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» Elterritorio
Fecha: 20/10/2024 14:44
Con raíces agrícolas y ganaderas, el pueblo fue fundado en 1911 con la llegada del ferrocarril y su historia está marcada por la figura de Martín de Alzaga domingo 20 de octubre de 2024 | 6:00hs. Mechongué es una pequeña localidad ubicada en el oeste del Partido de General Alvarado, a solo 47 kilómetros de Miramar. Este encantador pueblo, conocido por su entorno rural, se encuentra inmerso en una región de fuerte actividad agrícola y ganadera. Su estructura productiva está centrada en la generación de materias primas, lo que refleja la vida rural típica de la zona. La historia de Mechongué comienza con el Señor Martín de Alzaga, reconocido como el fundador de esta localidad, quien le dio el nombre en honor a su hija, Mercedes. La elección del sitio fue estratégica, pues se ubicaba como un punto intermedio entre Lobería, Balcarce y Miramar. La llegada del ferrocarril, en 1911, marcó un hito en su desarrollo. Este logro fue posible gracias a las gestiones de Alzaga, quien era propietario de varios establecimientos agropecuarios en la región. Aunque el pueblo fue oficialmente aprobado por el gobierno provincial el 22 de enero de 1927, la llegada del tren fue considerada la fecha fundacional de Mechongué, ya que este medio de transporte facilitó el comercio y la conectividad con otras localidades. A lo largo de los años, Mechongué evolucionó lentamente, consolidándose como un centro de comercio y servicios para la comunidad local. La fundación de la escuela Nº 9 en 1924 y la posterior iniciativa de Marcelino Peláez para replantear el pueblo en 1925 fueron pasos significativos en su desarrollo. Durante las décadas siguientes, la localidad experimentó un crecimiento moderado pero constante, con la apertura de nuevos comercios y la consolidación de la comunidad. Mechongué fue reconocido como la Capital Nacional de la Amistad, un título que refleja la calidez y hospitalidad de las personas que viven allí. Este distintivo se alinea con el apodo de “Pago Lindo”, que refuerza el sentido de comunidad en ese pueblo. Es un lugar lleno de historia y tradiciones, donde la comunidad celebra sus raíces a través de varios atractivos. Club social y deportivo Desde su fundación el 22 de diciembre de 1926, el Club Social y Deportivo Mechongué ha sido un pilar en la vida social y deportiva del pueblo. Organiza eventos importantes como la Fiesta del Camionero y el Agricultor, así como bailes y actividades recreativas que unen a los habitantes en celebraciones comunitarias. La fiesta más popular del pueblo, es la denominada Fiesta del Camionero y del Agricultor, que se desarrolla durante el mes de febrero y cuenta de 3 días (viernes a domingo) donde se puede disfrutar de puestos de comida, exposición de bailes folclóricos, cantores y bailantas; prueba de riendas y la elección de las nuevas soberanas quienes representaran su fiesta y localidad durante un año a través de las diferentes fiestas populares. Mechongué desarrolla su economía sobre la base de la ganadería vacuna y agricultura (papa, girasol, trigo y soja principalmente) La Fiesta Regional de los Camioneros y del Agricultor que se realiza la 2º semana de marzo desde 1972 en el Club Social y Deportivo de Mechongué. Cabe destacar que empezó siendo solo fiesta del camionero en ese año y luego, años más tarde decidieron agregar al agricultor ya que es tan importante como el camionero y así quedó entonces con el nombre completo que se conoce actualmente. El viejo almacén Uno de los almacenes de ramos generales más destacados es el de Spadari. Fundado por Cayetano Spadari en 1926, este almacén se convirtió en un emblemático punto de encuentro para los habitantes del pueblo. Originalmente, el negocio comenzó vendiendo vitrolas, discos y bombones, pero con el tiempo se transformó en un típico almacén de ramos generales, ofreciendo una amplia variedad de productos. Cerró sus puertas a fines de 2021, tras casi un siglo de funcionamiento. Aún se pueden observar dos antiguos surtidores en la vereda, recordando el pasado comercial de la localidad. Plaza Independencia Este espacio verde es el corazón de la comunidad, donde se realizan celebraciones y actividades recreativas. En su interior se encuentran monumentos a figuras significativas como Perón, Evita y el cantautor local Tito Ramos. La plaza está rodeada por la iglesia y la gruta de Nuestra Señora de Lourdes, así como el Centro Cultural y la Delegación Municipal, convirtiéndola en un punto de encuentro social. Museo y estación ferroviaria Desde 1994, un grupo de mujeres emprendedoras formó un "Grupo Cultural" que buscó preservar la historia y cultura de Mechongué. En 1996, con el apoyo de la municipalidad, se restauró la antigua estación de tren, que ahora alberga un museo y una biblioteca. Este espacio no solo sirve como un centro de conservación de la memoria local, sino que también promueve las artesanías y manifestaciones culturales del pueblo. Nuestra Señora de Lourdes La capilla que no se debe dejar de visitar es la de Nuestra Señora de Lourdes. La capilla, inaugurada en 1993, es un símbolo de la fe local y se diseñó por el arquitecto Miguel Dellepiane. La Virgen de Lourdes fue declarada patrona de Mechongué en 1975. La capilla está adornada con finos detalles, como el sagrario elaborado por el orfebre Juan Marra y un Cristo del altar mayor que data del siglo XIX. Espacios de recreación Además de su rica historia, Mechongué ofrece a sus visitantes espacios para la recreación. Uno de los circuitos aeróbicos, ubicado cerca del museo de la estación ferroviaria, permite a los residentes y visitantes disfrutar de actividades al aire libre. Este espacio de 600 metros está equipado con aparatos para ejercicio, promoviendo un estilo de vida saludable en la comunidad. Accesibilidad Mechongué se encuentra a una distancia accesible de la Ciudad de Buenos Aires y ofrece un paisaje rural idóneo para quienes buscan tranquilidad y conexión con la naturaleza. A través de su rica historia y tradiciones, este pintoresco pueblo se presenta como un destino ideal para aquellos que desean experimentar la calidez y hospitalidad de su gente. Con sus atractivos históricos y culturales, Mechongué se posiciona como un lugar encantador para visitar y explorar, reflejando el espíritu de una comunidad unida y trabajadora que ha sabido conservar su legado a lo largo de los años.
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