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Federal » El Federaense
Fecha: 29/11/2024 07:59
El largo camino hacia la justicia por la desaparición de María Cash ha tomado un giro inesperado y revelador. Tras más de una década de incertidumbre, la investigación liderada por el Cuerpo de Investigación Fiscal, bajo la dirección de Eduardo Villalba, ha comenzado a tomar un rumbo claro. El camionero Héctor Romero, conocido por ser la última persona en ver a la diseñadora, está siendo investigado seriamente por su posible implicación en un homicidio calificado. El caso María Cash: Una búsqueda incansable Desde el 8 de julio de 2011, el paradero de María Cash ha sido un misterio. Cada año, familiares y amigos se unen en la búsqueda de respuestas, mientras las autoridades revisan evidencias y testimonios. Este año, en el aniversario de su desaparición, las autoridades decidieron poner en marcha medidas más drásticas al interceptar las comunicaciones de Romero y sus cercanos, resultando en un descubrimiento revelador. Conversaciones que delatan Las interceptaciones han revelado conversaciones entre Héctor Romero y su hermano David que suscitan serias dudas sobre la versión del camionero. Durante estas charlas, Romero parece más preocupado por los efectos de las recientes citaciones a testigos que por la situación de María Cash. David: ¿Qué haces? Héctor : Estoy yendo hasta Gasnor, ¿por qué? : Estoy yendo hasta Gasnor, ¿por qué? David: En el diario de ayer dice que ha salido con la foto tuya y todo. Héctor: ¿Qué raro que ha salido la foto mía, pero no puede salir la foto, ¿qué no? Esta conversación es solo una muestra de las numerosas contradicciones que rodean las declaraciones de Romero. Se evidencia que su hermano no estaba al tanto de las declaraciones inconsistentes que Héctor había proporcionado a las autoridades a lo largo de los años. En un momento crucial, David le aconseja que declare lo mismo que ha dicho anteriormente, lo que pone de manifiesto una posible coordinación en sus relatos. La ruptura del silencio familiar El cambio en la situación de Romero se acentuó cuando su hermano se presentó como testigo y su declaración fue interpretada como una separación del silencio familiar que había prevalecido. La frase “Si se mandó una cagada, que se haga cargo” lanzada por David ante la jueza Mariela Giménez sugirió que ahora algunos miembros de la familia estaban dispuestos a colaborar con la justicia, lo que generó un fuerte impacto en la investigación. Próximos pasos en el caso Con la creciente evidencia y los recientes testimonios, la jueza Giménez podría ordenar un rastrillaje en busca del cuerpo de María Cash. Se espera que con cada nuevo descubrimiento, la verdad sobre su trágica desaparición salga finalmente a la luz. Después de años de arduo trabajo, la esperanza es que, al menos, se alcance justicia para María Cash y su familia.
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