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Parana » Ahora
Fecha: 29/01/2025 02:05
El revistero de la peluquería. El living de una casa en los noventa. El televisor como un familiar más que se cuela en las vidas, en las formas de nombrar, en los bailecitos de los recreos, en los deseos de la clase media baja. Pero también personajes de la realeza europea que dieron pena, que hicieron decir al final son como todos nosotros, hay cosas que no se pueden comprar. El consuelo de los pobres. Los libritos de Avón, la tipografía de las marcas, el consumo, las aspiraciones de una época. Leer a veces puede ser rebobinar el casette con la lapicera en los agujeritos, la Bic girando y el reproductor con la tapita abierta como una guantera. CORRECTO! de Ferny Kosiak es un libro de poemas que se traga todos los discursos que conocimos quienes nacimos en los ochenta y no por eso deja a afuera la actualidad, las pasiones como el fútbol, como Messi, como los sueños de los niños están y se reactualizan, repito es un libro de poemas que incorpora y sublima la nostalgia desde cosas, nombres, espacios. Rompe con el prejuicio sobre lo que entra o no en la poesía. Por suerte, como en la vida misma, estos poemas están cargados de porquerías y de tesoros como un cajoncito íntimo de la mesa de luz. Ferny Kosiak es Fernando Ariel y su nombre “como la Sirenita” encierra y despliega como el océano la materia de la que está hecho: aparecerá entonces su ojo editor, la agudeza del fotógrafo, la ironía del profesor, la sensibilidad del creyente descarriado, el rencor y el resentimiento serán lustrados hasta convertirse en aciertos. Verdades que se murmuran en la oralidad acá son versos. Crítica literaria que aburre en los libros, acá caerá como cascada. Inevitable deslizarse sin la sonrisa en las páginas. Ferny es mi amigo, sí, gracias a Dios desde hace más de veinte años. Y es de quien me nutro para aprender ciertos temas a los que no llegaría sin su insistencia. Una tozudez en profundizar en las figuras literarias entrerrianas, en el campo de estudio queer (cuando en la facultad ni se hablaba de esto), un avanzado que quizás está antes que nosotros en el tiempo que pretendemos construir desde el feminismo, desde las complejidades que significan tener mucho capital intelectual y poco recursos económicos, esa lucha entre el dinero y la falta. La creatividad como un despegue de lo mundano. Ferny está con la vista en otras cosas, en la torpeza de alguien que lee sus primeros poemas, él ve un futuro prometedor. Acierta. No porque adivine, sino porque cree y su fe es contagiosa. Un poema, Corríjanmen si me equivoco (arte poética en 21 partes), fija su atención en las patas de pulpo que se abren en el ámbito de los festivales, suma versos de la Barrandeguy, de la Bellessi, Bossi, Girri pero también aparecen dos amigas que se roban empanadas, que esa voz poética de quien vende libros detrás de una mesita mientras escucha y ve lo que sucede entre la guerra de egos, detiene su sagacidad cuando las dos chicas como hormigas llenan sus carteras con cosas del cátering. * Por un segundo dudo en delatarlas por eso del no robarás y la buena moral. No lo hago. Enseguida me inunda una tristeza profunda viendo este accionar prolijo de las muchachas que de a una caminan hasta el bufete se sirven un par de empanadas y, apenas alejadas, las guardan en sus carteras. Se quedan a la charla de la siesta y vuelven a repetir el ataque lento y sonriente en el cofi breic guardan sanguchitos y medialunas en sus bolsos llenos en un ciclo pautado entre las dos. Las observo encantado. Son lo mejor de este congreso son un espectáculo que solo yo observo. Esto no es demagogia es solo un comentario objetivo: gracias a los libros esas dos muchachas comieron dos o tres días. * Lady Di, Moria, Susana y los susanos, Messi, Tarragó Ros, el desfile de personalidades que quizás ya son vistas como lo carnavalesco en Gargantúa y Pantagruel según Bajtín, un poco deformados, un poco decadentes. Pero el brillo está en la voz descubriéndose a sí misma: pienso en cómo cada vez me emocionan más cosas que antes no lo hacían y en que eso debe ser parte de crecer. * Nota al pie: Doy por sentado que quienes aún no sepan quién es Ferny Kosiak o cómo conseguir sus libros, buscarán su nombre en las redes @fernykosiak en Instagram o @camalote.ed y se pondrán al tanto de la riqueza del catálogo que va construyendo desde su impulso genuino y arrollador de hacer de la creación literaria, un espacio abierto al mundo.
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