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» Elterritorio
Fecha: 10/01/2025 08:15
Ya se reportaron los primeros casos en localidades de Misiones y Corrientes de felinos infectados por este hongo. Actualmente es considerada una enfermedad emergente con potencial epidémico para la salud humana y animal por lo que está en vigilancia epidemiológica jueves 09 de enero de 2025 | 17:33hs. Las lesiones ulcerosas aparecen en el rostro de los gatos. Misiones y Corrientes trabajan en la vigilancia epidemiológica de la Esporotricosis, una enfermedad provocada por el hongo Sporothrix brasiliensis y de la que ya se detectó la primera docena de casos entre ambas provincias. Afecta principalmente a los gatos, pero la preocupación radica en que puede ser traspasada a perros y a seres humanos a través de la mordedura, rasguño o contacto con las secreciones de los felinos infectados. Desde el Consejo Profesional de Médicos Veterinarios de la provincia advierten que se van a ver cada vez más casos y alertan sobre los riesgos y cuidados que se deben tomar para evitar que la zoonosis se propague. “Estamos empezando a diagnosticar los casos y se está trabajando ya en conjunto con con el Ministerio de Salud para, sobre todo, primero alertar a los veterinarios de que vamos a empezar a ver esos casos y que hay que tener mucho cuidado, que inclusive nosotros como veterinarios debemos protegernos bastante porque produce lesiones ulcerosas, que están en la cabeza, en la boca de los gatos. Cuando vamos a revisar el animal, inclusive el mismo propietario después que se hace el diagnóstico, tiene que tener mucho cuidado porque es un hongo que puede llegar a aparecer en las personas”, explicó a El Territorio Pablo Castillo, titular del Consejo Profesional de Médicos Veterinarios de la provincia. Si bien afecta principalmente a los felinos, también puede afectar a los perros que tienen contacto con los gatos infectados, principalmente si comparten el hogar. Hasta el momento se vieron dos casos positivos en canes, sostuvo Castillo. Tal es así que en diciembre del año pasado en el marco del proyecto de investigación sobre “Esporotricosis por Sporothrix brasiliensis en localidades correntinas y misioneras del Corredor Jesuítico Guaraní Argentino”, se realizaron acciones de prevención y vigilancia en felinos de la ciudad de Iguazú. La actividad se había desarrollado de manera conjunta entre investigadores del Laboratorio de Análisis Integral del Instituto Misionero de Biodiversidad (Imibio); la Universidad del Salvador (Usal), la Dirección de Zoonosis de la Municipalidad local y el Ministerio de Salud Pública; se hicieron actividades de prevención, un censo de animales de compañía (felinos y caninos) con posterior toma de muestras de la población felina censada. “Hemos tenido casos positivos en Corrientes, en Aristóbulo del Valle y donde más se encontró es en Iguazú, que es donde sienta nuestro laboratorio de referencia, entonces también se hizo más fácil quizás encontrarlos ahí, pero creemos que está presente en toda la provincia porque en Brasil ya se lo está considerando una endemia”, detalló el profesional veterinario. ¿Dónde se encuentra el hongo? La Esporotricosis es una micosis de implantación causada por hongos del complejo Sporothrix schenkii, y su distribución es mundial. Se encuentran generalmente en la vegetación, en la materia orgánica en descomposición y en el suelo en forma micelial “que es la forma infectante y en los animales domésticos y silvestres, incluido el hombre, el hongo desarrolla la forma de levadura (o fase parasitaria) a esta característica se la conoce como dimorfismo”. En un artículo publicado por el Imibio, además se explicó: “De este complejo de hongos la especie más virulenta, de transmisión zoonótica y enzoótica es Sporothrix brasiliensis, una zoonosis asociada a los gatos. Actualmente es considerada una enfermedad emergente con potencial epidémico para la salud humana y animal”. Es así que el hongo puede ser transmitido de gato a gato, de gato a perro y de gato a humano mediante, como se dijo más arriba, mordedura, rasguño o secreciones de un gato infectado. ¿Cómo se previene y se trata? Los gatos infectados con esporotricosis generalmente presentan lesiones en la cara, principalmente alrededor de la nariz. Las lesiones se producen principalmente a partir de las heridas durante peleas con un gato infectado. Los felinos que se lamen heridas infectadas en otras partes del cuerpo pueden también transferir los hongos a su cara y boca. Si bien no hay vacunas que puedan prevenir esta enfermedad sí hay una serie de acciones que los propietarios de las mascotas pueden tener en cuenta para evitarla. “Tratar de que el gato esté castrado, esté vacunado, desparasitado, que haga una vida en un ambiente lo más controlado posible, aunque sabemos que en el gato no es tan fácil como en el perro lograrlo. No hay vacunas por lo que si se ven las lesiones no esperar a que el proceso se agrave”, insistió Castillo. En tanto, la cartera sanitaria provincial además recomendó mantener a los gatos con controles clínicos veterinarios al día, en caso de lesiones sospechosas usar guantes, barbijo y/o máscara facial al manipular los animales, evitar el contacto con gatos desconocidos, especialmente callejeros, evitar contacto de gatos domésticos con callejeros y/salvajes, lavarse las manos luego de tocar a los animales y aislar al animal enfermo durante el tratamiento. “Son tratamientos de varias semanas, inclusive un par de meses en algunos casos. Durante todo ese período hasta que se pueda resolver el caso la familia del propietario y el veterinario que lo va a atender son los que están más expuestos”, destacó el veterinario En esa misma línea, recomendó: “Si hay una persona en la familia que está inmunosuprimida por lo que fuese, adultos mayores o bebés, tratar de no darle de comer al gato, no limpiarle, no darle la medicación. Si ven lesiones ulcerosas en la cabeza, en los miembros, en la boca que no se curan hay que estar atento”. Fortalecer la prevención Las acciones que se llevaron adelante en Puerto Iguazú en diciembre el año pasado se complementan al proyecto de investigación que busca aportar al conocimiento de la situación epidemiológica de esta micosis y contribuir al fortalecimiento de la prevención y vigilancia en el Corredor Jesuítico Guaraní, principal vía de intercambio terrestre con Brasil. Se detalla en en el artículo del Imibio que el estudio se desarrolla entre la institución, el Ministerio de Salud de Misiones, la Facultad de Ciencias Agrarias y Veterinaria de la Universidad del Salvador de Virasoro, Corrientes (Usal), el Instituto Nacional de Enfermedades Infecciosas (Inei) de Buenos Aires, el Instituto Nacional de Medicina Tropical (Inmet) Iguazú, la Dirección de Zoonosis de Puerto Iguazú, Zoonosis de Virasoro, Washington University in St. Louis, USA y el Centro de Recate de Fauna Silvestre Guiráoga de Iguazú. El Imibio es el encargado de procesar fenotípicamente las muestras en el Laboratorio de Microbiología y ante un caso sospechoso alertar a la Dirección de Epidemiología de la provincia con el fin de iniciar las acciones correspondientes para evitar la propagación de la enfermedad a las personas. Asimismo, toda muestra animal o humana es derivada, vía Red de Laboratorios, para su confirmación al Departamento de Micología del Malbrán.
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