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» Diariopinion
Fecha: 15/11/2024 00:10
El escándalo se desató mientras la diputada radical de la UCR, Agostina Villaggi, exponía graves denuncias sobre corrupción en el gobierno de Gildo Insfrán y la falta de avance en las obras del Puerto Nuevo de Formosa, y la interrupción a los gritos del presidente de la bancada del PJ, Agustín Samaniego, que no la dejaron expresarse libremente. La diputada radical había pedido la palabra para solicitar la reubicación del puerto nuevo, argumentando que esa obra "nació frustrada", ya que es imposibles que los barcos lleguen y que representa un "enorme negociado para el gobierno provincial y las empresas amigas del poder, que les cuesta millones al pueblo formoseño". "En aquel entonces, se destinaron 210 millones de dolares para contruir un puerto que desde sus inicios se sabía que no iba a funcionar, porque no da el calado para que los barcos amarren. Algo que los funcionarios sabían muy bien, porque en ese lugar donde se construyó el puerto que no sirve, estaba el balneario natural donde de cientos de familias iban a disfrutar del rio Paraguay", señaló Villaggi. "Esa obra, ese puerto, símbolo de la corrupción del modelo formoseño que solo sirvió para que algunos funcionarios y constratistas del Estado se enriquezcan a costilla del pueblo formoseño", expresó la legiladora radical. Sin embargo, la situación se tornó caótica cuando Agustín Samaniego, presidente del bloque del PJ, interrumpía constantemente a la diputada Agustina Villaggi, impidiendo que siguiera denunciando. La tensión alcanzó su punto máximo cuando ante los gritos de Samaniego y la firme postura de Villaggi, el presidente provisional de la Cámara, Armando Felipe Cabrera, decidió abruptamente levantar la sesión bajo el pretexto de "desorden". El gesto de Cabrera fue interpretado como una maniobra desesperada para evitar que las acusaciones de corrupción resonaran en el recinto legislativo. La bancada oficialista abandonó el recinto en medio de gritos, empujones e insultos dirigidos a los legisladores de la oposición, evidenciando un clima de intolerancia y falta de debate genuino en la Legislatura de Formosa. La denuncia de Agostina Villaggi sobre las irregularidades en la gestión del Puerto Nuevo de Formosa no es un tema menor. El proyecto, que ha sido presentado como una obra clave para el desarrollo provincial, ha estado plagado de promesas incumplidas y sospechas de desvío de fondos, algo que la diputada radical intentaba sacar a la luz en su intervención. El escandaloso episodio en la Legislatura refleja una vez más la intolerancia del oficialismo frente a las críticas y el cuestionamiento sobre la falta de transparencia en el uso de los recursos públicos. En lugar de dar respuestas concretas y permitir el debate, los representantes del PJ optaron por abandonar el recinto, dejando en evidencia su incapacidad para enfrentar las denuncias de manera democrática y transparente. Mientras tanto, la ciudadanía de Formosa sigue esperando respuestas sobre el estado de las obras inconclusas y la falta de control en el manejo de los fondos públicos, en una provincia que parece estar cada vez más lejos de los valores democráticos que deberían regir sus instituciones.
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