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Buenos Aires » Infobae
Fecha: 05/11/2024 05:13
Aprender a definir límites es crucial para evitar el agotamiento y garantizar que los cuidadores puedan mantener su energía y calidad de atención a lo largo del tiempo *Grupo INECO es una organización dedicada a la prevención, diagnóstico y tratamiento de enfermedades mentales. A través de su Fundación, INECO investiga el cerebro humano. El Día Internacional del Cuidador es una fecha dedicada a reconocer y honrar a aquellas personas que dedican su tiempo y energía al cuidado de otros. Los cuidadores desempeñan un rol crucial en nuestra sociedad, ya que son el soporte y el sostén de personas que necesitan atención y acompañamiento constante, como adultos mayores, personas con enfermedades crónicas como las demencias, o personas con necesidades diferentes. Sin embargo, el rol de cuidador también puede traer consigo altos niveles de estrés y desgaste emocional. Cuáles son los desafíos y recompensas de ser cuidador y consejos prácticos para cuidar de uno mismo mientras se cuida a los demás. El rol del cuidador Un cuidador es una persona que asume la responsabilidad de asistir a otro en sus actividades diarias y necesidades básicas. Este rol puede ser asumido de manera formal, como en el caso de trabajadores de salud y asistentes de enfermería, o informal, cuando un familiar o amigo cercano cuida a alguien sin recibir un salario a cambio. Los cuidadores suelen proporcionar apoyo en actividades cotidianas como alimentación, higiene, medicación, y, a menudo, también en la gestión emocional y psicológica de la persona cuidada. Entre las características del rol de cuidador se encuentran: Dedicación : El cuidador dedica una parte considerable de su tiempo y energía a asistir al otro. Empatía y paciencia : Ser cuidador implica entender y acompañar a la otra persona en sus dificultades. Responsabilidad: A menudo, los cuidadores sienten una responsabilidad emocional y moral hacia la persona a la que cuidan. Riesgos y desafíos de ser cuidador La constante responsabilidad de cuidar desgasta tanto física como mentalmente. Practicar el auto-cuidado es fundamental para mantener el equilibrio (Imagen ilustrativa Infobae) “Ser cuidador es un rol noble y esencial, pero también conlleva numerosos desafíos. El desgaste físico y emocional del cuidador puede ser considerable, lo que puede llevar al llamado síndrome del cuidador”, menciona la licenciada María Fernanda Giralt Font, jefa del Departamento de Psicoterapia de INECO y directora del curso de posgrado Abordaje cognitivo conductual del estrés en la Universidad Favaloro. Algunos de los riesgos y desafíos más comunes son: Estrés crónico : Las demandas constantes y la presión emocional de cuidar a alguien pueden llevar al estrés crónico, que a su vez puede desencadenar problemas de salud como insomnio, problemas digestivos y fatiga. Agotamiento emocional : También conocido como burnout, el agotamiento emocional (pérdida de energía y vitalidad), surge de la carga constante de trabajo emocional sin descanso suficiente. En general va a acompañado de la disminución de la satisfacción por la tarea (fracaso en las expectativas y logros personales) y la distancia emocional o una actitud negativa hacia la persona sobre la que se realiza el cuidado. Aislamiento social: Muchos cuidadores dedican tanto tiempo a sus responsabilidades que pierden contacto con amigos y familiares, sintiéndose cada vez más aislados. A pesar de los sacrificios, cuidar de los demás puede traer un profundo sentido de propósito y gratificación emocional difícil de experimentar con otras actividades (Imagen Ilustrativa Infobae) Problemas de salud: El estrés prolongado y la falta de descanso pueden tener consecuencias negativas en la salud física y mental del cuidador. Aspectos positivos del rol del cuidador A pesar de los desafíos, ser cuidador también tiene aspectos positivos y recompensas personales: Satisfacción personal : Muchos cuidadores encuentran una gran satisfacción y sentido en saber que están ayudando y haciendo una diferencia en la vida de otra persona. Crecimiento emocional: Ser cuidador puede fomentar habilidades de empatía, paciencia y resiliencia. Para seguir brindando un apoyo efectivo, quienes asisten deben priorizar su propia salud física y mental mediante prácticas que promueven el bienestar (Imagen Ilustrativa Infobae) Conexión significativa : Cuidar a alguien puede fortalecer el vínculo emocional y generar una relación significativa y profunda. Desarrollo de habilidades: A través del cuidado, se pueden adquirir habilidades útiles, como la organización, la resolución de problemas, y el manejo de situaciones estresantes. Cinco ejercicios prácticos para el cuidado de los cuidadores Para que un cuidador pueda seguir brindando apoyo de calidad, es esencial que cuide de su propio bienestar. La licenciada Giralt Font, propone una serie de ejercicios para ayudar a los cuidadores a reducir el estrés y mejorar su bienestar. Ejercicio: Dedicar cinco minutos al día para hacer ejercicios de respiración profunda. Sentarse en un lugar tranquilo, cerrar los ojos y respirar lentamente, contando hasta cuatro mientras se inhala, y hasta seis mientras se exhala. La respiración profunda ayuda a reducir el estrés y a disminuir sus síntomas fisiológicos. Beneficio: Al reducir los niveles de cortisol (hormona del estrés), la respiración profunda va a ayudar a mantener una mente más tranquila y enfocada. Ejercicio: Definir un tiempo para dedicarse a uno mismo. Este tiempo puede ser utilizado para leer, caminar o simplemente descansar. Hacer que este espacio personal sea una prioridad y comunicarlo a quienes nos rodean. Beneficio: Establecer límites es fundamental para evitar el agotamiento. Cuando nos damos permiso para desconectar, es posible recuperar la energía emocional y física necesaria para cuidar a otros. Ejercicio: Conectarse regularmente con amigos, familiares o grupos de apoyo de cuidadores. Si es posible, intentar asistir a reuniones presenciales o virtuales con otros cuidadores, donde compartir experiencias y aprender de otros en situaciones similares. Beneficio: Tener una red de apoyo puede reducir la sensación de aislamiento y dar un espacio para expresar emociones y preocupaciones. Ejercicio: Hacer una lista de pequeñas actividades que relajen, como tomar un baño caliente, escuchar la música favorita o salir a caminar en la naturaleza. Intentar incorporar una de estas actividades a la rutina diaria. Beneficio: El cuidado personal es esencial para recargar energías y mejorar el estado de ánimo. Cuando nos dedicamos tiempo a nosotros mismos, también estamos mejor preparados para cuidar de otros. Ejercicio: Cada día, intentar identificar al menos una cosa positiva que haya sucedido. Puede ser una pequeña mejora en la persona a la que cuidamos o un momento agradable del día. Anotar esta experiencia y leerla cuando nos sintamos desmotivados. Beneficio: Cambiar la perspectiva ayuda a reducir el estrés y a cultivar una mentalidad más resiliente. Practicar el pensamiento positivo también puede mejorar el bienestar emocional. El Día Internacional del Cuidador es una oportunidad para reconocer la labor invaluable que realizan los cuidadores en todo el mundo. Si bien es un rol que conlleva desafíos y sacrificios, también puede ser profundamente gratificante. Para que los cuidadores puedan brindar un apoyo efectivo y amoroso, es fundamental que se cuiden a sí mismos. Practicar estos consejos y ejercicios puede ayudarlos a reducir el estrés, mejorar su bienestar y continuar con su labor de una manera más equilibrada y saludable.
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