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Buenos Aires » Infobae
Fecha: 24/12/2024 04:32
Una de las últimas apariciones públicas de Ricky Martin, durante la 13ª gala anual del Museo de Arte del Condado de Los Ángeles el 2 de noviembre de 2024 (REUTERS/Mario Anzuoni) A lo largo de las últimas tres décadas, Ricky Martin se convirtió en una de las figuras más sobresalientes de la música pop y en un verdadero ícono en la lucha por los derechos de la comunidad LGBTQ+. Aunque antes debió atravesar años de presiones y disgustos en los medios para que revelara sus gustos en términos de sexualidad: mientras mayor era penetración cultural en el mundo, la incertidumbre sobre sus preferencias crecían al compás. El puertorriqueño, nacido el 24 de diciembre de 1971, fue testigo y protagonista tanto de la evolución de la industria musical como de la transformación social en relación con la visibilidad y los derechos de las personas queer, aquellos que rechazan todo tipo de clasificaciones hegemónicas del sistema binario de géneros. Sus comienzos en la música tuvieron resquemores. La banda puertorriqueña Menudo, de la que Ricky formó parte, fue “fabricada” para el éxito. El equipo directivo del grupo imponía reglas estrictas a los miembros, como límites de edad: por ejemplo, debían tener entre 12 y 15 años. Esta regla en particular significaba que la lista estaba en un estado de flujo, y a lo largo de los años por la banda pasaron casi 40 artistas diferentes. Ricky Martin integró Menudo desde 1984 hasta 1989, un período en el que la banda no sólo alcanzó fama internacional, sino que también estuvo marcada por esas estrictas reglas impuestas por su equipo directivo y por las dinámicas abusivas que, según los testimonios de algunos ex miembros, formaban parte de la “fórmula del éxito”. El grupo, conocido por su alineación cambiante debido a la regla de “edad límite”, era, a pesar de su éxito, un entorno tóxico en muchos sentidos. Entre bastidores ocurrían “cosas horribles” relacionadas con la joven formación. Estos impactantes detalles salieron a la luz en la docuserie de 2022 de HBO Menudo: Forever Young. El ex mánager Edgardo Díaz fue presuntamente el culpable de gran parte de los abusos que sufrieron los chicos, exigiendo a sus padres que firmaran su patria potestad. Díaz desmintió las acusaciones. En la serie, el ex miembro del grupo Ángelo García explicó que fue agredido sexualmente por alguien relacionado con el equipo de Menudo. Los ex integrantes Andy Blázquez y Jonathan Montenegro recordaron detalles igualmente perturbadores sobre la agresión de personas de la producción de la banda. El caso de Ricky Martin es particularmente complejo dentro de este contexto. Aunque el cantante fue uno de los miembros más exitosos y reconocidos de Menudo, no participó en la docuserie ni comentó públicamente sobre las acusaciones vertidas por sus ex compañeros. Esto dio pie a diversas especulaciones sobre su experiencia en el grupo y su posición respecto a los presuntos abusos. A lo largo de su carrera, mantuvo una imagen pública limpia y centró sus esfuerzos en temas como la defensa de los derechos humanos, la familia y la salud mental, sin hacer referencia directa a los eventos ocurridos durante su tiempo en Menudo. Y, aunque Ricky nunca habló explícitamente sobre los detalles, la banda tuvo una gran influencia en su carrera posterior. Tras dejar el grupo, se lanzó como solista y se consolidó rápidamente como un ícono de la música latina con éxitos como Livin’ la Vida Loca y She Bangs. Sin embargo, su paso por Menudo sigue siendo una parte crucial de su historia y el impacto que tuvo en su vida, tanto profesional como personal, es algo que fue objeto de especulación. A pesar de no haber confirmado si vivió abusos directos, los relatos de sus ex compañeros arrojaron luz sobre las difíciles condiciones que enfrentaron algunos durante su paso por la banda. Algunos interpretan como una forma de protección hacia su familia y su propia imagen el hecho de que Ricky haya elegido no involucrarse en los supuestos abusos relacionados con Menudo. Su ausencia de Ricky Martin en la docuserie despertó sospechas. Se cree que su silencio al respecto podría estar relacionado con el deseo de evitar revivir traumas pasados, mientras que otros piensan que podría ser una decisión estratégica para mantener una imagen pública intacta. A la par, subrayó que su experiencia en la banda joven fue una mezcla de “buenos y malos momentos”, sin entrar en detalles sobre los aspectos negativos. Sin embargo, en los últimos años, usó su plataforma para hablar sobre temas de abuso infantil y defensa de los derechos de la comunidad LGTB+, lo que podría interpretarse como una forma indirecta de solidarizarse con sus ex compañeros de Menudo. Menudo: Siempre jóvenes - Teaser - HBO Max La presión pública para salir del closet El camino de Ricky Martin hacia la autoaceptación no fue fácil. El puertorriqueño habló sobre la industria del entretenimiento como artista gay del pop latino en sus memorias y en numerosas entrevistas. Entró en detalles sobre la exploración de su sexualidad, calificándola de “complicada”, diciendo que “cuando salía con mujeres, estaba enamorado de ellas. Y amo a las mujeres”. Reveló que era presionado por quienes lo rodeaban para develar más de lo que estaba cómodo: “Odiaba que la gente intentara forzarme a salir cuando no estaba preparado. Era muy doloroso y realmente me empujaba a no hacerlo”. A su vez, también explicó que temía la reacción del público ante el anuncio de su orientación sexual. Ricky Martin fue uno de los primeros artistas latinos de la talla de una superestrella en hacer pública su orientación sexual. Sin embargo, no fue una decisión fácil. Durante años, el cantante vivió con la presión constante de los medios y de los fanáticos que especulaban sobre su sexualidad; se sentía atrapado entre su propia identidad y el miedo a perder su carrera. Fue muy reservado sobre su vida privada y las preguntas sobre su sexualidad se convirtieron en una constante en cada uno de sus pasos. En varias ocasiones, el cantante llegó a decir que, aunque sentía atracción por las mujeres, había algo más profundo en su ser que no podía ignorar. En su libro de memorias Me (2010), compartió que, durante años, estuvo confundido sobre su sexualidad. No obstante, también mencionó que a lo largo de su carrera no sólo se sentía presionado por los medios, sino que también se enfrentaba a una industria donde la imagen de “héroe heterosexual” era esencial para el éxito, especialmente como un ícono de la música latina, Martin sabía que el mercado al que se dirigía no estaba preparado para aceptar a un artista gay, y eso lo hizo temeroso de las repercusiones. Ricky Martin fue uno de los primeros artistas latinos de la talla de una superestrella en hacer pública su orientación sexual. Sin embargo, no fue una decisión fácil (REUTERS/Mario Anzuoni) A pesar de la presión de su entorno, Ricky anunció su sexualidad en sus propios términos, el 17 de marzo de 2010, a través de un mensaje personal publicado en su sitio web: “Estoy orgulloso de decir que soy un hombre homosexual afortunado. Estoy bendecido por ser quien soy”. Este fue un momento decisivo no sólo en su vida personal, sino también en la historia del entretenimiento latino. El intérprete de La mordidita rompió con los tabúes en un momento en que la industria aún estaba lidiando con la representación de figuras gay en la música pop, especialmente en el ámbito latinoamericano. La confesión de Ricky fue considerado un acto de valentía y, sobre todo, una forma de liberarse de las cadenas de una vida pública controlada por expectativas ajenas. El mensaje fue cálido, honesto y empoderado. Martin expresó que no era un “hecho heroico”, sino simplemente una liberación personal que le permitió finalmente vivir su vida de manera auténtica. La noticia fue recibida de manera diversa. Muchos admiradores lo elogiaron por su valor, y otros, especialmente en la comunidad LGTB+, vieron en su gesto un paso importante hacia la visibilidad y aceptación de artistas homosexuales en el típico mundo de “macho latino”. Sin embargo, también enfrentó críticas de sectores más conservadores que no podían aceptar la orientación sexual de un mega astro como él. El cantante comentó posteriormente que el temor a la reacción pública fue uno de los mayores obstáculos para salir del clóset. “No estaba listo para enfrentar los comentarios negativos, las críticas o la pérdida de seguidores”, reconoció. Sin embargo, con el tiempo, se dio cuenta de que, al final, lo más importante era ser fiel a sí mismo. Tras su anuncio, Ricky Martin se convirtió en un fuerte defensor de los derechos LGTB+ y comenzó a ser una figura de referencia para aquellos que, como él, se sentían atrapados entre las expectativas de la sociedad y su verdadera identidad. Desde ese momento, Martin se volcó en su activismo y en su apoyo a la causa de la diversidad de género y de los derechos humanos. En 2010, poco después de anunciar su homosexualidad, fundó la Fundación Ricky Martin, cuya misión es combatir la trata de personas y defender los derechos de los niños y adolescentes en situación de vulnerabilidad. “No estaba listo para enfrentar los comentarios negativos, las críticas o la pérdida de seguidores”, admitió el cantante para explicar por qué demoró en confesar su homosexualidad (REUTERS/Danny Moloshok) Su lucha contra los prejuicios En el año 2000, la periodista y presentadora estadounidense Barbara Walters lo presionó para que contara la verdad sobre su sexualidad antes de que estuviera preparado. El cantante habló de lo traumatizante que fue la entrevista, pero ya en ese momento era evidente que se sentía incómodo con las preguntas. Ricky dudó en responder luego de que la conductora afirmara que Martin podía “terminar con los rumores” sobre su sexualidad. “Podría decir, como muchos artistas, ‘sí, soy gay’, o podría decir ‘no, no lo soy’”, dijo en vivo. Y luego admitió que no estaba en condiciones de responder. Ricky dijo que, décadas después, la conversación le sigue pareciendo incómoda. “Incluso me sentí un poco violentado porque yo no estaba listo para salir del closet”, confesó, y agregó que, si se le diera la oportunidad de rehacer ese momento, habría contado toda su verdad en esa entrevista, ya que se sintió muy bien cuando finalmente lo hizo. Walters se retractó diciendo que desearía poder retirar la pregunta, reconociendo que estuvo fuera de lugar. Desde que habló abiertamente de su sexualidad, Ricky Martin mostró su amor por su esposo, Jwan Yosef con quien estuvo casado durante siete años. En junio del 2021, posaron juntos en la portada de la revista CAP 74024, que el cantante compartió en su Instagram. Pero lo que sería un momento inolvidable para la pareja no fue bien recibido por los lectores que dejaron mensajes homófobos. El odio llegó a tal punto tuvo que emitir un comunicado dirigiéndose a los trolls de las redes sociales: “Hace una semana, subí unas fotos con mi esposo para una edición especial de la revista Cap 74024. Fue una experiencia maravillosa para que ambos celebráramos nuestro orgullo. Lo que no esperaba, sobre todo luego de todo el trabajo realizado por tantos años, es que muchas personas dejaran de seguirnos o comentaran de manera despectiva”. El músico continuó diciendo que empatizaba con aquellos que se sienten perdidos como consecuencia del maltrato y los prejuicios. Ricky Martin, Jwan Yosef y los cuatro hijos del cantante puertorriqueño. La pareja estuvo siete años casados y se divorciaron en julio de 2023 (Instagram@ricky_martin) La familia y la paternidad Desde que contó su verdad, Ricky Martin continuó hablando abiertamente sobre su vida personal, especialmente sobre su rol como padre. En 2008, poco antes de su anuncio público, el cantante se convirtió en padre de dos gemelos, Matteo y Valentino, a través de gestación subrogada. La llegada de sus hijos le dio una nueva perspectiva sobre la vida. En 2018, Ricky se casó con Jwan Yosef, un artista sirio-sueco, y juntos tuvieron dos hijos más, Renn y Lucía, antes de separarse en julio de 2023. A través de sus redes sociales, compartió momentos tiernos con su familia, convirtiéndose en un modelo a seguir para muchas personas que buscan visibilidad para sus propias familias no convencionales. Ricky mencionó en varias ocasiones que su proceso de autoaceptación no fue solo un viaje físico o de aceptación pública, sino también espiritual. En entrevistas, habló sobre su conexión con su fe, su amor por la meditación y la importancia de cuidar su bienestar emocional. Este crecimiento personal fue crucial para finalmente aceptar su identidad y vivir su vida de manera plena, que hoy a los 53 años se lo puede ver disfrutando sin prejuicios, como siempre deseó.
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