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» SL24
Fecha: 08/01/2025 15:22
Facebook Twitter LinkedIn WhatsApp Este miércoles 8 de enero de 2025, en los Tribunales Provinciales de San Lorenzo, se llevó a cabo la audiencia imputativa contra Miguel Ángel Farías (M.F.), Federico Pérez (F.P.), Adrián Ungaro (A.U.) y Mariano Aguilar (M.A.) por su presunta participación en el homicidio de Cristian Joel Barreto, ocurrido el 30 de diciembre de 2024 en Puerto General San Martín. El juez Ariel Cattaneo admitió la acusación presentada por el fiscal Aquiles Balbis y dictó prisión preventiva efectiva para los cuatro imputados. Miguel Farías fue señalado como instigador del delito de homicidio agravado por el uso de arma de fuego. Federico Pérez fue imputado como partícipe necesario del homicidio, en concurso real con tenencia de arma de fuego de guerra (cinco hechos) y tenencia de arma de fuego de uso civil (un hecho). Según la investigación, el 29 de diciembre de 2024, Farías habría amenazado a un allegado de la víctima en Puerto General San Martín, declarando su intención de asesinar a Barreto debido a conflictos relacionados con el comercio de estupefacientes. Al día siguiente, un hombre no identificado descendió de un vehículo Peugeot 208, propiedad de Federico Pérez, y disparó al menos 15 veces con una pistola calibre 9 mm contra Barreto, quien se encontraba limpiando un terreno en la Ruta 11. El atacante luego huyó en el vehículo, cumpliendo supuestamente lo acordado con Farias y Pérez. Por su parte, Adrián Ungaro y Mariano Aguilar fueron imputados por encubrimiento agravado, ya que habrían recibido el Peugeot 208 utilizado en el crimen, con el objetivo de ocultarlo en un domicilio de Rosario. Además, en el domicilio de Farías se encontraron múltiples armas de fuego, entre ellas una pistola ametralladora calibre 9 mm, un revólver calibre .357, varias pistolas de distintos calibres, cartuchos intactos y otros elementos vinculados a las armas, configurando los delitos de tenencia ilegal. El Ministerio Público de la Acusación calificó el hecho como homicidio agravado por el uso de arma de fuego. Miguel Ángel Farías fue imputado como instigador, mientras que Federico Pérez enfrenta cargos como partícipe necesario, en concurso real con la tenencia de armas de fuego de guerra y uso civil. Otros implicados, Adrián Ungaro y Mariano Gonzalo Aguilar, fueron acusados de encubrimiento agravado por intentar ocultar el vehículo utilizado en el crimen. Pruebas e imputaciones La investigación dirigida por la Policía de Investigaciones de San Lorenzo y el Ministerio Público de la Acusación reveló una serie de pruebas que vinculan a los acusados con el hecho: Conflicto previo: Informes policiales y entrevistas a testigos señalan la disputa por la venta de drogas como el móvil del crimen. Miguel Farías fue identificado como líder de un búnker en Puerto General San Martín. Evidencia en el lugar del hecho: Las vainas servidas y el calibre de las balas coinciden con armas halladas posteriormente en la casa de Federico Pérez en Rosario. Vehículo utilizado: El Peugeot 208 rojo, dominio AC732TY, propiedad de Pérez, fue identificado en el lugar del homicidio y posteriormente incautado en un operativo policial en Rosario. Armas de fuego: En el domicilio de Federico Pérez se hallaron varias armas, incluyendo pistolas de calibre 9 mm, un revólver calibre .357 Magnum, y una pistola-ametralladora. Además, se encontraron municiones y cargadores compatibles con las usadas en el homicidio. Detenciones: Miguel Ángel Farías fue detenido el 3 de enero de 2025 mientras circulaba en un Toyota Corolla gris, y Federico Pérez en su domicilio de Rosario, donde también se secuestraron documentos del vehículo Peugeot 208.
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