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Concepcion del Uruguay » La Calle
Fecha: 27/11/2024 22:30
El gobierno de Javier Milei anunció este miércoles 27 la puesta en marcha de un plan para «modernizar» el Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA), que implica la venta de edificios, tierras y el despido de 227 empleados. «El Gobierno puso en marcha un plan para modernizar el INTA, que es un organismo fundamental para el desarrollo del campo argentino, cuyos objetivos fueron desvirtuados por la gestión anterior», apuntó el vocero presidencial Manuel Adorni. En su habitual conferencia de prensa en la Casa Rosada, el funcionario nacional disparó: «Desde 2007 el INTA se enfocó en temas que nada tenían que ver con lo agrícola, como las cuestiones de género, los falsos mapuches y la agricultura familiar». Al brindar detalles sobre el plan, Adorni indicó que «se van a dar de baja los 227 ingresos que se hicieron el año pasado, que deberían haberse suspendido en enero, y se va a poner a disposición el predio del ente estatal en Cerrillos, provincia de Salta». “El Consejo Directivo del INTA va a votar este jueves 28 este plan. Ojalá que los directivos del INTA opten por aprobar estas medidas que le van a brindar más recursos al organismo público para mejorar su equipamiento, modernizarlo y potenciar sus investigaciones», deseó el funcionario público. En esa línea, Adorni dijo confiar en que las autoridades del Instituto estén «a favor de tener un INTA que funcione para los fines que efectivamente fue pensado y no para lo que se lo ha utilizado últimamente». «El 50% de sus 6.852 empleados actuales ingresó durante los gobiernos de Cristina Fernández, entre 2007 y 2015. De los 250 millones de dólares al año que recibe el INTA, el 90% se usa para pagar sueldos. Hoy la participación privada en las investigaciones del INTA es inferior al 10% y el objetivo es que esta cifra aumente al 30% para el año 2027», subrayó el portavoz. En cuanto al plan de modernización que buscarán llevar adelante, Adorni detalló: «Incluye la venta de edificios y tierras subutilizadas como el inmueble ubicado en Avenida Cerviño y Ortiz de Campo en Palermo. Este edificio está valuado en 6 millones de dólares como precio base. Cuenta con más de 3.100 metros cuadrados de superficie cubierta para apenas 140 empleados». Y agregó: «Además del mal gasto de recursos que implica, la propiedad presenta graves irregularidades como la construcción de una estructura por fuera de la disposición original del edificio». La Agencia de Administración de Bienes del Estado (AABE), tal como dispone el decreto número 950, del 24 de octubre de 2024, impulsó su enajenación, ya que se encuentra dentro de los bienes declarados “innecesarios” o “sin destino”, así como aquellos desafectados de sus jurisdicciones de origen. La subasta de este emblemático inmueble de avenida Cerviño 3101/67 se dispuso a través del decreto 70/2024 publicado el 22 de noviembre en el Boletín Oficial y firmado por Nicolás Alberto Pakgojz, presidente de la Agencia de Administración de Bienes del Estado (AABE). En detalle, cuenta con una superficie cubierta total de 3.143,53 metros cuadrados sobre un terreno de 919,10 metros cuadrados. Allí funciona la Fundación ArgenINTA, Innovaciones Tecnológicas Agropecuarias (Intea), el Centro de Investigación de Economía y Prospectiva (CIEP), las Direcciones de Vinculación Tecnológica y de Relaciones Internacionales, y trabajan unas 140 personas. El valor base de la subasta es de USD6.378.968 y el monto de garantía de cumplimiento de las obligaciones emergentes del pliego es de USD95.684. La subasta pública tendrá lugar el 23 de diciembre a las 12:00. El vocero presidencial destacó que «lo recaudado por la venta de este edificio quedará en manos del propio INTA y será destinado a financiar lo que debe financiar el INTA que son investigaciones». «De las 116.000 hectáreas que tiene el INTA entre todos sus predios y propiedades solo 45.000 de ellas se usan para experimentación con fines comerciales y productivos», señaló Adorni. La «modernización» que impulsa el Gobierno nacional provocó el pasado 15 de octubre la renuncia del expresidente del INTA, el ingeniero agrónomo Juan Cruz Molina Hafford (ejercía desde diciembre de 2023), por discrepancias en cuanto al modo de hacerlo y también, en algunos temas, en cuanto a los ajustes puntuales. Molina pedía que se respete el modelo de gobernanza del organismo, cuyo Consejo Directivo Nacional (CDN), el que toma las decisiones, está conformado por diez personas: cuatro de las entidades gremiales del campo, una de Aacrea, dos de las universidades de Agronomía y Veterinaria y tres directivos del INTA, su presidente, su vicepresidente y un vocal. Fuente: Clarín.
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