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» Elterritorio
Fecha: 14/11/2024 00:47
El festejo será este sábado y la directora Marisa Biechteler contó acerca de la labor de rescate de la historia de la institución con entrevistas y ampliación del archivo fotográfico que se viene realizando además, el equipo docente prepara la apertura del Museo Histórico Ambiental del Colono con objetos donados por las familias del lugar miércoles 13 de noviembre de 2024 | 17:33hs. Estudiantes y docentes de la Escuela 324 de Colonia Aurora frente a la casinha, donde el sábado se abrirá el Museo del Colono. Fotos Gentileza A 20 kilómetros del casco urbano de Colonia Aurora y a unos 10 de la ruta costera al Uruguay, en el Paraje Kilómetro 9, por un paisaje de chacras y sotos de monte se llega a la Escuela 324, institución de nivel primario que nació por impulso de las familias pioneras que se instalaron en la zona y este sábado estará celebrando 50 años de compromiso con la educación. El festejo será en el salón comunitario de Paraje Kilómetro 9, cerca de la sede escolar, con un acto protocolar donde se compartirá con los presentes la información recabada sobre la trayectoria de la escuela en su medio siglo de historia y luego habrá un almuerzo comunitario. Para esta cita se invitó a toda la comunidad educativa actual, exdocentes, exalumnos, autoridades educativas y de gobierno locales y provinciales, artistas, entre otros. “La escuela abrió sus puertas el 16 de septiembre de 1974 para dar respuesta a la necesidad concreta de educación para los hijos de las familias de colonos que se asentaron en el paraje por esa época, y que de otra manera tenían que caminar muchísimo para poder estudiar; el primer edificio incluso lo construyeron las mismas familias en el terreno que fue donado para ese objetivo y que es la sede escolar hasta hoy”, explicó en una charla telefónica con el El Territorio, la docente Marisa Biechteler, directora y maestra de grado de la Escuela 324. Y aclaró que el festejo aniversario de las bodas de oro de la primaria se hace este sábado, “porque el 16 de septiembre, que fue el día del aniversario, nos quedaba muy pegado a la celebración de la Fiesta del Tractor, que es un evento muy convocante y toda la comunidad participa, por eso lo pospusimos y sale este sábado”. Proyectos de vinculación con la comunidad Biechteler junto a dos maestros más conforman el cuerpo docente de la escuela y desarrollan varias acciones de vinculación con la comunidad. Entre estas iniciativas, la directiva es autora del proyecto “A Casinha da Maestra”, que desde 2017 motoriza el acceso a actividades pedagógicas, culturales y artísticas para los niños y las familias del poblado. En el espacio cultural “A Casinha da Maestra”, que funciona dentro del predio escolar en una típica casa de madera nativa de las que se hallan en las picadas de la tierra colorada, rodeada de árboles silvestres, también se habilitó un salón como biblioteca y un museo que lleva el nombre Museo del Colono, que revaloriza la vida, las costumbres y el trabajo en la ruralidad. El Museo del Colono se montó en la sala principal de la casinha y se exhiben en el espacio herramientas donadas por los vecinos y que se usaron en los primeros tiempos del paraje, también fotografías de la vida cotidiana en la escuela y en las casas y se irán sumando otros objetos a la colección. En este sentido, Biechteler, contó que “se trata del primer museo de Colonia Aurora, y se relanza el sábado luego de las actividades en el salón comunitario”. A partir de la siesta sabatina habrá una recorrida por la escuela, donde se podrá observar los murales pintados por el colectivo cultural Los Aromos, y también en esta visita guiada habrá una posta por la casinha con su biblioteca y el museo. La casinha con entorno de árboles nativos reforestados. La maestra dijo que la casinha ahora se convirtió en el museo, pero que el proyecto cultural continúa y se amplía con esta nueva propuesta. Esta casinha (casita) de madera originalmente fue construida como vivienda para docentes, pero nunca se ocupó para ese fin. Y como estaba en desuso y los niños la llamaban en portuñol “casinha da maestra”, Biechteler mantuvo la denominación espontánea y transformó la casita en un espacio cultural. “Habíamos pensado destinar el espacio también para que los artistas o las personas que nos vienen a visitar como voluntarios se hospeden allí en su estadía, pero después quienes nos visitaron se quedaron en mi casa. Y ahora ese espacio de la casinha es el museo”, detalló. “El museo lo empezamos a armar en 2019 y luego tuvimos que cerrar un tiempo, porque el lugar se ocupó durante la construcción del Neni, también pasó la pandemia, y lo estamos abriendo nuevamente este sábado y la idea es hacerlo oficial”, añadió. Pieza exhibida en el museo escolar. Al rescate de la historia La docente, que hace 31 años vive en el paraje y hace 29 enseña en la escuela, precisó que para este aniversario número 50 de la escuela, se trabajó meses en el rescate de la historia de la primaria, buscando imágenes de distintas épocas y entrevistando a los vecinos más antiguos. Y agradeció la buena predisposición de todos los vecinos, que abrieron las puertas de sus casas, hojearon los álbumes de fotos familiares y relataron anécdotas y memorias de los primeros tiempos en ese suelo alejado. “Cuando empezamos con esta idea de actualizar el libro histórico de la escuela, teníamos 20 fotos, no más que eso, y buscando quién tenía fotos para aportar, la gente se empezó a entusiasmar, hicimos un grupo de WhatsApp y ahí se compartían fotos de la escuela y también de la vida en la colonia, de la gente, de los trabajos en la chacra. Tenemos ahora alrededor de 300 fotos, es un trabajo que todavía no se concluyó porque hay mucho para imprimir, clasificar, hacer la reseña, pensamos que va a ser un trabajo que va a estar listo para el año que viene”, confió. Como parte de esta labor de rescate de la historia de la institución, el guión del acto del sábado prevé compartir algunos datos y hallazgos, “la idea es que sea un día festivo para todos, de encuentro, y vamos a estar compartiendo datos sobre la historia de la escuela, por ejemplo, la escuela comenzó a funcionar en septiembre de 1974 y desde esa fecha hasta los primeros meses del 75, las clases eran en la casa de una familia que prestó el lugar mientras las obras de la escuela se terminaban, y en el 75 se mudaron a la escuela definitivamente”, indicó. El museo pone en valor la vida y el trabajo en el ámbito rural. Museo histórico ambiental El proyecto del museo prevé que se lo denomine Museo Histórico Ambiental del Colono, que funciona en el espacio de la casinha, “la casinha en sí es un espacio histórico y es una construcción típica del interior de Misiones, de madera y piso elevado para permitir su ventilación y que no se acumule la humedad”, describió. Asimismo, está rodeada de árboles autóctonos. “Antes de que se instale la escuela en estos terrenos, este predio primero era monte y luego se hizo desmonte para la plantación de tabaco y otros cultivos, y después cuando se hizo la escuela se cuidaron esos brotos de árboles nativos, de frutales y con los años volvieron a crecer y la idea es poderlos preservar para el futuro, y también queremos instalar carteles con los nombres de los árboles y otros datos de cada especie”. Para la docente trabajar en la revalorización del cuidado del medio ambiente y del modo de vida en las chacras es muy importante, “estamos en una zona alejada de muchas cosas, el trabajo en las chacras es mucho y requiere mucha dedicación y conocimientos que se van transmitiendo de padres a hijos, y la escuela busca en este contexto también ampliar el horizonte de posibilidades, acercar a los chicos a otros mundos y realidades posibles, promover la continuidad de los estudios, pero al mismo tiempo es esencial poner en valor y reconocer el trabajo de cultivar la tierra, de cuidar a los animales, de producir los alimentos que se consumen en tantas mesas. Ese valor del trabajo que posibilitó el desarrollo del paraje. La historia de la escuela y de la comunidad van de la mano y caminan juntas”, concluyó la docente.
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