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» Elterritorio
Fecha: 17/11/2024 17:55
Con el fallecimiento del joven de 30 años ya son 8 las muertes en cárceles y comisarías de Misiones. Ante el alarmante número, la Comisión -antes denominada de Prevención de la Tortura- intervendrá de oficio para investigar el procedimiento del personal que estuvo de guardia el pasado lunes 11, cuando ocurrió el deceso de Lucas domingo 17 de noviembre de 2024 | 17:49hs. A casi una semana de que encontraran a Lucas Escalante (30) sin vida en una celda en la comisaría de Concepción de la Sierra, la conmoción y movilización de la comunidad local todavía no cesa. Este se volvió el caso número 8 de fallecidos que estaban privados de su libertad, por lo que la Comisión de Buenas Prácticas Carcelarias de la provincia intervendrá -sin requerimiento de la familia de la víctima- para conocer cómo fue el procedimiento policial y aportar claridad sobre lo ocurrido. Mediante fuentes consultadas, El Territorio pudo conocer que la Comisión entrará en contacto en los próximos días con el Juzgado de Instrucción Cuatro de Apóstoles, que lleva adelante la investigación. Por otro lado, el intendente de Concepción de la Sierra, Hugo Humeniuk, confirmó que mantuvo reuniones tanto con la jefa de la Comisaría como con el equipo de Salud Mental municipal para contener a los familiares de la víctima. Lucas fue encontrado muerto en una celda en la madrugada del lunes 11 de noviembre: hacía 9 días que estaba allí detenido. El parte oficial que se conoció en un principio indicó que el hombre sufrió una descompensación y que, momentos después, perdió la vida. En la misma línea apuntaron los resultados preliminares de la autopsia -hecha por Gendarmería Nacional-, que revelaron que sufrió una muerte natural por una “cardiopatía aparentemente congénita y sin signos de violencia”. Familia exige una segunda autopsia Sin embargo, los familiares desconfían de dichos exámenes y denuncian que la víctima fue torturada dentro de la dependencia. “El acta de defunción policial dice que tuvo muerte natural, pero mi hijo estaba golpeado. Tenía la nariz fracturada, marcas en la espalda, moretones”, describió con pesar José Escalante (70), padre de Lucas. Desde el entorno cercano del muchacho, apuntaron contra un policía del pueblo, Junior, que, según describieron, es conocido por violentar a los detenidos. José reconoció que tenían una relación conflictiva de larga data y lo acusó de estar involucrado en la muerte de su hijo: “Fue una venganza de él y de otro policía, contra mi hijo”. El hombre ya había denunciado las presuntas situaciones de violencia en sus redes sociales. Respecto al estado y al trato que recibió Lucas mientras estuvo detenido -ingresó a la comisaría el 3 de noviembre, y no el 25 de octubre- el papá relató que el chico estaba incomunicado. “No podíamos visitarlo, siempre nos daban excusas: que no era hora de visitas y otras cosas. Yo pedía hablar con mi hijo y no me dejaban”, criticó. Siguiendo información que testigos aportaron a la familia, la celda donde permanecía -junto a otras personas- era reducida y estaba en condiciones insalubres. Sobre los tratos, José describió que a Lucas “le llevaban comida y se la tiraban como a un perro”. Hasta el momento la familia no cuenta con abogado querellante para anteponer formalmente algún recurso legal, y este medio pudo saber que hay una reunión programada en el Juzgado de Apóstoles para este martes por la mañana. Se espera que en las próximas horas los padres tomen contacto con la fiscalía que deberá llevar adelante las acusaciones. En tanto, Escalante indicó que “de parte de la Comisaría no nos confirmaron un sumario policial” sobre la actuación de los guardias en la madrugada del 11 de noviembre. Atravesados por el dolor de la pérdida, los padres de Lucas sentenciaron que “no fue una muerte natural, mi hijo estaba muy golpeado”. Con indignación, reclaman que se pueda hacer una segunda autopsia ya que, sostienen, “lo quebraron” dentro de la comisaría. El último jueves, amigos y conocidos del joven Escalante se movilizaron hasta el domicilio de uno de los efectivos que acusan estaría implicado en lo ocurrido y luego se dirigieron a la comisaría, exigiendo respuestas de parte de las autoridades. Ese mismo día la familia pudo ver el cuerpo de la víctima, momento en que identificaron lesiones en diferentes partes del cuerpo.
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