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» Diario Cordoba
Fecha: 30/11/2024 18:19
Imagen de archivo de varias personas trabajando en una zona afectada por la DANA. / Rober Solsona - Europa Press "La Lorca de hoy no es la Lorca de antes del terremoto, sino una ciudad moderna, cosmopolita, con grandes infraestructuras levantadas tras el seísmo, como el Auditorio Margarita Lozano y Palacio de Ferias y Congresos de Ifelor, el Coso de Sutullena y las rondas de evacuación central y norte. Y la rehabilitación de todos los monumentos a los que se han incorporado los hallazgos producidos durante su recuperación. Lorca es una ciudad de ferias y congresos, de festivales, de acontecimientos deportivos, culturales, gastronómicos… que ha recuperado la capitalidad subrregional y el peso específico que tenía como cabecera de comarca del Valle del Guadalentín, del Almanzora y de Los Vélez". Copio un párrafo de un artículo publicado en La Opinión de Murcia, diario de Prensa Ibérica, el 9 de noviembre. Rememora, 13 años después, el terremoto que sufrió Lorca el 11 de mayo de 2011 y cuyas cicatrices se mantendrán siempre. El alcalde lorqueño, Fulgencio Gil Jódar (PP), detalló que hay aún 156 familias a la espera de indemnizaciones por parte del Estado para hacer frente a los destrozos sufridos por sus viviendas. ¿Cómo estarán dentro de 10 años Alaquàs, Albal, Aldaia, Alfafar, Algemesí, Benetússer, Beniparrell, Catarroja, Chiva, Llocnou de la Corona, Massanassa, Paiporta, Picanya, Sedaví, Utiel y la pedanía de La Torre, en Valencia? ¿Cómo se habrán reconstruido? ¿Cómo vivirán sus ciudadanos? ¿Cómo se habrán desarrollado las infraestructuras necesarias para evitar lo que debe ser irrepetible? Estas 16 poblaciones han sido declaradas zonas cero, las más destruidas por efecto de la DANA, producida hace ya un mes, y cuyas repercusiones totales aún desconocemos. Junto a estos municipios, otra veintena se consideran muy afectados y otros tantos afectados. Como sociedad, no podemos olvidarnos de ellos ni de sus ciudadanos. Es lo que puede ocurrir a medida que el paso del tiempo vaya disminuyendo la información sobre la reconstrucción, que quedará limitada al seguimiento por parte de los medios de comunicación locales. Otros artículos de Martí Saballs Pons Es tan mal indicio que el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, haya tardado casi un mes en comparecer ante el Congreso para hablar de la DANA como que no haya existido un mínimo de autocrítica sobre el papel del Ejecutivo. Las acusaciones mutuas y continuadas entre Moncloa y Generalitat de la Comunidad Valenciana, entre PSOE y PP, han enseñado lo peor de la politiquería española. En un ejercicio de cinismo, Sánchez ofrecía al líder popular, Alberto Núñez Feijóo, los votos del PSOE para echar a Carlos Mazón. No es el camino. Mazón se irá cuando decidan él o su partido que su presidencia toca a su fin o porque los ciudadanos democráticamente dejen de votarlo. Al igual que un día, y a Sánchez no paran de crecerle los problemas e interrogantes en su entorno, también decidirá abandonar el cargo. Con la DANA, la política española, salvo excepciones, ha tocado suelo, restregándose al mismo nivel del fango que aún pervive e imposibilita la normalidad en las zonas afectadas. La comparecencia del escritor valenciano, Santiago Posteguillo, ante el Senado para contar su experiencia en primera persona de lo que pasó aquellos días, resume la película de terror. Sus palabras: la larga espera , un día tras otro, a que llegara alguien a ayudar en medio de la oscuridad, el lodo, el miedo. La reconstrucción tras la DANA debería servir también para regenerar el sistema burocrático que lo retrasa todo. Una burocracia que es el mal de la administración pública y de empresas privadas, empezando por las compañías aseguradoras. Dudo mucho que el flamante nuevo vicepresidente de la Generalitat valenciana, Francisco José Gan Pampols, pueda hacer algo al respecto. Y, sin embargo, todo se va moviendo, pese a la lentitud y el drama que supone para muchas personas y empresas haberse quedado sin nada. "Los urbanistas abogan por el modelo Ikea para los aparcamientos", "Una tubería de 5.000 metros pondrá fin a los vertidos de fecales en El Poyo" en medio de los trabajos de saneamiento urgentes que deben realizarse, "Instalación del puente militar de la CV-50 en Cheste", "La nueva normalidad en Paiporta, niños entre torres de coches", "Metrovalencia reabrirá el 6 de diciembre" son algunas de las informaciones recientes que ha dado Levante, el diario de Prensa Ibérica referente en la provincia de Valencia. ¿Qué contará el diario Levante dentro de 10 años al referirse a las consecuencias de la DANA? ¿Cómo será la vida en la zona cero en 2034? ¿Qué aprendimos del ejemplo de Lorca? ¿Estarán al nivel finalmente las instituciones políticas? Tal como anticipamos, ‘activos’ sigue y seguirá pendiente de todo lo que acontezca económicamente alrededor de la reconstrucción de las zonas afectadas.
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