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» Diario Cordoba
Fecha: 20/10/2024 14:38
Hassan, el marroquí de 41 años detenido en la madrugada de este martes, en la calle Marcos del Torniello de Avilés, al haberse convertido en "una bomba de relojería", tras autorradicalizarse y haber empezado a lanzar llamadas a la yihad –guerra santa en árabe– en las redes, había pasado totalmente desapercibido tanto para sus propios vecinos como en el barrio de Sabugo, donde residía junto a su mujer, a escasa distancia de los Juzgados avilesinos. Y ello a pesar de que vivía rodeado de basura. "¡Lo que teníamos aquí y nosotros viviendo tan tranquilos!", comentaban los vecinos este sábado al enterarse de la detención de este albañil en paro que odiaba todo lo occidental y estaba a punto de pasar a mayores. Consumidor habitual de drogas, el detenido era un viejo conocido de la Policía, con antecedentes policiales por tráfico de drogas, hurtos y robos, lo que le hizo pasar por la cárcel, donde se sospecha que pudo entrar en contacto con yihadistas y comenzar su proceso de radicalización, como ocurre en buena parte de estos casos. A Hassan le iba bastante mal. Los agentes que entraron en su casa la encontraron en condiciones de gran insalubridad, ya que se acumulaba mucha basura en el interior y había grandes desperfectos. La Policía empezó a investigarlo a principios de este año, después de que los agentes descubriesen que había un individuo radicalizado que lanzaba proclamas en favor de la yihad a través de las redes sociales. Eso le puso en el foco de los agentes de la Comisaría General de Información y la Brigada Provincial de Información de Asturias, que comenzaron a escrutar su vida y sus comunicaciones, siempre bajo la dirección del Juzgado Central de Instrucción número Cinco y de la Fiscalía de la Audiencia Nacional. Durante las pesquisas, los agentes descubrieron que este albañil había "interiorizado la ideología yihadista" y se mostraba muy activo en redes sociales, donde contaba con un montón de seguidores a los que remitía contenido multimedia favorable al terrorismo islámico. En las redes, no se cortaba en mostrar su odio hacia todo el modo de vida occidental e incitar directamente a la yihad. Por ejemplo, llamaba al levantamiento de los musulmanes de la ciudad de Melilla y se mostraba a favor de la causa palestina y en contra de Israel. Hassan era plenamente consciente de que estaba cometiendo un delito. Para dificultar la acción de las fuerzas de seguridad, adoptaba todo tipo de medidas de seguridad. Los agentes descubrieron que el albañil no dejaba de hablar del martirio y presentaba ideaciones suicidas, lo que precipitó su detención en la madrugada del martes. Los agentes registraron su domicilio e intervinieron diverso material informático. Ahora se están analizando los mensajes que lanzó y el material que tenía en sus aparatos. Tres operaciones Desde el año 2012, y con la de este martes en Avilés, la fuerzas de seguridad del Estado han realizado un total de tres operaciones contra el yihadismo en Asturias, con otros tantos detenidos. En octubre de 2016 fue detenido en el barrio gijonés de La Calzada Abdellah Ouelji, un yihadista fiel al Daesh. Aunque radicalizado, no tenía pensado atentar en Asturias. En 2018 fue condenado a cinco años de cárcel. El Mapa de la lucha contra el terrorismo yihadista del Ministerio del Interior, con datos actualizados hasta julio de este años, también incluye una operación con un detenido en Oviedo. En al cárcel de Asturias había a finales del año pasado hasta cuatro reclusos por su radicalización yihadista. Al centro penitenciario acuden imanes de forma regular para tratar de evitar que los presos musulmanes inicien un camino de fanatización que les conduzca a cometer atentados.
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