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» Elterritorio
Fecha: 05/01/2025 09:41
Magdalia Villalba es paraguaya y su aprendizaje la llevó a contribuir en la capilla Virgen de Itatí en Jardín América domingo 05 de enero de 2025 | 6:05hs. Tiene 64 años y un amplio recetario de la cocina paraguaya. Foto: Esteban González Las costumbres y conocimientos se transmiten de generación en generación. Las distintas recetas hacen que tengan continuidad con la ilusión de que perduren en el tiempo y se conviertan en un aporte para la comunidad. Esta historia nos lleva a Jardín América. Allí, Magdalia Villalba (64) prepara con mucha dedicación y amor distintos platos típicos de Paraguay, país donde nació. Tras conocer a su pareja, Cristóbal Insaurralde, se casaron y residen en la actualidad en la provincia de Misiones. No obstante, la protagonista trajo consigo el saber en la cocina, lo que aprendió de joven y que ahora contribuye en momentos especiales para juntar fondos para la capilla Virgen de Itatí en la Ciudad de las Diagonales. “En el año 95 empezamos a hacer caburé en la comunidad de la capilla en algunas ocasiones y en la plaza Colón todos los domingos. Yo sabía preparar todas las recetas porque se consumía en casa y nos identifica con la cultura paraguaya”, expuso. Villalba, siempre atenta y con una sonrisa, amablemente atiende a la concurrencia. La tarea la realiza junto a su esposo y otros miembros de la mencionada capilla para juntar fondos y así también agradecer todas las bendiciones recibidas por parte de la madre de Dios, bajo la advocación de Nuestra Señora de Itatí. Cada año, en la antesala de San Juan Bautista, en la capilla se hacen durante el mediodía y la noche distintos platos típicos de la región y se venden. Por la noche del 23 de junio, en vísperas del santo, llevan adelante los juegos tradicionales como el cruce de brazas, palo enjabonado, entre otros. En tal ocasión, ella prepara con un grupo de personas todas las comidas que se ofrecen durante todo el día. Un trabajo en equipo, como también una buena oportunidad para hacer todo lo que aprendió desde pequeña. “El secreto está en los ingredientes, principalmente en el almidón y el queso”, dijo la entrevistada al ser consultada sobre que se necesita para hacer el producto de la mejor manera. A su vez, especificó que no sólo caburé saber hacer, también prepara riquísimas chipas so’o, pastel mandi’o, mbeyú, chipa guazú, sopa paraguaya. “En realidad no nos dedicamos a la producción y venta para mi familia, más bien para colaborar con instituciones de Jardín América y servir en la capilla”, aclaró. Por último, reflejó que lo que aprendió es útil y le genera una gran satisfacción enseñar a los demás, tanto a sus hijos como a otras personas. “Siempre digo que nadie es eterno, esto debe continuar, yo doy la receta sin problemas e incluso enseñé a mucha gente que puso sus propios locales, no soy de mezquinar porque cada uno tiene una mano distinta para hacer la comida y el legado debe seguir”, cerró. Compartí esta nota:
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