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» Diario Cordoba
Fecha: 21/12/2024 17:37
En un templo de la magnitud del Carlos Tartiere. Con una convocatoria bajo mínimos e incluso una lesión temprana y alguna de última hora. Aguantando el empuje de uno de los grandes aspirantes al ascenso, al igual que luchando contra los fantasmas lejos de casa -que hicieron el amago de aparecer-. Con todo ello, el Córdoba CF logró dar la campanada en su última cita del año ante el Real Oviedo (2-3), al que acabó sacando los colores a base de ritmo y coraje. Cierran así un 2024 de libro los de Iván Ania, con su maleficio como visitantes zanjado, fuera del descenso y la moral renovada para una segunda vuelta que se antoja ilusionante. «Ya hemos roto la dinámica como visitante. Esto nos va a liberar un poco. Este partido nos tiene que demostrar que no debemos tener miedo a nadie», manifestó el entrenador blanquiverde. Ambición por las nubes Fue en la primera ocasión en la que se medía con el equipo de su tierra, al que defendió durante nueve cursos -en la primera plantilla- como futbolista, donde el preparador ovetense encontró el escenario perfecto para lograr los primeros tres puntos de la temporada lejos de El Arcángel. «La clave era quitarles el balón. En la primera mitad se lo quitamos totalmente. Cuando nos pusimos 2-0 tuve la sensación de que nos costó más tenerlo, ahí les dimos más vida. Con el gol se meten en el partido de lleno. El tercero nos da tranquilidad para llegar al descanso», indicó. Clave para Ania, del mismo modo, fue la pegada, decisiva para encarrilar la cita en la primera mitad. Así como para resistir con cierto colchón en la segunda… «En la segunda parte teníamos que manejar el partido, darles vueltas, intentar desgastarlos. Tuvimos situaciones para hacer un gol más. Ellos nos apretaron. Tampoco tuvimos un sufrimiento excesivo, manejamos muy bien los últimos minutos, fuimos capaces de tener el balón sin arriesgar y sin tener apenas pérdidas», reflexionó. Iván Ania da instrucciones a sus futbolistas durante el choque en el Carlos Tartiere. / LOF Como saldo, la formación cordobesista se marcha de parón navideño con los deberes hechos: fuera del descenso, sumando 27 puntos -más de la mitad de los famosos 50 que, comúnmente, suponen la salvación- y con los ánimos por las nubes. «Balance muy positivo. Muy fuertes en casa como locales, sin miedo a nada. Como visitantes creo que tenemos menos puntos de los que merecemos. Haciendo el global, 27 puntos terminando la primera vuelta es una buena puntuación, tenemos la mitad del trabajo hecho. Ahora falta apretar más en la segunda, mejorar como visitantes, continuar con la dinámica como locales y poder salvar al equipo», demandó ambicioso. Frente a su Oviedo No escatimó tampoco en elogios el asturiano en su regreso a casa, confesándose como «oviedista» y, asimismo, sin cerrar del todo la puerta a un posible futuro como técnico en el Tartiere. Cabe recordar que el ex del Algeciras cuenta con contrato hasta final de curso: «La vuelta es una sensación extraña. Siempre que estuve en el Tartiere fue como local. Tenía ganas de vivirla. Los dos últimos partidos estuve en el banquillo un poco más tranquilo, porque no quería que me expulsaran. Me hubiese dolido mucho venir y estar en la grada. Para mí era muy importante este partido. Evidentemente, sabéis que es mi equipo, que es mi casa», confesó el blanquiverde. «Aunque venga como mi visitante, mi corazón siempre está del mismo lado. Tengo que hacer mi trabajo. Estoy contento, con una sensación muy buena», apuntó más tarde. Ania conversa con Carlos Isaac en un lance del encuentro. / LOF Los nombres propios También tuvo un arsenal de piezas destacadas el pleito en territorio carbayón. El primero fue el encargado de abrir la cuenta: Nikolay Obolskii. Sumaba su segunda titularidad de la temporada el ruso y no decepcionó, con un gol a los cinco minutos. Seguidamente, otro como Martínez, goleador y lesionado, rondó el sobresaliente durante su estancia en la cancha. «Para eso está. No solo podemos tener once jugadores, tienen que estar todos preparados para el día que tengan la oportunidad, aprovecharla. Hizo muy buen partido, lo que aguantó el físico», analizó respecto al punta ruso. «Yo creo que el isquiotibial, algo muscular», avanzó en lo relativo al central onubense, que deberá someterse a pruebas.
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