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» Misionesparatodos
Fecha: 13/11/2024 20:55
“Si la economía no se pone al servicio de las personas, los números pueden dar, pero a largo plazo necesitamos asegurar la vida de las personas”, sostuvo Marcelo Colombo, quien sucederá al obispo Oscar Ojeda al frente del Episcopado. Las posibilidades de la visita del Papa al país y la visión de lo que implica su nuevo rol al frente de la Iglesia Católica. En un país de contrastes sociales, el monseñor Marcelo Colombo invita a priorizar a la gente sobre las cifras. El nuevo presidente del Episcopado expresa la necesidad de una economía que favorezca a toda la sociedad. “Los números pueden dar, pero la economía tiene que garantizar la vida de las personas”, enfatizó. Por otra parte, brindó su opinión sobre la posible visita del papa Francisco a nuestro país. “Sería el mimo de Dios para un pueblo que lo está necesitando”, aseguró en Modo Fontevecchia, por Net TV, Radio Perfil (AM 1190) y Radio JAI (FM 96.3) El arzobispo de Mendoza, Marcelo Colombo, sucederá al obispo Oscar Ojea al frente del Episcopado. ¿Qué se siente estar sentado en su nuevo cargo, una especie de “silla eléctrica” en un país como la Argentina, presidiendo la Comisión Episcopal Argentina? Sobre todo mucha responsabilidad, conciencia de las limitaciones naturales que todos tenemos, y el deseo de servir. Este tipo de cargos son instrumentos al servicio de la gente. La iglesia está para servir. Es un momento muy particular de la Argentina, con noticias buenas de la macroeconomía pero muy negativas de la microeconomía. Esto nos lleva a una discusión epistémica, ¿dónde está lo bueno? ¿Cuál es su propia perspectiva sobre esto del sufrimiento que están pasando los Argentinos mientras se anuncia una estabilización de la macroeconomía? Por supuesto, nada sin las personas. En el origen de la economía están las personas. Si la economía no se pone al servicio de las personas, los números pueden dar, pero a largo plazo necesitamos asegurar la vida de las personas. Recién hablábamos con el ex canciller, Rafael Bielsa, y le preguntábamos qué sentía al ver la cantidad de argentinos que viajan a comprar allí. Me imagino que en Mendoza se percibe ese desplazamiento. ¿Qué siente usted al ver este movimiento? Bueno, nosotros tuvimos un doble movimiento. El año pasado, durante la primera mitad del año, tuvimos muchos chilenos viniendo a comprar. Al punto que los supermercados tuvieron que organizar horarios especiales. Esto fue excepcional, es cierto, pero también un desafío a la interacción comercial de los países. En realidad estamos bastante acostumbrados, sobre todo en Mendoza, al intercambio y a la interacción con Chile, porque hay una interacción muy estrecha. De manera que, más que la queja que uno pudiera tener por la gente que tiene que viajar a otro país para comprar más barato, hay una cuestión cotidiana del mendocino, familias que prestan servicios al otro lado de la frontera, un gran intercambio. Me pasaba lo mismo cuando era obispo en Mendoza, había muchos profesionales que trabajaban en Chile. Me gustaría alguna reflexión suya sobre el papa y la posibilidad de que visite la Argentina. Para nosotros es un deseo ferviente. La visita del Papa sería el mimo de Dios para un pueblo que lo está necesitando. Por otra parte, como sabemos, no solamente por “la agenda”, como se dice, sino por muchos focos, como Oriente Medio, los conflictos en varios países del mundo, lo tienen muy tomado. Seguimos rezándole a todos los santos, como decía esta mañana y siempre apostando a que este año se pueda dar. Claudio Mardones: Se especula mucho con la visita del Papa este año, incluso con los preparativos que realiza el Vaticano seis meses antes. ¿Ha tenido alguna información al respecto de que hayan comenzado o vayan a comenzar esos movimientos en la Santa Sede? No todavía. La Santa Sede está muy abocado a la planificación del año jubilar. Roma está prácticamente tapiada por los arreglos que se están haciendo en todos los monumentos para recibir a miles y miles de turistas. Creo que eso también, a nivel religioso, es muy importante por el flujo de actividades que tiene que organizar la Santa Sede. Los famosos jubileos de los distintos sectores de la comunidad eclecial, aboca a la secretaría de Estado y a quienes organizan con cierta antelación. Seguramente, si se iniciara ese proceso, en algún momento nos avisarán. Todo está muy supeditado a la agenda del año santo, el año jubilar. “La visita del Papa sería el mimo de Dios para un pueblo que lo está necesitando.” CM: ¿Cuáles fueron las principales preocupaciones de la asamblea del Episcopado en el onceavo mes de Javier Milei como presidente de la Argentina? Temas internos nuestros que tienen repercusión. Por un lado, la misión. La Iglesia existe para evangelizar, eso nos preocupa, estar presentes en el mundo de la evangelización anunciando a Jesucristo en un sentido integral, no solo en la dimensión religiosa, sino como la presentación de un Dios que se encarna y asume la historia humana. En segundo lugar, lo sinodal. Hemos celebrado un sínodo en Roma, pero queremos que todas nuestras estructuras reflejen ese clima sinodal de deliberación, consensos y reflexión de todas las voces. Tercer punto, las regiones. Queríamos representar en la comisión ejecutiva a todo el país y creemos que lo hemos logrado bastante. Lo regional quiere ser, para nosotros, como un llamado de atención a tener en cuenta a todo el conjunto. Estos han sido los grandes temas. En relación a lo social y lo político, la iglesia siempre se concibe como una parte de la sociedad que quiere cumplir una misión. La de prestar un servicio. El ícono de la iglesia quiere ser el del buen samaritano. En la relación institucional, siempre toda nuestra disposición para dialogar, crear consensos y buscar lo mejor para la gente. Para que los números y la gente estén de acuerdo. Elizabeth Peger: ¿Cómo definiría en una palabra o una frase el desafío central del nuevo lugar que ocupará? Recién lo resumía en tres palabras: misión, sínodo, regiones. Esto lo transportamos al terreno de lo social, porque anunciamos un Dios concreto, presente en la vida de la gente y preocupado por la gente. Lo sinodal: es decir, todas las voces, todas los aportes, toda la gente adentro. Lo regional: Somos un país con una gran variedad de culturas y presencias. Que ninguna se caiga del mapa. Que todas tengan su propia voz en el conjunto de la Argentina. EP: ¿Pedirán alguna reunión con el presidente Javier Milei? No sabría decirle si hay alguna prevista en agenda. En general está el saludo de fin de año, como este año lo tuvimos al comienzo, no sabemos si volveremos a tener la suerte de saludar al señor Presidente, pero por supuesto, siempre a disposición.
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