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» Comercio y Justicia
Fecha: 14/11/2024 12:25
El Juzgado 2º Civil y Comercial, de Conciliación y Familia de Marcos Juárez falló a favor de un abogado en una demanda de daños y perjuicios contra Banco Santander SA. El juez Edgar Amigo Aliaga determinó que la entidad financiera subastó extrajudicialmente un vehículo sin esperar el resultado de una resolución judicial previa, lo que resultó en una condena de $82 millones, incluyendo daño patrimonial, privación de uso, daño moral y daño punitivo. El conflicto surgió cuando banco llevó adelante el remate de un Peugeot 208 GT del accionante, en el marco de una ejecución prendaria. Sin embargo, antes de dicha subasta, el actor había planteado judicialmente la nulidad del secuestro prendario, recurso que fue aceptado posteriormente por la Justicia. Pese a esta resolución, la entidad financiera procedió con la venta del automóvil sin notificar ni esperar el resultado del litigio. El juez Amigo Aliaga concluyó que, al haberse declarado la nulidad del procedimiento de secuestro en un expediente conexo, el remate del vehículo se realizó de forma indebida. Por tanto, condenó al banco a restituir el valor del automóvil, tomando como referencia el precio de un modelo similar del año 2022, valuado en $13.195.000 según la publicación especializada Infoauto. Privación de uso
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