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  • La Tora: el abuso que marcó su vida, el sueño de ser famosa y qué compraría con un millón de dólares

    Buenos Aires » Infobae

    Fecha: 10/01/2025 04:37

    Lucila Villar, conocida como La Tora, es una de las destacadas participantes de la edición 2022 de Gran Hermano. Se caracteriza por su personalidad arrolladora y un estilo directo. En la casa, ha sido protagonista de intensos enfrentamientos con sus compañeros y captó la atención del público por su actitud desinhibida y su manera de expresar sus opiniones sin filtro. A lo largo del juego, demostró una gran fortaleza y un temperamento explosivo que generó tanto admiración como rechazo entre los televidentes. Sin embargo, también tuvo momentos de vulnerabilidad, que permitió que algunos de sus seguidores conecten con su dura historia de vida. Fue la quinta eliminada, pero luego volvió a ingresar en un repechaje. Tras su paso por el reality, Lucila logró construir una carrera en los medios. Supo aprovechar su tiempo en el programa para fortalecer su presencia mediática y abrir nuevas oportunidades en el mundo del entretenimiento. Actualmente, es digital host en el streaming de Telefe y en Directv Go. En sus redes sociales cuenta con una comunidad de un millón y medio de seguidores. La Tora: “Hoy soy popularmente conocida, el día de mañana voy a ser famosa”. (Candela Teicheira) Pollo: — ¿Por qué te anotaste en Gran Hermano? Tora: — En realidad me anoté en 2016 o 2017, hice hasta el tercer casting y no quedé. Tengo el recuerdo de cinco monos con una cámara que era como un extraterrestre y yo en ese momento tenía el doble de pechos, porque tengo una reducción mamaria, estaba inhibida con la cámara y no quedé. En el 2022, yo me iba a ir a vivir afuera, estaba cansada de todo, había vendido la mayoría de las cosas de mi casa. Hice el video del casting por las dudas y en el día del amigo nos juntamos con mis amigas y me dicen: “¿Por qué no lo mandás? No perdés nada”. Pollo: — Ya estabas casi con la valija para irte... Tora: — Les dije: “Amemos entre todas la presentación. En historia de vida, ¿qué pongo? Tiene que ser en dos renglones”. Ahí arranqué con los ítems y dije: “Con esta me eligen o me elijen”. Abuso, novio muerto, adicta al sexo, cristianismo, deporte y disciplina. “Me van a querer”, dije. Pollo: — ¿Y para qué entraste en la casa? Tora: — Porque quiero ser famosa, no por la fama en sí, sino por el poder que te da comunicar. Pollo: — ¿Es verdad que pusiste todo eso en la presentación? ¿Todas esas cosas te pasaron? Tora: — Sí, es verdad. Pollo: — ¿Lo del abuso es intrafamiliar? Tora: — Sí. Pollo: — ¿Hablás de eso? Tora: — Sí, no me molesta. Fue cuando tenía unos 8 años. No tengo el recuerdo de cuántas veces fueron y nunca dije quién fue. Mi familia lo sabe, pero en cámara no lo dije. Hoy lo hablo, lo cuento y me llegan un montón de testimonios. Cuesta mucho cuando alguien es abusado, decirlo. Así como si alguien te maltrata, decir: “Fui golpeada” es difícil. Cuesta mucho ponerlo en palabras y creo que, con el tiempo, es cuando lo podés decir y una vez que lo aceptás. Pollo: — ¿Falleció un novio tuyo? Tora: — Sí, eso no lo cuento mucho. Pollo: — ¿Y sos adicta al sexo todavía? Tora: — Era. Fue un momento muy turbio de mi vida. Ahí me metí en todas las malas y mi novio de ese momento tampoco era muy bueno que digamos. Era re buena persona y yo lo amaba, pero estaba con las drogas, con todas... Pollo: — ¿Y te llevó ahí? Tora: — Sí, estuve mucho en su oscuridad. Pero en realidad él me llevó a mí a algunas, pero a la vez siempre tenía a mi lado un ángel que me decía que era mi mamá y mi papá y sabía que tenía que volver a mi casa. Sabía que si salía a tal hora, tenía que volver, que no podía volver a las 11 de la mañana porque mis viejos me estaban esperando. Era una piba rebelde, básicamente. Después que este novio fallece, cambio de grupo, empiezo a salir y el alcohol va de la mano con un montón de cosas. Ahí es donde va la parte del sexo en la que decís: “Vamos, vamos” con quien sea… "Quiero ser famosa no por lo que es la fama en sí, sino por el poder que te da comunicar", confesó Lucila. (Candela Teicheira) Después de GH Pollo: — Más allá del reality, hoy estás haciendo una carrera sólida en los medios. Tora: — Es una locura porque siempre veía a Susana Giménez y me encantaba, veía Gran Hermano sin entender lo que era y me gustaba. Me gustaba la tele. Siempre digo que hoy soy popularmente conocida y que el día de mañana voy a ser famosa. Pollo: — Pero hoy ya sos famosa. Tora: — No, soy popularmente conocida. Pollo: — ¿Sería una escala más abajo que famoso? Tora: — Es un montón decir famosa. ¡¿Quién sos garrapata?! (risas). Pollo: — ¿Pero vas en la calle y la gente te saluda? Tora: — Sí. Pollo: — Famosa. Tora: — Popularmente conocida (risas). Pollo: — Bueno, lo que te quede cómodo a vos... Tora: — Sí, me hace sentir más cómoda ese término. Pollo: — Gran Hermano es difícil, pero lo más complejo es que no se sabés qué pasa después de tener tanta popularidad repentina. Yo creo que lo capitalizaste bien. ¿Vos estás conforme? Tora: — Sí, re. Estoy feliz. Gran Hermano es una experiencia hermosa, pero después hay que saber aprovecharlo. Nada viene de arriba, como en la vida. Antes de ingresar a la casa, cuando tenía poco laburo, hacía emprendimientos para tener más trabajo y más ingresos. Acá es lo mismo. Siempre me mostré predispuesta a laburar de lo que sea, a hacer notas con quien sea y a poner el pecho. Siempre me mostré dispuesta y dije: “Yo estoy, teneme en cuenta”. Pollo: — No desaprovechaste la oportunidad de ir por tu objetivo. Tora: — A mí me pasó que cuando salí de GH yo ya había tenido un montón de noche, de chongos, alcohol, un montón de todo en la vida. Ya la pasé esa. Cuando salto a la popularidad, si me venía a hablar uno que tiene tres o cuatro palos de seguidores, no me iba a mover el piso porque yo en mi vida ya he conocido gente así sin ser La Tora, entonces yo no salía, dormía, estaba predispuesta si tenía que hacer una nota temprano a ir a un programa y a otro, fue la disciplina también. Siempre que se prende la cámara yo intento estar al 100 por ciento o más. Juego del millón Con una valija llena de dinero, el Pollo invitó a Lucila a comprar todo lo que desee con un millón de dólares. El único requisito es que no se puede donar ni guardar como ahorro. Pollo: — ¿Tenés un millón de dólares? Tora: — No. Pollo: — Bueno, hay que quemarlo. ¿Con qué arrancás? Tora: — 100 mil puede ser para llevar a todo mi grupo de amigas a México. Pollo: — ¿Al Caribe? Tora: — Sí, todo pago. Pollo: — ¿Tulum? ¿Cancún? ¿Playa del Carmen? Tora: — Sí. ¿Llegamos? Sino meto canje... Pollo: — ¡Sí! Te sobra. ¡Ni un arroba! Tora: — Entonces meto un grupo como de 15 amigas, unos 10 días. Pollo: — ¿Qué más? Tora: — Después me compraría tres departamentos. Algunos están 70 mil… Pollo: — ¡¿Dónde?! Pasame la data (risas). Tora: — En “Bera” hay, en Quilmes. “Hay que buscar”, diría mi mamá. Pollo: — Pero tenés que pensar que eso el día de mañana lo puedas vender y generes dinero o valga, como mínimo, lo mismo. Tora: — Sí, obvio. Voy a hacer esto: compro en pozo, pongo la mitad y la otra mitad que falta lo voy pagando con el alquiler. Así después puedo comprar seis. Uno le doy a mi mamá, otro para mí. En el centro de Berazategui. Pollo: — Te quedan 600 mil. Tora: — Con 100 pongo una fábrica de sandwichitos de miga. Pollo: — ¡¿Por qué?! Tora: — Me re gustan (risas). “Gran Hermano es una experiencia hermosa, pero después hay que saber aprovecharlo”, advirtió la ex participante. (Candela Teicheira) Pollo: — Pero a mí me gustan los chocolates, pero para comerlos. Tenés que saber del mercado de sandwichitos de miga… Tora: — Contrato a alguien. Pollo: — Hasta ahora fue todo a inversión, salvo el viaje de las chicas. Tora: — Es que me da mucha culpa gastar en cosas caras. Separaría 100 para dárselo a alguien que sepa de la Bolsa. Pollo: — Pero ahora te las estamos regalando nosotros, podés gastarlo tranquila. Tora: — Estas 100 me las gastaría en un montón de gafas. Pollo: — ¡¿100 mil dólares en gafas?! Tora: — Sí, total ya me compré la casa. Pueden ir en un vestidor gigante. Pollo: — Te quedan 200 mil. Tora: — ¡Te llevo! Pollo: — ¿A dónde? Tora: — Vamos a la Fórmula 1 en Mónaco. Pollo: — ¡Ay, me emociono! Tora: — Mi favorita es Mónaco. Pollo: — Me encanta. Tora: — La llevamos a Tefi (Russo) también, porque sino, capaz se corta ahí el clip y me mata si te digo: “Te llevo…” y dejo un lugar libre por las dudas. Vamos cuatro. Mirá la entrevista completa: Casino Resort - La Tora

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