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» Sin Mordaza
Fecha: 23/10/2024 18:12
La victoria electoral de Javier Milei puso en marcha en la Argentina un cambio importante en las formas de hacer política. ¿Hacia dónde vamos? Es una de las preguntas que las personas se hacen. Gustavo Marangoni, politólogo, docente y exfuncionario de varias gestiones políticas, nos brinda su visión de la situación política. “A dónde marcha o a dónde el Gobierno quiere que marche es hacia una economía donde el Estado tenga ostensiblemente menos presencia, no solo menos presencia en cuanto a su tamaño, sino también menos presencia en cuanto a la cantidad de regulaciones. Nosotros como sociedad construimos un artefacto político raro, porque a lo largo de todo el año pasado para votar gobernadores, intendentes, diputados, senadores nacionales, provinciales, elegimos entre la oferta habitual y para votar presidente se eligió alguien outsider. Entonces ahora tenés que combinar como gustos distintos, formas de ver y de administrar que muchos aspectos difieren”, señaló en el aire de Cadena Oh! Leer también: El Gobierno emitió una resolución para iniciar jubilaciones masivas en el Estado “Te diría que Milei parece que interpretó bien dos cosas: primero, que el estilo Alberto Fernández, ese de levantarse cada mañana y terminar el día sin decidir y explicando en las 24 horas por qué no tomaba decisiones, y que su propósito era mantener el equilibrio, había generado una fatiga enorme en los argentinos. Entonces Milei es desicionista, es decir, toma decisiones. Y la segunda, que ya mencionamos, que tiene que ver con el tema del Estado en la Argentina, parece que ese norte lo tiene muy claro. Ayer lo puso en palabras a mi criterio muy adecuadamente, el expresidente Mauricio Macri dijo: ‘bueno, miren, Milei siempre se propuso ser alguien que venía a destruir muchas cosas, no a construir, que venía a ejercer una tarea de demolición’, y está cumpliendo con eso. Entonces ahí tenemos lo que Milei interpreta y ejecuta en estos 10 meses de gestión”, agregó. Mercado laboral “La Argentina cambió sustancialmente en los últimos años. Te diría que el cambio más importante, de las últimas décadas, es que la sociedad salarial desapareció. De las 22 millones de personas que están en condiciones de trabajar, solamente seis millones están registrados. Después tenés tres millones y medio de empleados públicos a nivel provincial, nacional y municipal, ahí juntamos casi 10 millones, que no alcanza a hacer la mitad de la gente que trabaja. La otra mitad tiene o un empleo no registrado, más o menos seis millones y medio de argentinos, un millón y medio están desempleados y cuatro millones están en ese grip, que es el monotributo, el trabajo doméstico y después los autónomos. Ese cambio en la matriz del trabajo, obviamente, conlleva un cambio muy importante en las conductas políticas”. Leer también: El Gobierno Nacional anunció el inicio de la privatización de Trenes Argentinos Cargas “Te encontrás con una sociedad que está fragmentada desde el punto de vista de sus ingresos económicos, que tiene muchas frustraciones por las que quiere castigar, que se nutre informándose desde un teléfono celular y que las conductas se tamizan por ahí. Si en la década del 40 Perón fue Perón porque interpretó la nueva tecnología que era la radio, cuando todavía la otra sociedad estaba más con la cultura letrada de los diarios, ahora Milei interpreta la era de las redes, con todo lo que eso implica y las características específicas que tiene Argentina”. El Estado “El Estado, en sus tres niveles, Nación, Provincia y municipios, se ha convertido en muchos aspectos de la vida cotidiana en una carga pesada, ya sea por la vía fiscal o por la vía de las regulaciones. Probablemente en algunos casos se exageren y muchas veces uno tiende a simplificar y a decir ‘todo el Estado’ y a lo mejor hay sectores que funcionan bien, otros sectores funcionan regular y otros sectores funcionan mal. Pero lo cierto es que en los últimos años el Estado quedó en la picota y hay motivos para sostener que necesitaba una serie de modificaciones. Hay épocas donde la gente quiere que el Estado tenga mucha presencia y en otros que se retire un poco; nos cuesta probablemente, como en otros ámbitos de la vida, a los argentinos encontrar el punto intermedio”, finalizó el analista político. Escucha la nota completa acá.
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