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Gualeguaychu » El Argentino
Fecha: 18/01/2025 04:40
El titular de la Subsecretaría de Cultura, Deportes y Juventud fue el primer funcionario en hablar del tema. “Fue una decisión política absolutamente de Presidencia, así que el área nuestra no tiene intervención”, aclaró en una entrevista. El Ejecutivo no ha explicado formalmente su decisión. Viernes, 17 de Enero de 2025, 18:12 Redacción EL ARGENTINO El gobierno municipal de Gualeguaychú decidió desmantelar el mural que recordaba a las víctimas de la última dictadura cívico-militar y que le daba sentido al Salón de la Memoria en el palacio Municipal. Como dio a conocer EL ARGENTINO el fin de semana pasado, ahora el espacio se llama “Salón Azul”. El mural fue realizado por la artista plástica Marta Pardo en 2016 y representaba a las personas desaparecidas de la ciudad, que en ese momento eran 21 víctimas y más tarde, gracias a una investigación llevada a cabo desde el Museo de la Memoria Popular de Gualeguaychú, se reconocieron 16 más. Cada una de ellas estaba presente en el mural con una foto, por lo que para su realización se contó con el aporte de los familiares, lo que refleja una dimensión colectiva de la obra. La artista, a partir de las fotografías, diseñó el espacio del gran mural, donde había brazos que contenían cada foto y, al mismo tiempo, portaban los nombre de cada desaparecido y desaparecida. Para la producción del mural en una pared de gran tamaño y altura, Pardo realizó un arduo trabajo que implicó el uso de andamios y asistencia para pintar y colocar las fotos. El mural fue creado específicamente para ese salón y cobraba sentido en ese espacio. Así, la ubicación de la obra en la Municipalidad no resultaba un detalle menor. Se trata de una sala ubicada en una institución pública, es decir que pertenece a toda la comunidad, y que le daba visibilidad a una parte central de la historia de la ciudad a los diversos sectores sociales, políticos y económicos que pasaban por allí. La noticia de su desmantelamiento generó mucho rechazo en la comunidad local, sobre todo en organizaciones de Derechos Humanos, políticas y gremiales. Sin dudas, el repudio más potente fue el de Madres de Plaza de Mayo Gualeguaychú. “Con este acto, que se suma a lo realizado por la Intendencia de la ciudad: el cierre de la Dirección de Derechos Humanos y el del Museo de la Memoria Popular de Gualeguaychú, se pretende borrar, hacer desaparecer nuevamente a nuestros queridos coterráneos que sufrieron tortura y muerte a manos de los militares que usurparon el poder de nuestra República en el año 1976, usurpación que duró hasta 1983”, expresó la institución a través de un comunicado. Lo propio hizo el bloque de concejales del Partido Justicialista (PJ), desde donde indicaron que “esta acción, realizada sin previo aviso ni justificación pública, constituye un acto de intolerable desprecio hacia las víctimas de la dictadura cívico-militar y un intento burdo de manipulación de nuestra historia”. “Tapar un mural que simboliza la lucha por la memoria, la justicia y los derechos humanos, es un acto de cobardía política que busca silenciar una parte fundamental del pasado de Gualeguaychú”, cuestionaron desde el espacio opositor, al tiempo que exigieron al intendente Mauricio Davico “una explicación pública sobre esta acción”. Los repudios se sucedieron: hizo lo propio la CTA Gualeguaychú y la seccional local de la Asociación Gremial del Magisterio de Entre Ríos (Agmer). Pero, al menos hasta ahora, la explicación pública no llegó. Una decisión del Intendente Si bien el Ejecutivo no ha explicado públicamente lo que hizo, quien se refirió escuetamente al tema fue el subsecretario de Cultura, Deporte y Juventud, Luis Castillo. Lo hizo en una entrevista en Radio Cero, al ser consultado por el tema. “No se trata de un cuadro, sino de un mural”, aclaró ante la pregunta. “Eso está en el salón de recepción de Presidencia, por lo tanto, fue una decisión política absolutamente de Presidencia, así que el área nuestra no tiene intervención. Y, de última, no nos olvidemos que los funcionarios estamos para, eventualmente, responder a los pedidos que se nos hagan desde el Ejecutivo y no para cuestionarlos. En este caso fue una decisión política del ejecutivo y por ahí va”, expresó el funcionario. Si bien EL ARGENTINO intentó, por diversos medios, tener la posición oficial del Municipio de Gualeguaychú con respecto al tema, los intentos fueron infructuosos. Aunque, fuentes oficiales contaron que “el tema del mural” generó varias controversias para adentro y que, si bien no es una decisión tomada, “se podría salir con un comunicado” que aclare la postura del Ejecutivo. Es lógico que el tema genere posiciones encontradas en la gestión, ya que la misma esta integrada por libertarios y adeptos al macrismo, pero también por peronistas y radicales, con una historia de compromiso con los Derechos Humanos. De hecho, fue el propio Castillo el que se reunió con la artista Marta Pardo para comunicarle la decisión del Intendente. El funcionario le expresó su desacuerdo con la postura de Davico y le ofreció “trasladar” el mural al Museo del Carnaval -que, según se anunció, reabrirá sus puertas este año- o que la artista intervenga una suerte de gigantografía que se propuso realizar con fotos de la obra. Lógicamente, Pardo se negó. Primero, poque no se puede trasladar un mural, prácticamente es inviable; segundo, porque lo realizó para que esté en ese lugar, no en otro. En palabras de la autora de la obra: “Los dictadores pensaron que con el miedo y el terror que implantaron nos íbamos a quedar quietos y olvidar. No sé bien qué pretende el gobierno de Mauricio Davico con esta decisión, pero borrar el mural de la memoria es un acto de gobierno muy cruel. Es como profanar la memoria de la ciudad”. “Imaginate si un día, por motivos desconocidos, la Municipalidad borra las huellas que hay en los espacios públicos de la lucha contra las papeleras y por el cuidado del ambiente o se le ocurre sacar todas las estrellas amarillas que señalan los lugares donde murieron personas en accidentes de tránsito. Para las personas cercanas a cada una de esas situaciones sería terrible, pero el tema va más allá, nos interpela a todos y a todas como parte de una sociedad, como parte de una ciudad”, expresó a EL ARGENTINO.
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