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» Diario Cordoba
Fecha: 13/01/2025 04:09
Dolido, insatisfecho e incluso rumiando todavía alguno de los últimos lances del encuentro. Así acabó el choque entre su Córdoba CF y el Almería el meta Carlos Marín, capitán blanquiverde, que en la primera cita del 2025 tuvo que encajar un golpe de realidad: El Arcángel no es infalible, aunque casi. «Sabíamos que podía llegar. Esto es fútbol, hay que mirar hacia adelante siempre», confesó el almeriense, elogiando el poderío del cuadro indálico en una cita que tan solo pudo determinarse tras la expulsión al inicio del segundo acto. La expulsión condiciona «Lo he sentido desde dentro. Después de eso, el equipo ha perdido un poco el orden, estábamos en inferioridad, contra este equipo que transita con jugadores muy peligrosos. Queríamos seguir yendo al ataque, pero ya estábamos muy expuestos. A raíz de la expulsión estábamos muy expuestos», admitió. Frente al club de su tierra, además, el meta tuvo que lidiar con su décima pena máxima de la temporada, pero en contra: «Esas acciones nos están penalizando, ha condicionado el partido. Sabía que lo podía tirar ahí, lo he adivinado, pero me queda mal sabor de boca porque creo que lo podía haber parado y dar un poco de pie al equipo para competir a este gran Almería», manifestó. Quiso por último lanzar un mensaje optimista Marín, eso sí, reconociendo el «dolor» por la derrota, aunque también sus ganas de desquitarse en un futuro: “Hoy duele, duele bastante, perder con ese resultado tan abultado. No queríamos, nos sentíamos con confianza, pero también hay que ser realistas, sabíamos el equipo que venía, claro candidato al ascenso directo. Ya en el próximo entrenamiento ponernos a trabajar. Con ganas de la siguiente para quitarme esta derrota y poder ganarles, que para mí sería bonito», cerró.
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