01/11/2024 14:23
01/11/2024 14:23
01/11/2024 14:23
01/11/2024 14:23
01/11/2024 14:22
01/11/2024 14:22
01/11/2024 14:22
01/11/2024 14:22
01/11/2024 14:21
01/11/2024 14:19
Buenos Aires » Infobae
Fecha: 01/11/2024 12:31
La nafta y el gasoil aumentarán por debajo del 3% promedio en todo el país, menos en la Patagonia (Gastón Taylor) Desde este viernes primero de noviembre comenzó a regir un nuevo aumento en los precios de la nafta y el gasoil, luego de que en octubre las petroleras aplicaran las primera baja en casi seis años. La suba informada por YPF fue del 2,75% en todo el país, mientras que en la Patagonia los incrementos estarán un poco por encima de ese porcentaje. La suba se aplicará para compensar el efecto de la devaluación y la actualización del impuesto a los combustibles, por lo que no tendrá un adicional para acercarse a los precios internacionales. Si bien este mes hubo volatilidad en los valores del crudo, que superó los USD 80 por barril, sobre el final del mes hubo una descompresión que lo llevó más cerca de los USD 70 por barril. En ese contexto, Infobae desarrolló una calculadora que, a partir de los precios de referencia para la Ciudad Autónoma de Buenos Aires que se estiman para los surtidores de la petrolera con mayor presencia en el mercado, permite presupuestar cuánto va a costar llenar el tanque. La nafta súper de YPF, líder local con cerca del 60% del mercado, pasará en CABA de $1.048 a $1.077 por litro, según los precios reportados en el portal Surtidores. Este es el segmento de combustible más vendido. Por su parte, la nafta premium pasó de $ 1.296 a $ 1.332 por litro. Por su parte, el gasoil aumentó de $1.062 a $1.092 por litro y el nuevo precio del gas oil premium es de $1.092 por litro. Llevado al costo de tanques de nafta se puede tomar, por ejemplo, el del FIAT Cronos, el auto más vendido en la Argentina, que carga 45 litros. En este caso, llenar el tanque con nafta súper cuesta $48.465 y con nafta premium, $59.940 en total. Estos valores reflejan un encarecimiento que no solo afecta a los automovilistas sino también incide en el costo de bienes que requieren transporte, como los alimentos. Entre los SUV, un Nissan Kicks tiene un tanque de 41 litros, un Chevrolet Tracker de 44 litros, un Toyota Corolla Cross naftero (no híbrido) carga 47 litros, un Volkswagen Taos o un Honda HR-V de anterior generación 50 litros y un Ford EcoSport, 52. En esta categoría podrían entrar también un Chevrolet Spin, que tiene un tanque de 53 litros, o un Renault Duster, que carga 51 litros en sus tres opciones 4x2 o 50 litros en la versión de tracción integral. La nafta súper de YPF, líder local con cerca del 60% del mercado, pasará en CABA de $1.048 a $1.077 por litro (Imagen ilustrativa Infobae) Si hablamos de camionetas compactas, una Chevrolet Montana carga 44 litros, una Renault Oroch 45 litros, Volkswagen Saveiro 55 litros, Fiat Toro 60 litros y Ford Maverick 64 litros. Entrando a la categoría de camionetas medianas, también conocidas como de una tonelada por su capacidad de carga, prácticamente todas tienen la misma capacidad del tanque de combustible en 80 litros. Estas son Ford Ranger, Volkswagen Amarok, Toyota Hilux, Renault Alaskan y Nissan Frontier. En cambio, la Chevrolet S10 tiene un tanque de 76 litros. Cómo reducir el consumo de la nafta En un contexto de precios crecientes, es fundamental adoptar prácticas que permitan reducir el consumo de nafta. Algunas recomendaciones incluyen: Mantenimiento regular del vehículo: asegurarse de que el automóvil esté en buenas condiciones, incluyendo la presión adecuada de los neumáticos, puede mejorar la eficiencia del combustible. Conducción eficiente: evitar aceleraciones y frenadas bruscas, mantener una velocidad constante y utilizar la marcha adecuada pueden disminuir significativamente el consumo de nafta. Reducir el peso y la resistencia: evitar llevar cargas innecesarias y reducir la resistencia al viento (por ejemplo, quitando portaequipajes no utilizados) puede mejorar la eficiencia del combustible. Planificación de rutas: utilizar rutas que eviten congestiones de tráfico y elegir caminos más cortos o eficientes puede reducir el tiempo de viaje y, por ende, el consumo de combustible. Uso de tecnologías eficientes: considerar vehículos con tecnologías de ahorro de combustible, como sistemas start-stop o vehículos híbridos, puede ser una inversión a largo plazo para reducir el gasto en nafta.
Ver noticia original