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» Diario Cordoba
Fecha: 29/12/2024 06:06
Como múltiples sectores, las empresas de bebidas alcohólicas están desarrollando durante los últimos años iniciativas y proyectos para optimizar sus procesos de producción y distribución, y para hacer frente al cambio climático y hacer más sostenible su actividad. Un sector al que también le afectan problemas directamente relacionados con el cambio global como las sequías, por el propio consumo de agua que realizan. Ejemplo de este tipo de empresas en Córdoba, y con mayor tradición en fechas navideñas como las actuales, es la empresa denominada Hijo de Rafael Reyes, más conocida por su anís ‘Machaquito’ y por su Destilería Museo, ubicado en el municipio cordobés de Rute. Con una tradición de casi siglo y medio (la firma data del año 1876), esta empresa se dedica a la fabricación de aguardientes y licores; pero también apuesta por el turismo industrial y sostenible con su museo, el cual le permite también aportar mayor viabilidad a su proyecto y a su producto estrella, el anís ‘Machaquito’ seco, aunque también fabrican anís dulce y distintos licores de frutas y de café y guindas; «que son producidos siguiendo técnicas tradicionales, con el uso de recursos naturales, y apostando por la sostenibilidad», indican desde esta empresa. No en vano, y como afirman, «la destilación en alambiques de cobre, con combustible de leña de olivo o encina, sigue siendo el método utilizado para la elaboración de nuestros productos; si bien en los demás procesos de fabricación se utiliza la última tecnología y los medios más eficientes». Además, desde esta destilería y museo resaltan que desde hace varios años «estamos comprometidos con el medio ambiente», y, por ejemplo, todo uso de plástico que venían generando para sus degustaciones, bolsas, packaging de productos, etc., «se eliminó para dar paso al uso de materiales más sostenibles como el cartón biodegradable». Detalle del Museo Destilería de la empresa Hijo de Rafael Reyes, en Rute. / Córdoba Todo ello sin olvidar el componente de sostenibilidad ‘navideña’, pues desde hace cuatro años esta empresa dona a diferentes asociaciones de Rute la cantidad que destinaban a la iluminación de Navidad, «pudiendo aportar así nuestro granito de arena con estos colectivos y, además, reducir el consumo eléctrico que ello generaba». Entre otras iniciativas, también esta empresa ha participado en el proyecto de turismo sostenible ‘Somos Turismo We ODS’, de la mano de Cic Batá, contribuyendo con los Objetivos de Desarrollo Sostenible 2030, «abogando por un turismo responsable y sostenible, es decir, respetando nuestro entorno natural y cultural». En este sentido, los visitantes de su museo pueden comprobar que sus anises se destilan con la misma fórmula y en el mismo lugar, de la manera más artesanal y tradicional posible, en los citados alambiques de cobre calentados a la lumbre de la leña del olivo. Su modelo de turismo industrial plantea una visita en la que un guía no sólo explica todo el proceso de destilación del anís, sino las diferentes partes de esta fábrica como pueden ser la sala de alambiques, la propia leñera -donde se almacenen dos toneladas de leña de olivo- y la sala de embotellado, que cuenta con tecnologías que aportan rapidez y reducción de residuos a la hora de embotellar. Todo ello junto a una exposición histórica en torno a ‘Machaquito’, que muestra documentos que acreditan los distintos premios y dilatada historia de esta marca cordobesa de anís. En resumen, un ejemplo cordobés de cómo el antiguo sector primario e industrial de los entornos rurales de la provincia del siglo XIX ha sido capaz de reconvertirse para lograr la necesaria sostenibilidad en el primer cuarto del siglo XXI.
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