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» La Capital
Fecha: 14/11/2024 00:25
La segunda edición tendrá lugar los días 15 y 16 de noviembre en el CEC, donde habrá charlas, performances, y música en vivo Aye Beker es una de las artistas que se presentará en la segunda edición del festival Nación Trava, el próximo 15 y 16 de diciembre en el CEC La Nación Trava no tiene fronteras. El festival creado en 2023 por las gestoras culturales Mara Prat e Igna Campos vuelve para una segunda edición, en la que buscan seguir construyendo un lugar en la cultura que refleje las identidades y luchas por fuera de la heteronorma. El viernes 15 y sábado 16, desde las 18.30, el Centro de Expresiones Contemporáneas (Paseo de las artes y el río), alojará charlas, performances y música en vivo, entre otras actividades. El evento comenzará el viernes, con una “Mesaza para discutirlo todo”, en la que participarán Martín Paoltroni, Morena García, Ivana Szerman, Gala Curimba, Pamela Rocchi, y Paola Santi Kremer. El sábado, habrá shows del colectivo performático Fanática Viciosa, Ayelén Beker (en formato Cabaret Cuir), Mundialmente Famosas, y DJ sets de Viejo Kaos y Violeta Stelar. La Nación Trava, en su concepción que la diferencia de estado (y que desarrolla la poeta travesti Morena García en su obra), no tiene territorio delimitado, pero sí tiene una historia. Antes de su fundación en noviembre del año pasado, se fueron gestando los cimientos a lo largo de 2023 con otros dos eventos clave: el Carnaval Trava en Micelio y el festival Carrilche en el CEC. La primera edición tuvo lugar pocos días después del triunfo de Javier Milei en el balotaje. Durante esa larga jornada en el Galpón 15, donde todo fue encuentro, “teje” y celebración, se asentó una declaración de principios: la comunidad LGBTI+ rosarina estaba lista para resistir, desde lo comunitario, la llegada de un gobierno que ya había anticipado su postura sobre las identidades disidentes. El 2024, en un contexto de creciente hostilidad y odio hacia las personas LGBTI+, planteó un escenario complejo para sostener un festival de gran despliegue que se desarrolla de manera autogestiva e independiente. “La verdad es que yo me negué durante mucho tiempo a que lo hiciéramos. Mara insistía en que lo hiciéramos igual, en este contexto de crisis política, social, económica y mental. Y de pronto empezaron a resonar algunas veces que necesitaban activar la gestión cultural, tener un proyecto que les convoque, de esos que te llegan al corazón. Casualmente eran las mismas personas que habían formado parte del equipo de Nación Trava en 2023”, contó Igna en diálogo con La Capital. Rápidamente, la dupla desplegó la red y se convocó un equipo que empezó a avivar la llama del entusiasmo y del compromiso en común. “Hay algo de generar una acción en la militancia de la cultura colectiva. Creo que esa anécdota tiene que ver con eso”, apuntó por su parte Mara. Nación Trava no es un festival como cualquier otro, sino que surge de una necesidad de hacer y pensar la cultura por fuera de las formas que rigen este tipo de eventos. En ese sentido, hubo otra escena que incentivó a la dupla a lanzarse nuevamente a la aventura. Embed Ver esta publicación en Instagram Una publicación compartida de Capra Producciones (@naciontrava) Un festival por fuera de la norma “Estábamos con la Igna en una charla con gente re zarpada que hace festivales en todo el país, y veíamos que la disidencia y nuestra comunidad habita otras lógicas que no van a entrar nunca ahí. Creo que esa fue la señal de que había que hacer Nación, que este festival se tiene que institucionalizar, porque se sale de las lógicas heteronormadas que maneja la industria festivalera de este país”, detalló Prat. “El año pasado Nación planteaba hacer las cosas a través de una lógica más travesti, y este año con el contexto de un gobierno nacional que bastardea a la cultura y las identidades LGBTI, más que nunca necesitamos hacer esto. Acá no hay una empresa ni sponsor que bajan plata. Tuvimos que salir con una gorra virtual para poder bancarlo”, agregó la gestora. Esas “formas travestis” no tienen que ver necesariamente con una cuestión identitaria, sino de modos. “Me parece que generalmente en los proyectos donde rigen lógicas heteronormadas, hay una idea de una chispa ignífuga, creadora, que posee todo. La persona que tuvo esa idea es dueña de todo y toma todas las decisiones. Nosotras a las personas que forman parte de nuestro equipo las convocamos sin una idea muy preestablecida sobre de qué manera podían participar”, compartió Igna. “Apostamos a que el proyecto se construya desde distintas miradas, desde cuestiones que podrían pensarse como más funcionales como es un equipo de producción técnica, a cuestiones más sensibles como el diseño de la identidad gráfica o cómo se comunica en redes. En eso, invitamos a que las personas se apropien de la idea y construyan sobre eso. No tenemos una mirada absoluta sobre cómo se construye este festival y qué representa”, sumó. Embed Ver esta publicación en Instagram Una publicación compartida de Capra Producciones (@naciontrava) >> Leer más: El Festival Nación Trava celebra y resiste desde una mirada disidente A su vez, la idea de Nación tampoco tiene que ver con la llamada “inclusión”, sino proponer un abordaje integral. “Es difícil para una travesti ir a una sala de ensayo que está llena de chabones rockeros tomando cerveza. Entonces no tiene que ver solamente con poner a una travesti arriba del escenario, sino con pensar en ese día a día de todas”, subrayó Mara. Desde la alianza de “gestorxs, técnicxs y artistas” que hacen el festival aseguraron: “Necesitamos movimiento, porque la inmovilidad es cómplice del silencio que nos intenta invisibilizar. Necesitamos espacios, porque merecemos un lugar en la cultura que refleje nuestras identidades y nuestras luchas. Necesitamos voz, porque nuestras historias y vivencias deben ser escuchadas. Y, sobre todo, necesitamos encuentro, porque es en la colectividad donde encontramos la fuerza para seguir adelante”. Esta nueva edición no se piensa meramente como continuidad sino como evolución, como un crecimiento que permite explorar los matices dentro de la Nación. “El año pasado el festival tenía que ver con presentar la Nación Trava, con fundarla. Este año tiene más que ver con pensar qué sucede en esa Nación y cuáles son las formas las diversidades ahí adentro. Siempre decimos que no es un lugar sólo para travestis, sino que deja solamente lo paki, lo heteronormado por fuera”, aseguró Mara. “No es todo lo mismo, hay intersecciones. Hay personas que militan más o viven su vida desde el antirracismo, otras que lo hacen desde lo travesti, tenemos voces de lesbianas migrantes. Eso tiene que ver con el crecimiento de la Nación, con ir conociéndonos más y mostrar las distintas aristas”, cerró.
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