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» Sin Mordaza
Fecha: 26/11/2024 16:26
Comenzó la cuenta regresiva del tratamiento sobre tablas de la reforma de la Constitución de la Provincia de Santa Fe. El jueves se debatiría en el Senado y sería aprobado sin sorpresas aunque la incertidumbre del oficialismo de Unidos estaría en Diputados ya que, hasta el momento, no alcanzarían los dos tercios necesarios para sancionar la habilitación para modificar la Carta Magna. El comunicado del Partido Justicialista de este lunes, en donde fijaron posición al calificar la iniciativa de "apresurada e inoportuna" podría ser una señal. La clave está en quiénes firmaron el documento: entre los que suscribieron se encuentran legisladores y dirigentes del sector del perottismo: Celia Arena, Marcos Corach, Walter Agosto y Juan Manuel Pusineri. Si bien el ex gobernador Omar Perotti no fue a la asamblea ni firmó el escrito, su sector dio el visto bueno a la posición del peronismo ante la reforma. En este plano, al oficialismo no le estaría dando los números para sancionar la reforma en la Cámara Baja. Si bien cuenta con los 28 votos de su frente, y votos de aliados como el diputado Juan José Piedrabuena o algún posible integrante de los bloques celestes, si el peronismo en general o el perottismo en particular no acompaña la reforma podría complicarse la obtención de una mayoría especial. Tensión en Unidos El oficialismo también se reunió en Rosario para emitir un comunicado de ratificación de la reforma de la Carta Magna provincial. "No es solo una necesidad, sino también una deuda con el futuro", resaltaron en un documento partidario. Atentos a lo que sucedió en el PJ en la ciudad de Santa Fe, el encuentro que se llevó a cabo en la sede del PRO habría sido muy tenso entre los dirigentes de Unidos para Cambiar Santa Fe. Se comenta que el propio ministro de Gobierno, Fabián Bastía, habría estado al borde de los gritos afirmando que es ahora el momento de la reforma, en sentido de no postergarla para más adelante. En contraste, la presidenta de Diputados, Clara García, habría dicho que no conviene exponerlo a Pullaro, quizás dando a entender que el socialismo no querría avanzar en el tratamiento del proyecto. Otra diferencia que se habría resaltado en la reunión del oficialismo es la posición de Pablo Javkin, presente en la asamblea. En la reunión, los dirigentes del oficialismo ya tenían en mano el comunicado del Partido Justicialista que, entre otras cosas, les achacaban una "avanzada autoritaria" al Ejecutivo. Ante esta situación, se habría barajado la idea de un encuentro institucional con el PJ para intentar destrabar los votos de cara a la reforma. En este marco, la sorpresa de muchos habría sido que el intendente rosarino habría puesto un condicionante: no negociar con ningún sector relacionado al senador Armando Traferri. El tema es que el actual presidente del justicialismo es Guillermo Cornaglia, un aliado del senador por el departamento San Lorenzo.
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