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» Elterritorio
Fecha: 25/12/2024 05:54
Doce voluntarios de la Unau dieron clases de apoyo en lengua y matemáticas, brindando acompañamiento educativo a niños y adolescentes del barrio 25 de Mayo. La iniciativa se llevó a cabo en conjunto con Cáritas miércoles 25 de diciembre de 2024 | 3:00hs. El cierre de las actividades se realizó hace unos días. Con el fin de promover la alfabetización temprana y el desarrollo educativo, la Universidad Nacional del Alto Uruguay (Unau) brindó clases de apoyo escolar en San Vicente a través de un voluntariado social que surge de trabajadores y estudiantes para brindar apoyo escolar y asesoramiento a sectores vulnerables de la comunidad. Se realizó en colaboración con Cáritas y se enfocó en áreas prioritarias como lengua y matemáticas. La importancia de esta iniciativa radica en el compromiso de la universidad pública con el desarrollo educativo de la comunidad, fomentando la alfabetización desde edades tempranas y promoviendo la equidad. En diálogo con El Territorio, el secretario de Extensión, Cultura y Relaciones Institucionales, Bruno Ariel Gini, comentó que el proyecto benefició a más de 20 niños, niñas y adolescentes. Las actividades se desarrollaron en el salón comunitario de Cáritas, donde un equipo de doce voluntarios -integrado por docentes, estudiantes y trabajadores nodocentes- brindó clases de apoyo en lengua y matemáticas. A su vez, explicó que el proyecto inicialmente planteaba abarcar todas las áreas troncales como ciencias sociales y naturales, pero finalmente se priorizó lengua y matemáticas debido a las dificultades manifestadas por las familias. “Decidimos enfocarnos en las áreas que los niños más necesitaban reforzar, como lectura, escritura y operaciones matemáticas básicas”. El programa, logró que todos los participantes avanzaran de grado con un desarrollo positivo. Aunque este progreso se debe en gran medida al trabajo de los docentes en las aulas, iniciativas como esta desempeñan un papel fundamental en el fortalecimiento de la alfabetización. Asimismo, se estableció un diálogo con los maestros de las escuelas para coordinar estrategias específicas en casos puntuales de aprendizaje. “Del total de los niños y niñas que asistieron, con los cuales llevamos adelante un seguimiento, todos lograron pasar de grado con un desarrollo muy positivo. En el proceso del voluntariado pudimos comunicarnos con los maestros de sus escuelas en casos particulares (principalmente con algunos estudiantes que mostraban algunas dificultades de aprendizaje) a los fines de coordinar esfuerzos y trabajo sobre las temáticas”, agregó el secretario. Por otra parte, aunque algunos talleres como los de alimentación saludable y huertas urbanas no pudieron concretarse, quedaron proyectados para el próximo año. Asimismo, se recogieron preocupaciones relacionadas con las adicciones en niños y adolescentes, por lo que se trabajará en conjunto con la Subsecretaría de Prevención de Adicciones para organizar talleres de concientización en el barrio. El cierre del proyecto tuvo lugar hace unos días con una merienda y la entrega de obsequios para los niños participantes. En esta línea, Gini destacó la relevancia de la universidad pública en este tipo de iniciativas, afirmando: “El compromiso de los voluntarios, junto con Cáritas y las familias, hizo posible un espacio que no solo promovió el aprendizaje, sino también la integración y la contención emocional de los niños y niñas del barrio”. La universidad pública al servicio de la comunidad Cabe resaltar, que los materiales didácticos los dispuso la Unau y Cáritas dispuso el salón. “Esto es una forma de asistir y acompañar a toda la comunidad, y principalmente a los sectores más vulnerables que no tienen la posibilidad de abonar a un profesor particular. La universidad cuenta con recursos humanos capacitados para hacerlo, y también esto se trata de asumir el compromiso con la educación en su conjunto. Nosotros aspiramos a que estos estudiantes que hoy están en primaria y secundaria después asistan a la universidad pública”, hizo hincapié el referente de la Unau. En ese marco, agregó que una de sus metas fue trabajar en el proceso de alfabetización desde el inicio. “No es solamente una tarea que tiene la institución primaria o el colegio secundario, sino que es una tarea que la tenemos que trabajar entre todos desde diferentes lugares. Y si nosotros podemos -desde este espacio de voluntariado y de complemento- sumar herramientas para trabajar la alfabetización en todas sus variables, bienvenido sea”, puntualizó en cuanto a este novedoso voluntariado social. En sintonía, señaló que esta iniciativa busca dejar de responsabilizar al nivel primario o secundario y fortalecer el sistema educativo. Más allá de las dificultades que puedan aparecer en los niveles previos a la educación superior, es importante que todos los sectores de la sociedad se involucren como una muestra de compromiso con la alfabetización y con el desarrollo de los niños y adolescentes.
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