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Gualeguaychu » El Argentino
Fecha: 06/11/2024 16:30
El pasado 28 de octubre se celebró en los Tribunales de Gualeguaychú un proceso penal abreviado en torno a un caso que despertó una gran indignación por el tener de los hechos, que involucró a dos menores de edad, con uno de ellos en grave estado de salud, y un conductor que estando borracho los atropelló y escapó. El hecho sucedió el 15 de septiembre por la madrugada, en el acceso a Villa Paranacito. Astorga manejaba una Peugeot Partner con 1,85 gramos de alcohol en sangre, y atropelló a Bailatti de 17 años, que caminaba junto a su novia a un costado de la calzada. El joven fue inmediatamente trasladado al Hospital Centenario, donde se mantuvo en grave estado. Ingresó en la unidad de Terapia Intensiva con un diagnóstico de hematoma cerebral de carácter reservado. En tanto, la chica recibió politraumatismos varios y escoriaciones y hematomas múltiples en ambas rodillas. El conductor alcoholizado fue detenido cuando intentaba abandonar el camping de su tío donde se encontraba pasando el fin de semana, y desde allí fue trasladado a la Jefatura Departamental de Gualeguaychú. En su entrevista ante la fiscal Martina Cedrés, en la cual se abstuvo de declarar, fue imputado de “lesiones gravísimas y lesiones leves culposas en concurso ideal, causadas por la conducción antirreglamentaria de un vehículo a motor, doblemente agravados por la situación de fuga y por el nivel de alcohol en sangre”. Tras atropellar a los dos adolescentes, Astorga intentó darse a la fuga. Fue hasta el lugar donde se encontraba alojado y al emprender hacia la salida de Villa Paranacito debió pasar por el lugar del accidente y fue allí donde lo detuvieron. Esto fue clave para el fiscal de Islas del Ibicuy, Gastón Popelka, porque esa acción fue advertida de que existe un riesgo de fuga y sirvió para fundamentar su pedido de prisión preventiva. Cuando el hombre atropelló a los adolescentes, perdió uno de sus espejos retrovisores en el lugar y esto sirvió para identificarlo posteriormente. Una pareja que había frenado a asistir a las víctimas, comenzó a frenar a los vehículos que transitaban en sentido contrario y así fue como advirtieron la presencia de la Peugeot Partner a la que le faltaba el espejo retrovisor. El utilitario tenía claros signos de haber sido el que atropelló a los jóvenes: tenía una óptica rota y el parabrisas marcado. La mujer que tenía el retrovisor en la mano lo increpó: “fuiste vos”, y el hombre trató de escapar, pero el otro sujeto que la acompañaba le cruzó su vehículo para impedir que huyera. Posteriormente, Popelka requirió la prisión preventiva por considerar que su acción de intentar huir hacia su provincia era una señal que se estaba ante un riesgo procesal, pero finalmente el juez Telenta dictó un arresto domiciliario hasta el 1 de noviembre, que cumplió en un domicilio de Gualeguaychú, pero antes de que esa fecha venciera se realizó el juicio abreviado. El 28 de octubre y ante el juez Arturo Dumón, Astorga decidió adecuarse a un procedimiento para el cual debió reconocer su responsabilidad civil y penal. Fue así que se acordó la pena de 2 años y seis meses de prisión condicional con la anuencia de todas las partes, además de imponerle una inhabilitación por cinco paños para conducir vehículos automotores. Respecto al estado de salud del adolescente, logró salvar su vida tras las primeras intervenciones, pero aún se mantiene en recuperación ambulatoria.
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