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Crespo » Paralelo 32
Fecha: 30/01/2025 02:31
En las primeras horas de este miércoles 29 de enero, alrededor de las 05:00 de la madrugada, el personal policial apostado en el Puesto Caminero Victoria protagonizó un hecho que conmovió a la comunidad. Una pareja oriunda de la provincia de Buenos Aires, que se encontraba descansando en la ciudad de Victoria, llegó desesperada al puesto solicitando ayuda para su bebé de 27 días, Luana Palomino, quien había sufrido una broncoaspiración con leche materna y se encontraba sin respiración y con falta de oxígeno. El Suboficial Mayor Jorge Albornoz, de la Dirección General de Prevención y Seguridad Vial, y el Cabo 1° Bautista Seghesso, de la Guardia Especial de la Jefatura Departamental Victoria, fueron los primeros en responder ante la emergencia. En cuestión de segundos, el Suboficial Mayor Albornoz realizó maniobras de reanimación cardiopulmonar (RCP) a la bebé, mientras el resto del personal policial coordinó un operativo para garantizar el traslado inmediato al Hospital Fermín Salaberry de Victoria. Con un móvil policial abriendo camino y la familia siguiendo en su vehículo particular, se logró trasladar a la pequeña Luana al hospital en el menor tiempo posible. Gracias a la rápida intervención de los efectivos y al esfuerzo de la familia, la bebé llegó en condiciones estables y fue asistida de inmediato por el personal médico. La bebé fuera de peligro Luana Palomino fue ingresada al área de Pediatría del Hospital Fermín Salaberry, donde permanece en observación. Según informaron las autoridades médicas, la bebé no presenta riesgo para su vida y su evolución es favorable. Este desenlace alentador fue posible gracias a la rápida actuación de los policías y a la colaboración de todos los involucrados en la emergencia. Reconocimiento a los héroes anónimos Los funcionarios que participaron en el operativo recibieron un emotivo reconocimiento por parte de sus superiores y de la familia de la bebé. En una visita al hospital, el Suboficial Mayor Albornoz y el Cabo 1° Seghesso pudieron ver a Luana y compartir un momento único con sus padres, quienes agradecieron profundamente su intervención. “Fue una situación muy intensa, pero estamos felices de haber podido ayudar. Ver a la bebé estable y en brazos de sus padres es la mayor recompensa”, expresó el Suboficial Mayor Albornoz. Por su parte, el Cabo 1° Seghesso destacó la importancia del trabajo en equipo y la coordinación en situaciones de emergencia.
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