda de parte del Estado. El otro componente que se supone puede detraer los precios tiene intima vinculación con la Argentina. Para Chicago, la medida tomada por el gobierno argentino en cuanto a la reducción de retenciones a las exportaciones de los granos, va a generar un aluvión de ventas por parte de los productores argentinos y, se sabe, lo que abunda no vale. Las especulaciones hablan incluso de 5 millones de toneladas que podrían volcarse al mercado en un plazo relativamente corto. Trump sigue dando vueltas con sus tarifas. Seguramente hay varias negociaciones en curso (Rvista Chacra) El punto es que hasta el final de la rueda del miércoles, nada de esto había sucedido. Trump seguía amenazando con un 25% para México y Canadá, además de un 10% adicional al 40% vigente para China, ahora aparentemente con fecha de aplicación a partir de este fin de semana, aunque se sospecha que se están llevando a cabo ingentes negociaciones. En cuanto al aluvión de ventas en la Argentina, al menos hasta el tercer día de la semana todo seguía dentro de los carriles normales, en parte porque los precios no entusiasman demasiado y en parte porque aún quedan cuestiones por definir y aclarar. Seguramente una vez resuelto esto tanto soja como maíz y trigo serán comercializados con mayor intensidad. El punto es que lo que dominó la rueda de Chicago el último miércoles no fueron estos factores bajistas, que perdieron el control de la sesión a manos de otros claramente alcistas, vinculados con la situación en Sudamérica. En principio, los lotes de soja y maíz en la Argentina muestran un deterioro importante, y los pronósticos no son del todo tranquilizadores. Los cultivos de gruesa en la Argentina están sometidos a un importante estrés. Juega sobre los rendimientos potenciales (Revista Chacra) La condición de cultivo bueno-excelente de los lotes de maíz ha caído al 30%, en tanto este segmento se derrumbó en el caso de la soja a solo el 20%. Es una pérdida de rendimiento potencial nada despreciable. Las proyecciones hablan de lluvias en algunos días, no sin antes soportar temperaturas de bochorno. Quizás más preponderante aún es la situación en Brasil. El Centro Oeste del país es clave en su producción y en la conformación de volúmenes exportables. La soja desarrolló de manera formidable al amparo de lluvias durante todo el ciclo. El problema es que las precipitaciones, siempre bienvenidas dentro del desarrollo de un cultivo, no se detuvieron nunca. La cosecha de soja viene muy atrasada y está comprometiendo la implantación del maíz safrinha. Este es un tema crucial, porque el llamado maíz de invierno aporta el grueso de los despachos externos del vecino país, y tiene el tiempo justo para completar el periodo crítico antes del periodo seco en Brasil. La cosecha de soja en Brasil sigue muy demorada, y empieza a complicar la implantación del maíz safrinha (Revista Chacra) Como nunca, todo es posible dentro de este universo granario turbulento a raíz de este cumulo de razones que no terminan de definir una tendencia para la gruesa. Por ahora tanto los recortes efectuados a la producción argentina de maíz y soja como la poda a los números de Brasil es relativamente reducida en ambos casos, pero no debería descartarse un ajuste más importante. El trigo se mueve ajeno a estas idas y vueltas del clima en la región, pero las dudas crecientes sobre la producción y exportaciones de Rusia le han dado vida en las últimas ruedas. Todo esto sucede frente a la atenta mirada de un dólar notablemente fortalecido respecto de una canasta de monedas, potenciado por cada movimiento de Trump amenazando con concretar sus tarifas de castigo. El vigor de la divisa norteamericana juega en esta instancia –como ha sido siempre- contra los precios granarios. De no ser por su presencia las cotizaciones probablemente habrían ido un poco más arriba todavía. El nocturno de este jueves en Chicago arrancó con una previsible toma de ganancias. El inversor se cuida ante una tendencia que no está definida pero que deberá dar señales concretas en el corto plazo. La pelea está planteada y en no mucho más va a generar drivers que empujarán a los fondos hacia un lado u otro.
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