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Buenos Aires » Infobae
Fecha: 23/01/2025 12:50
El Fiat Punto de Leonardo Soldo fue abandonado en la Villa 31 La aparición de un auto abandonado en una de las pequeñas calles que surcan la Villa 31, en el barrio porteño de Retiro, sorprendió a los vecinos del asentamiento este miércoles por la noche. El vehículo, un Fiat Punto blanco, estaba cerrado, sin un rasguño y estacionado en medio del camino. “Está atravesado. ¿Viste? Está todo atravesado en la calle. No se puede pasar por acá. No se puede doblar, digamos. Acá está“, dice una vecina que registró el hallazgo con la cámara de su celular. El video, que dura pocos segundos, se viralizó en las últimas horas en redes. Fuentes del caso indicaron a Infobae que el Fiat era propiedad de Leonardo Ezequiel Soldo, un kinesiólogo de 44 años desaparecido y buscado desde el 18 de enero. Hoy jueves, en paralelo, Soldo fue hallado sin vida en la Morgue Judicial de la calle Viamonte, a donde ingresó, como NN, el 19 de enero, es decir, un día después de su desaparición. El día anterior, el 18, agentes de la comisaría 4D de Barracas, acudieron a un llamado al 911 que advertía sobre un hombre que se encontraba tendido en la calle desorientado, perdido en tiempo y espacio. No llevaba sus documentos, solo llegó a decirles a los oficiales que su nombre era “Leonardo”. Ocurrió en Pasaje Oncativo al 1900, muy lejos del lugar donde fue encontrado su auto. “Estaba con amigos y sufrió un paro, lo llevo el SAME y murió en un hospital”, indicaron fuentes del caso, sin dar más precisiones. Soldo, sin identificar, fue traslado al Hospital Penna donde murió por intoxicación psicomotriz. Mientras tanto, continúa el misterio en el asentamiento de Retiro. “Buen día, estamos en búsqueda de alguna información de su paradero hace 5 días que no da rastros y acaban de encontrar su auto acá en el barrio. Si alguien de casualidad lo vio o sabe algo, le pido su colaboración solo para saber si está vivo o muerto, pónganse en su lugar de sus familiares. No brindaremos ningún tipo de información, todo será anónimo, no tenga miedo de escribirnos, por favor”, posteó en un grupo de Facebook uno de los vecinos del asentamiento. Por su parte, la esposa de Soldo, Ludmila, en un principio, había tomado el hallazgo como un dato esperanzador: “Dale gordo, danos una señal, una buena noticia, hoy te estamos esperando”, publicó en su perfil. Sin embargo, horas después, su muerte fue confirmada. Noticia en desarrollo
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