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» Misionesopina
Fecha: 14/11/2024 08:53
El Jockey Club de Posadas se encuentra bajo intervención oficial luego de una serie de irregularidades y un polémico evento en el hipódromo Manuel Belgrano, donde un. caballo murió durante una de las carreras de la Copa Challenger, realizada el pasado 6 de octubre, y funcionó un garito de apuestas clandestinas durante todo el fin de semana que duró el evento. Joaquín Cabral, quien fue designado interventor por el Ministerio de Gobierno de Misiones, dio a conocer el estado actual del club y los objetivos de la intervención. Cabral describió las condiciones que llevaron a la intervención como una combinación de falta de cohesión entre los directivos y de incumplimientos formales dentro del club, que es una de las instituciones más antiguas de Posadas. “Nos encontramos con una comisión que nunca pudo lograr consolidarse”, explicó. “Los miembros mismos no pudieron encontrar una cohesión y un rumbo fijo para poder, de alguna forma, determinar la actividad del Jockey Club”. La intervención, según relató Cabral, se decidió en el contexto de una larga serie de irregularidades en la administración del club, y no solo a partir del reciente evento de carreras de caballos. “Venían con muchas irregularidades de más tiempo hacia atrás, en los últimos tres años de vida”, afirmó Cabral. Este contexto llevó al Ministerio de Gobierno, dirigido por Marcelo Pérez, a tomar la decisión de intervenir, con el objetivo de que el club recupere su estructura formal y cumpla con sus obligaciones legales. “El Estado no quiere intervenir en la vida societaria de una persona jurídica privada. Los socios son los que tienen que llevar el rumbo de su vida societaria y cumplir el objeto que tiene el club”, afirmó Cabral. La imposición de una multa de 20 millones de pesos por el Instituto Provincial de Lotería y Casinos (IPLyC) y la evaluación de posibles cargos penales también se sumaron a las tareas que Cabral y su equipo de intervención deben abordar. “La multa se cae sobre los socios y sobre aquellos que tuvieron responsabilidad directa; solidariamente todos son responsables”, explicó. Asimismo, destacó que hubo reuniones con el IPLyC para coordinar el pago de la multa y establecer un plan de regulación de deudas. “Estamos haciendo un balance y una auditoría para sanear todo esto en este plazo corto”, señaló. Sin embargo, la intervención no implica el cierre del Jockey Club, sino un proceso de reorganización para que los socios puedan retomar el control. “La idea es poner de alguna forma blanco sobre negro, regularizar todas las áreas y que prontamente los socios vuelvan a tomar las riendas de su club”, explicó. En un plazo de 90 días, su equipo, integrado por contadores y abogados, tiene la tarea de auditar y evaluar los recursos de la entidad. La intervención estatal, recalcó, es temporal y tiene el propósito de garantizar que “el Jockey Club vuelva a ser lo que en algún momento fue, una institución de renombre de la sociedad posadeña”. Otro de los problemas destacados fue la falta de control en la gestión económica y el incumplimiento en la presentación de balances, y los mandatos vencidos. “Los balances no estaban presentados, los mandatos estaban vencidos”, indicó. “Ellos quisieron prorrogar, pero al tener los mandatos vencidos, la cuenta ya estaba bloqueada”. Refiriéndose a la posibilidad de que la intervención pueda derivar en denuncias judiciales, Cabral confirmó que existen denuncias en curso. “Hay una denuncia, también en cabeza, no solo por la muerte del animal, sino también para aquellos que fueron solidariamente responsables del hecho”, precisó. Fuente: Misiones Online
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