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Concordia » Hora Digital
Fecha: 22/11/2024 10:51
El excongresista del partido Republicano, Matt Gaetz, anunció este jueves que retiraba su candidatura a fiscal general de Estados Unidos, tras enfrentar acusaciones de explotación infantil y consumo de drogas, entre otros delitos, culminando así una de las postulaciones más controversiales en la transición de gobierno del presidente electo Donald Trump. Gaetz, propuesto por Trump para el cargo, comunicó a través de la red social X que su confirmación se estaba convirtiendo en una distracción injusta para el trabajo crítico de la transición Trump/Vance, refiriéndose al proceso en curso antes de la asunción presidencial del 20 de enero de 2025 junto a J. D. Vance, el futuro vicepresidente. La decisión del congresista conservador de retirarse de la candidatura a uno de los cargos más estratégicos de Washington se dio en medio de fuertes cuestionamientos debido a escándalos, incluyendo acusaciones de abuso infantil y consumo de drogas ilegales. Nuevas alegaciones revelaron que Gaetz habría abusado sexualmente de un adolescente por segunda vez, oscureciendo su carrera política y disminuyendo su respaldo dentro de su propio partido. La nominación de Matt Gaetz, de 42 años, para el cargo de fiscal general fue desde el principio polémica. Enfrentando investigaciones federales por acusaciones de tráfico de menores, se vio envuelto en disputas políticas. Esta situación lo habría colocado en una incómoda posición al ser propuesto para liderar el Departamento de Justicia, siendo investigado por el mismo departamento que dirigiría. Trump, aunque intentó respaldar a Gaetz, no pudo frenar el rechazo creciente en el Congreso, especialmente por parte de senadores republicanos necesarios para aprobar su nominación. La falta de preparación técnica y los escándalos personales lo convirtieron en una de las nominaciones más controversiales del partido Republicano, siendo rechazada incluso por algunos colegas de partido. Gaetz prefirió retirarse para evitar un proceso humillante de audiencias de confirmación en el Congreso estadounidense, publicando en X su decisión de no ser considerado para el cargo de fiscal general y eludiendo así las duras preguntas del Senado que podrían haber dañado aún más su carrera política. La retirada de Gaetz, aunque puede ser vista como un triunfo por sus detractores, representa un revés para Trump, quien no ha logrado obtener la aceptación completa de su partido en sus nominaciones clave. El nombramiento de Gaetz se suma a otras propuestas polémicas del presidente electo, como la de Tulsi Gabbard como jefa de los servicios de inteligencia, fuertemente criticada por sus simpatías públicas por regímenes extranjeros como Rusia, Siria, Irán y China, entre otras controvertidas nominaciones.
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