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» El Santafesino
Fecha: 01/11/2024 15:24
Se trata de un trabajo conjunto con el Ministerio de Salud de la provincia, y el objetivo es mejorar la seguridad de los edificios, del equipamiento y el personal de los efectores públicos. El centro de monitoreo municipal recibirá la alerta y se derivará al 911 para dar una respuesta inmediata ante una vandalización o intrusión. En esta primera etapa se comenzará con 11 centros y luego se extenderá progresivamente a los 37 restantes. Facebook Twitter WhatsApp En el Centro de Salud de barrio Loyola Sur, el intendente Juan Pablo Poletti y la Ministra de Salud de la provincia, Silvia Ciancio, presentaron la primera etapa de un trabajo en conjunto para mejorar la seguridad en los centros de atención primaria de la salud. Para eso, los sistemas de alarma de los efectores ubicados en distintos barrios de la ciudad de Santa Fe se conectarán progresivamente a la sala de monitoreo de la municipalidad. En una primera etapa, el monitoreo alcanzará a 11 centros de salud que requerían este refuerzo de seguridad para prevenir hechos de vandalismo y robos, mediante el seguimiento de la sala, que trabaja en coordinación con el 911. Para planificar la conexión, en los primeros meses del año se hizo un relevamiento del estado de los equipos de alarma, se actualizaron técnicamente los que era necesario y se hizo el mantenimiento para garantizar las condiciones técnicas, entre otras tareas. En la ciudad hay 48 centros de salud, de los cuales uno es municipal. En esta primera etapa, 11 contarán con el monitoreo y son los centros de salud Policlínico Centenario, Varadero Sarsotti, Barranquitas Oeste, Villa Hipódromo, Setúbal, La Loma, Los Troncos, Loyola Sur, Abasto, Pompeya y CIC San Martín de Porres. Pero se continuará trabajando para sumar el resto y así llegar a tener el seguimiento de todos los efectores. En primer lugar, el intendente manifestó su alegría por “este trabajo en equipo” y luego agregó: “agradecemos la decisión de la ministra de Salud por priorizar estas decisiones de poner en valor los sistemas de alarma o de seguridad para garantizar el trabajo del primer nivel de atención. Esto indirecta o directamente favorecen a los vecinos, porque un centro de salud vandalizado significa que ese día no puede abrir y todos los vecinos se quedan sin la atención”. “Hoy estamos juntos, municipalidad y provincia, por los vecinos, por los trabajadores, para poder garantizar que suene esa alarma en el centro de monitoreo, que se dispare la llamada al 911 y que inmediatamente se pueda llegar”, destacó Poletti. Trabajo conjunto Por su parte, Ciancio también destacó el trabajo conjunto que “es una base indispensable para pensar políticas públicas” y luego agregó: “la verdad que deseo con todo mi corazón es que las alarmas no suenen. Que podamos pensarnos en un momento absolutamente sensible, cómo miramos, cómo cuidamos, cómo nos cuidamos con los usuarios de este centro de salud. Ese es el bien social que tenemos y que tenemos que reflotar”. Cómo funcionará Por último, el subsecretario de Seguridad Ciudadana municipal, Claudio Zapata, recordó que, en 2013, los centros de salud habían dejado de estar monitoreados, producto de falta de mantenimiento de las alarmas. La decisión de la municipalidad y en conjunto con la provincia, a través del nodo Centro Norte de Salud, fue poder rehabilitar la mayor cantidad de alarmas. Luego explicó cómo funcionará: “esta alarma es análoga, semejante a una alarma domiciliaria. Cuando se ingresa hay un tablero donde se va a poner un código que tendrá el empleado ya sea enfermero, médico o personal del centro de salud, y el que va a cerrar va a hacer lo mismo. El centro de monitoreo va a recibir la alerta como en una alarma domiciliaria, es la alerta ante una vandalización o ante la detección de una intrusión o una apertura de puerta vandalizada”.
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