24/01/2025 05:36
24/01/2025 05:36
24/01/2025 05:35
24/01/2025 05:34
24/01/2025 05:33
24/01/2025 05:32
24/01/2025 05:30
24/01/2025 05:30
24/01/2025 05:30
24/01/2025 05:30
Buenos Aires » Infobae
Fecha: 24/01/2025 02:42
Trump busca aumentar la oferta de hidrocarburos bajo el lema "drill, baby, drill" (REUTERS) El presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, anunció este jueves que buscará que los principales países productores reduzcan los precios del los hidrocarburos y sostuvo que las tasas de interés deberían bajar “inmediatamente” después, por lo que sería una menor presión para la inflación a niviel mundial. Las palabras que brindó el mandatario ante el Foro Económico Mundial en Davos, Suiza, se enmarcan en la emergencia energética que declaró en su discurso de asunción. Trump dijo que pedirá a Arabia Saudita y a la OPEP que bajen el precio del petróleo. En ese sentido resaltó que, si eso sucede, “exigiré que las tasas de interés bajen inmediatamente” al tiempo que consideró que “de la misma manera, deberían bajar en todo el mundo”. Si bien habrá que esperar para ver si esos augurios se materializan, las definiciones del mandatario estadounidense pueden implicar un desafío para la Argentina en el desarrollo del shale oil y shale gas de Vaca Muerta. El sector energético es clave para que el país deje atrás sus históricos problemas de balanza de pagos, para sumar inversiones y representa una pieza fundamental en el programa económico del presidente Javier Milei. La Argentina tiene en Vaca Muerta la segunda reserva no convencional de gas natural y la cuarta de petróleo del mundo (REUTERS) Sin embargo, una eventual baja en los hidrocarburos a nivel internacional podría traer alivios para el Gobierno. La merma en los valores del barril de crudo ayudarían a mantener estable los precios del combustible a nivel local y a apuntalar la desaceleración de la inflación. Por otro lado, una baja en las tasas de interés a nivel internacional dejarían más cerca la vuelta de la Argentina a los mercados voluntarios de deuda. Los analistas anticipan que el anuncio del ahora en funciones presidente norteamericano puede no tener tanta incidencia en la industria local del crudo. Sin embargo, sí podría ser un riesgo para los proyectos de Gas Natural Licuado (GNL) que impulsa la petrolera de mayoría estatal YPF junto a otros jugadores del sector. Todo dependerá de lo que suceda con los precios internacionales. Para Alejandro Einstoss, consultor y miembro del Instituto Argentino de la Energía General Mosconi (IAE), el incremento en la oferta petrolera que buscará la Casa Blanca para bajar los precios de sus combustibles puede no afectar a la Argentina. “Los cañones en la industria local están puestos en la producción shale oil y mientras los precios se mantengan en torno a los USD 70 dólares por barril habrá un negocio rentable para exportar. Un millón de barriles diarios más en Estados Unidos no debería cambiar mucho y habrá que estar atentos a qué hace la OPEP”, dijo. La Administración de Información de Energía de los Estados Unidos (EIA, por su sigla en inglés) proyectó esta semana que los precios internacionales del petróleo caerán desde un promedio de 81 dólares por barril en 2024 a USD 74 en 2025 y USD 66 en 2026. Esa dinámica sí puede representar un alivio para los precios internos en la Argentina. El presidente de YPF, Horacio Marín, había lanzado en octubre pasado un “pacto” con los consumidores en el que los valores locales estarían atados a la dinámica internacional del barril de Brent, que es la referencia que se utiliza en el mercado europeo, en la Argentina y es una de las tres principales variables para los inversores. “Si los precios del crudo suben eso se trasladaría a los surtidores y viceversa”, dijo Marín. La baja de los precios internacionales del petróleo le quitan presión a la inflación en la Argentina La petrolera de mayoría estatal aplicó en octubre una baja promedio del 1% en nafta y de 2% en gasoil, el primer recorte en casi seis años, pero luego aplicó aumentos todos los principios de mes aunque por debajo de la inflación esperada. El barril tocó la semana pasada los USD 82, el más alto en tres meses, por lo que en YPF -líder absoluta del mercado doméstico- analizaban si eso se trasladaría a los precios finales en febrero. Sin embargo, las declaraciones que hizo en estos últimos dos días Trump generaron una baja hasta los USD 76 por barril y quitaron presión a nivel local. Los combustibles son un precio que el Gobierno sigue muy de cerca e incluso no permite que las petroleras apliquen subas por encima de la inflación, que desaceleró desde el 25% mensual en diciembre de 2023 -cuando hubo una devaluación del 54%- hasta un 2,7% en diciembre de 2023. Por otro lado, Daniel Montamat, director de la consultora Montamat & Asociados, advirtió que si el aumento de la producción de gas en EEUU implica más exportación de GNL por barcos podría deprimirse el precio internacional y dañaría las perspectivas de la Argentina. De hecho, Trump advirtió a la Unión Europea que tiene que comprarle más GNL a su país. De todos modos, agregó, las perspectivas inmediatas son positivas. “Si el invierno europeo es frío, como se pronostica, el precio del GNL tendría un par de años de firmeza o crecimiento; sería la oportunidad para cerrar contratos de demanda del acuerdo YPF-Shell e iniciar los proyectos de inversión”. La Argentina consiguió pasó de un resultado casi neutro en 2023 a un superávit de balanza energética de USD 5.600 millones, el más alto en casi dos décadas. En la industria local consideran que el país puede exportar de cara a 2031 unos USD 15.000 millones de GNL al año y otros USD 15.000 millones de petróleo. Esos USD 30.000 millones son equivalentes a lo que aporta el campo en buenos años de cosecha y podría resolver gran parte de los problemas de falta de dólares que históricamente enfrentó el país.
Ver noticia original